Paseabas por los pasillos del cuarto piso, cuando una chica llamada Lucy, te alcanzó para darte un mensaje.
- ________, la profesora Sprout te busca, está en el invernadero-
- Gracias, ahora voy-
Caminaste sola hasta donde te indicaron, al entrar descubriste que aquello era una mentira, pues sólo encontraste a Sirius, besándose apasionadamente con Marlene McKinnon, de algún modo, sabías que una aventura entre ellos, o con cualquier otra chica guapa, era inevitable, porque él era así, pero no imaginabas el dolor que te causaría. Intentaste salir de ahí sin hacer ruido, para tu mala suerte, golpeaste un balde metálico y notaron tu presencia.
Te quedaste quieta en el lugar, con los ojos cerrados, al abrirlos ellos se había separado y te miraban fijamente. Sirius estaba algo avergonzado, pero Marlene era una combinación de diversión y enfado, parecía disfrutar el verte allí.
- Yo..lo siento, estaba buscando a la profesora Sprout.-
- Obviamente, no está aquí- Espetó con burla McKinnon.
- No soy ciega o estúpida, Marlene-
Diste media vuelta, decidida, fingiendo que aquello no te importaba. Pero Sirius, salió de su trance y caminó tras de ti, en ese momento no querías oírlo o si quiera verlo, al notar sus pasos, paraste y sin girarte, te dirigiste a él.
- Sirius, no por favor...mejor regresa con ella-
- Debes escucharme, no...- Te tomó por el brazo, esperando detenerte.
- Será mejor que hablemos después.-
Soltó su agarre, dejando que siguieras con tu camino, avanzaste lo más rápido que podías. Con mucho esfuerzo, conseguiste llegar a tu habitación aparentando tranquilidad, pero en cuanto encontraste a tu amiga, Louise, te derrumbaste.
-¿Qué pasa?- Preguntó sorprendida cuando la abrazaste.
- Lo vi besándose con Marlene, Lou- Llorabas desconsoladamente.
- Amiga, lo siento mucho...Pero- Dijo tratando de consolarte, sin embargo debía ser sincera contigo.
-Lo se, no somos nada- Refunfuñaste desanimada, sorbiendo por la nariz.
-No entiendo porque no conoces a más chicos- Louise, compartió su punto de vista, logrando que dejaras de llorar.
- ¿Que? ¿Salir con otros chicos?- Afirmó con la cabeza
-¿Por qué no? Con suerte podrías conocer a alguien que te haga olvidarlo- Sugirió mientras se sentaban en tu cama
- Podría ser, tienes razón.- Si analizabas tu "relación" con Sirius, no tenían nada acordado, aparentemente solo se querían y compartían algunos momentos, pero aceptaste estar con él sin compromisos.
Pasaron unos días hasta que tu dolor y enojo, se calmaron, mantenías distancia con él y para tu sorpresa lo respetó, aunque siempre te miraba, como tratando de leer tu mente. La época de exámenes estaba cerca y la tomaste como pretexto para, después de clases, esconderte algunas horas en la biblioteca, él casi nunca entraba ahí, hasta que una de esas tardes Sirius se acercó a tu mesa.
- ¿Qué pretendes?- Dijo golpeando sus puños contra la madera, haciéndote saltar en tu asiento.
- ¿Qué te pasa?- Preguntaste con el ceño fruncido, te sentías enfadada, esa no era manera de hablarte.
- ¿Por qué actúas como no hubiese pasado nada?-
- Porque no creo que tenga que enojarme contigo.- Hablaste con una calma, que ni siquiera tú creías- No me obligaste a nada y yo acepté lo que ha pasado entre nosotros, aún sabiendo que no me prometiste "exclusividad". Está muy claro para mi, que no quieres compromisos.- Creías fielmente en tus palabras, a fin de cuentas, eran verdad. Sirius, se quedó sorprendido con tus palabras y sin ánimo se dejo caer en la silla que estaba frente a ti.
- Me sorprendió verte ahí-
- Alguien me dijo que la profesora me buscaba-
- Pensé que harías una escena de celos, o así-
- Tengo orgullo, no podría caer tan bajo- Te dirigiste a él riendo, volviendo tu mirada a un libro.
- ¿Desde cuando usas lentes?- Cambió drásticamente de tema, haciendo que te confundieras.
- Casi un año, los necesito para leer- Dijiste obvia.
- ¿Puedes quitártelos?-
- ¿Te molestan?-
- No, pero te ves muy sexy...y no sabes que pensamientos cruzan por mi mente- Murmuró acercándose a ti, mientras acariciaba tu pierna por debajo de la mesa.
- Sería bueno que aprendieras a controlarte- Dijiste con sarcasmo.
- Ya sabes que me cuesta mantener mis manos lejos de ti-
- ¿Y de Marlene?- Levantaste la vista del libro, sin ocultar tu molestia.
- ¿Estas celosa?- Inquirió divertido, levantando una ceja.
- Mucho, pero eso ya lo sabías-
- ¿Ya no quieres verme?-
- Me gustas mucho y quiero seguir saliendo contigo...pero decidí que debo conocer a más chicos-
-¿Para que? ¿Quieres que sienta celos?- Insinuó, frunciendo el entre cejo.
- No, ni te lo digo para pedirte permiso o cualquier cosa así- Te defendiste algo molesta con su actitud.
-¿Necesitas conocer a más personas?
- Si me gustan, no veo porque no. Tu sales con casi toda las chicas de Hogwarts.- Suspiró fastidiado.
- Sabes que nadie es, o será mejor que yo, ¿Verdad?-
- No estés tan seguro-
- Siempre regresarás, como yo a ti.- Te besó con pasión, mordió tu labio inferior y sin más salió de la biblioteca.
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Sirius Black
FanfictionAquí encontrarás la historia que, personalmente, me habría gustado para este fantástico personaje. Es una recopilación de todos los capítulos ya publicados en mi "obra" Los Merodeadores, si es la primera vez que leés algo escrito por mi ¡Bienvenidx...