CAPITULO: 25 " ENEMIGO MÍO "

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¡¡Trae más licor mujer y apúrate!! - Dijo el dueño de aquel lugar.

Los gritos del hombre se escucharon desde el fondo de un largo pasillo, pidiendo más bebida, ésta enfurecida por no poder hacer nada dijo a uno de sus empleados.

- Ve y llévale a tu señor estos licores, no quiero ver nada de esa atrocidad. - Dijo llorando, sintiéndose incapaz de nada.

El sirviente obedeció sin decir una palabra.

Dentro de su angustia y desesperación salió corriendo hacia la puerta principal, miró la calle estaba desierta la lluvia había calmado y el viento era muy frío.
Caminó bajando las escalinatas, no sabía a quién recurrir, angustiada empezó a golpear puertas pero nadie respondía a sus llamados.
Comenzó a gritar :- ¡¡Puede alguien ayudarme por favor!! ¡¡Necesito que alguien me ayude!! - Su llanto ahogaba su voz, pero no se desánimo tenía esperanza que un corazón noble la ayudara.

Se alejó bastante del burdel, buscando algúna persona que la socorriera, de pronto un hombre con una lámpara se arrimó a ella e intrigado le preguntó :- Señora que le sucede, algún espíritu maligno la a atacado. Dígame.

Por favor ayúdeme, tiene que venir conmigo a la casa de citas. Están varios hombres abusando de un jovencito y el es como un hijo para mí. - Explicó con la esperanza que la ayudara.

Señora soy un viejo que ni fuerzas tiene, que podría yo hacer. - Dijo este con tristeza.

La mujer lo miró y se alejó sin decirle ni una sola palabra.

¡Señora no se vaya sé de alguien que tal vez pueda ayudarla! - Dijo gritando para que ésta lo escuchara. :- ¡Por favor regrese!

La mujer regresó corriendo hacia él y preguntó :- ¿Quién es? ¡Por favor dígame!

Un joven cultivador, que vino del pueblo vecino. Una familia lo ha buscado está tarde porque un espíritu aterrador ronda por su casa y destruye sus cultivos. - Explicó el anciano lo más breve posible.

Y ¿Cómo lo encuentro? - Dijo desesperada.

No hace más de unos minutos me preguntó la dirección de la familia que ha sido atacada por ese espíritu maligno y yo le indique el lugar. - Respondió señalando el lado norte de la ciudad :- Si se apura lo alcanzará y tal vez se apiade de usted y le ayude.

Gracias buen hombre los dioses lo favorezcan. - Dijo y se alejó corriendo en busca de ese cultivador.

Rogaba que la ayudará y que no sea muy tarde.
Corrió con todas sus fuerzas hasta la salida del pueblo, no vió nada ni a nadie, la desesperación y la angustia la invadian cada vez más y comenzó de nuevo a gritar :- ¡¡Por favor que alguien me ayude!! ¡¡Es urgente por favor!!

Nadie se encontraba en esos lugares, estaba sola y desconsolada se resignó tirándose de rodillas al suelo y exclamando dijo :- ¡Pobre mi Xue Yang nadie puede ayudarte, ni yo siquiera! - El llanto se escuchaba claramente en el silencio de la noche.

Una voz resonó en la oscuridad :- Señora se siente bien. ¿Qué le pasa? -
Sintió unos pasos acercarse y se detuvieron junto a ella.

Estoy desesperada, alguien tiene que ayudarme. - Respondió mirando con la poca luz que brindaba las últimas linternas que se encontraban encendidas en la salida del pueblo.

Dígame qué le sucede, ¿por qué está llorando? - Respondió éste ayudándola a levantarse.

Ella lo miró y por su forma de vestir era el cultivador que estaba buscando y con urgencia lo tomó de los brazos y le dijo :- Usted es el joven maestro que se dirige en búsqueda del espíritu maligno que está atacando a una de las familias de agricultores.

Una Oportunidad Del DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora