Roma...
Sentir su pequeño cuerpo...
Sentir su calor...
Me encanta.
Las últimas cuatro noches Roma se ha quedado a dormir en casa y de aquí nos vamos a la escuela, ella tiene algo de ropa aquí y me encanta eso porque su ropa de ve realmente pequeña al lado de la mía.
Roma estaba durmiendo y yo había despertado hacia un rato, me levante fui al baño, me di una ducha, envolvi la toalla a mi cintura y salí.
Roma estaba sentada de mi lado de la cama, envuelta con las sabanas y me recorrió de pies a cabeza como si fuera a saltarme encima en dos segundos.
—¿Puedes dejar de hacer eso?—Dije apoyándome ligeramente contra el mueble
—¿Hacer que?—Se hizo la inocente.
—Mirarme como si fueras a violarme.
—Las cosas han cambiado Lukibú.
No dije nada entonces ella continuó hablando—Antes te miraba con deseo y eras como lo prohibido y eras algo que quería probar, ahora que ya lo hemos hecho varias veces y ya se que es bueno te miro esperando que se haga la noche para hacerlo otra vez—Hizo una pausa—Pero tienes que controlarte un poco porque vas a dejarme coja.
Una risa salió de mi y me senté aún con la toalla puesta a su lado, le tire una mirada provocante—¿Uno rapidito?—dije poniendo mi mano en su pierna.
Roma me recorrió una vez más más con la mirada, se mordió el labio inferior con lujuria para luego sacarse la sabanas y dejar sus pechos expuestos, se subió a horcajadas sobre mi y comenzó a besarme, la tome del trasero y la levante suavemente para abrir mi toalla y dejar mi pene expuesto, ella solo tenía bragas y una ligera tela separaba nuestras zonas del roce directo. Roma se movía sutilmente sobre mi, lo que hacía que mi pene se pudiera cada vez más duro.
Estaba a punto de tirarla en la cama y hacerla mía cuando ella mordió mi labio y se separó lenta y juguetonamente de mi, se puso de pie y me dio una sonrisa de suficiencia.
—Voy a ducharme—Dijo sonriendo y bajando momentáneamente la mirada de mis ojos a mi pene.
—¿Vas a dejarme asi?.
—Mmmm—hizo como si pensara—No.
Se acercó a mi nuevamente y me dio un beso corto en la nariz para después dirigirse al baño.
—Esto es cruel y doloroso—dije escuchando como se cerraba la puerta del baño.
—No poder sentarme en todo el día también fue doloroso.
Tenía razón pero de todas formas no me gustaba que me dejara así.
—Ya ven a ducharte conmigo—dijo Roma desde el baño.
***
Luego de la ducha con Roma nos vestimos, desayunamos rápido porque llegaríamos tarde y nos fuimos a la escuela en la camioneta.Al llegar teníamos clase de matemáticas juntos, ayer tuvimos un examen y hoy nos entregarían los resultados.
Nos sentamos juntos y la profesora Richards entregaba los exámenes, paso a un lado de Roma y le entregó su examen —Diez Collins, como siempre—dijo dejando la hoja sobre la mesa, entregó otro par de exámenes y llegó al mío. Yo era pésimo en matemáticas, nunca entendia nada, a veces me dormía, era un desastre en esta materia y cuando ví mi hoja mi calificación era un dos. Estaba frito.
La profesora Richards fue al frente del salón y habló—Hay cuatro alumnos a los que les va horriblemente mal en la materia, no dire sus nombres porque ellos saben que lo son, para esos alumnos tomaré un examen extra en el que podrán recuperar los saberes perdidos este año para que no adeuden la materia, además del examen final que se toma por año para todos y esta clase será de repaso para todos pero en especial para esos alumnos ¿Todos entendieron?.
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La Chica De La Dulce Voz [✔]
Teen FictionAh pasado un año desde que Luke entro en coma, el día de su despertar empieza a recordar una voz. La dulce voz de una chica y ahora no descansará hasta encontrarla. "A veces solo tienes que despertar para encontrarla"