Era una mañana fría, lo cual era raro ya que era verano, la falta de calidez se debía a las nubes grises que advertían la tormenta que caería sobre el colegio. Poco a poco el Gran Comedor se llenaba de alumnos y del personal de Hogwarts, que querían desayunar. Sirius cruzó la puerta perdido en sus pensamientos, quería olvidar la causa de su inquietudes, mas no podía ignorar el primer sentimiento que lo invadió al comenzar el día, soñó que se separaba de _______, en medio de la guerra contra el innombrable y le resultaba abrumador pensar que la única persona que lo hacía seguir adelante, se iba.
Tomó asiento junto a sus amigos, repasando una y otra vez los recuerdos que tenía de aquel sueño. Por más que trataba de mantener sus sentimientos bajo control, las preguntas de los demás merodeadores no lo ayudaban, la comida llegaba a su boca por simple inercia, en si, toda acción que realizaba era de esa manera, esto hizo que se preocuparan por él, pocas veces lo habían visto tan callado y nunca era una buena señal. Aunque todos trataban de animarlo, no sabía cómo mejorar, pues solo tú, tenías la respuesta que él necesitaba.
Por varios minutos, se dedicó a buscarte con la mirada recorriendo el lugar y fue el sonido de tu risa lo que le ayudó a ubicarte, sin perder tiempo, se acercó a ti.
- Quiero hablar contigo, es importante.- Susurró en tu oído, su tono de voz era tranquilo, sin embargo, sus palabras crearon angustia en ti.
- ¿Me das tiempo a desayunar? No tardaré.- Asintió sonriendo y te besó suavemente, antes de regresar con sus amigos.
- ¿Todo bien?.- Preguntó Louise, preocupada por tu expresión.
- No lo se, espero que sí.- Alzaste los hombros, ya no sentías hambre.
Los días en Hogwarts estaban por terminar para ambos, dentro de poco, sería el principio de su verdadero camino y las cosas no resultaban muy alentadoras. Sin embargo, el cielo gris y las pésimas noticias que circulaban por el Londres mágico, no afectaba a lo mucho que disfrutaban de su compañía, al parecer nada lo hacía.
A pesar, de que la coloración de las nubes, relámpagos y el sonido de los truenos, anunciaban la cercanía de una gran tormenta, ustedes seguían sentados en la orilla del Lago Negro, platicando de las clases, planes para el fin de semana, básicamente cualquier idea que pasara por sus mentes. Era sorprendente que pocas veces, se quedaran sin tema para hablar, pero ésta vez, él quería despejar sus dudas.
- Necesito saber algo.- Dijo Sirius, fijando su vista a algún punto del paisaje.
-¿Que?.-
- Si llegaramos a separarnos, por lo que sea...¿Me olvidarás?..- Preguntó con el entrecejo fruncido, dirigiéndote una mirada profunda, como si quisiera leer tu mente.
- No, no creo ser capaz de olvidar al amor de mi vida. He pensado en eso y siempre llego a la misma conclusión, sé que terminaría buscándote inconscientemente en otras personas.- Hiciste una pausa.- Tal vez, si eres feliz sin mi, me obligaría a aprender a quererte de otra manera, pero olvidarte ¡Jamás!.- Fuiste sincera, sin embargo, su expresión mostró claramente que no le gustó tu respuesta, haciendo que te incomodaras.- ¿Tu me olvidarías?.-
- No, pero a mí no me importaría si estás con alguien más o no, no trataría de cambiar lo que siento por ti y ¿Sabes porque?.-
- No, ¿Porqué?.- Preguntaste curiosa.
- Porque, sé que no hay nadie más para mí que tú.- Sonrió y sentiste como tú corazón aceleraba sus latidos.- Soy muy terco, así que volvería una y otra vez para tratar de recuperarte.-
- ¿Porque crees que nos separaremos?.-
- La verdad, tuve un presentimiento está mañana.- Suspiró pesadamente antes de continuar.- De que nos separaremos, aunque algo me asegura que encontraré el camino de vuelta a ti.-
- No quiero separarme de ti, pero si sucede, debes saber que nadie será capaz de ocupar tu lugar.- Tomaste su mano y la acariciaste, por un momento se perdieron en sus miradas.
- Es lo que necesitaba escuchar.- Mencionó emocionado.- No me había enamorado antes y se que si no eres tú, no será nadie.- Te sonrojaste involuntariamente y sonreíste.- Deberías sentirte afortunada.-
Agitaste la cabeza y rodaste los ojos, un poco fastidiada con su arrogancia, aparentemente infinita.- Deberíamos entrar al castillo, lloverá pronto.-
Como si la madre naturaleza te hubiese escuchado, al terminar la oración, las gotas de lluvia comenzaron a caer con fuerza, mojando todo a su paso. Haciendo caso a tu instinto de sobrevivencia, comenzaste a caminar rápidamente de vuelta al castillo.
- ¿Donde vas?.- Gritó Sirius, quien se había quedado en el mismo sitio y giraste sobre tus talones para verlo nuevamente.
- Esta lloviendo, deberíamos estar en un lugar seco.- Sugeriste, la lluvia era intensa, tanto que no les permitía ver bien, porque el agua escurría por sus rostros.
- ¿Porqué? No seas aburrida.- Él caminó hacia ti, con una sonrisa que te pareció fabulosa, provocando que respondieras con el mismo gesto.
- No lo soy, pero es lógica.- Levantaste las manos, señalando las nubes.
- A-bu-rri-da.- Rodó los ojos, fingiendo enfado.
- ¿Ah si? Entonces según tú ¿Qué deberíamos hacer?.- Recargaste tu peso en una pierna, cruzándose de brazos y alzando una ceja.
- ¿Me concedes esta cursi pieza?.- Estiró su mano hacia ti y la tomaste con desconfianza.
-¿Cual pieza?.- Te reíste de él, al mismo tiempo que pasaba su mano por tu cintura y te acercaba a su cuerpo.
- La que se te ocurra.- Ríe.- Pero que sea cursi ¿De acuerdo?.- Se balancean lentamente, de un lado a otro, tu simplemente te dejas llevar por sus pasos.
- Bailas bien.- Admitiste.
- Gracias, tu también.-
- Al menos, no podemos estar peor.- La lluvia había bajado su intensidad, te detuviste a tratar de exprimir tu ropa, esperando sentirte menos incómoda.
- Claro que podemos.- Con un movimiento rápido, te cargó sobre su hombro y corrió hasta la orilla del lago, lanzándose contigo al agua.
Moviste los pies bajo el agua, tan rápido como pudiste, Sirius te ayudó a salir a flote y sin decir nada, soltaron una carcajada estruendosa. Se sentía completo a tu lado, no importaba el lugar o las condiciones, en tí encontraba todo lo que necesitaba y más, además, momentos como ese, le daba la clave exacta para estar seguro de que no importaba lo que pasara en el futuro, de una u otra forma, encontraría el camino de vuelta a ti, pues eran el uno para el otro.
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Sirius Black
FanfictionAquí encontrarás la historia que, personalmente, me habría gustado para este fantástico personaje. Es una recopilación de todos los capítulos ya publicados en mi "obra" Los Merodeadores, si es la primera vez que leés algo escrito por mi ¡Bienvenidx...