CAPITULO 40 " UNA NOCHE DE REVELACIÓN"

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No fue fácil soportar los cambios que hubo ese día, pero apesar de todo no eran tan malos. Por lo menos el plan de Xingchen resultó, aunque Xue Yang no le daba ni una décima de que iba salir bien.
Toda la tarde pasaron discutiendo Song Lan y él, mientras que Wen Ning trataba de apasiguar la situación junto con A-Qing, quién los acompañaba.
Los demás compartieron buenos momentos junto a Xingchen y Jian Min, quiénes eran muy amables con sus invitados.
Todos cenaron y rieron juntos, aunque Xue Yang y su enemigo no cruzaron palabras en todo ese tiempo.
Cuando decidieron descansar para reponer energías, Xue Yang invitó a Wei Wuxian a beber algo a las afueras de Ciudad Yi.

Te prometo maestro que no te arrepentirás, es un lugar muy agradable y además hay muy buen licor. La noche aún es joven y no es justo ir a dormir tan temprano. - Dijo mirando el cielo estrellado.

Ya que insistes te acompañaré pero debemos regresar enseguida. No podemos ausentarnos por mucho tiempo. - Dijo Wei Wuxian sonriendo.

Claro maestro que volveremos pronto. Solo será un rato nada más. - Respondió sin problemas. :- Pero espérame aquí afuera solo un momento. Debo asegurarme que todos esten dormidos.

Está bien, pero apresúrate. - Sonrió al decirlo.

Xue Yang se aseguró de eso, y tomó con mucho cuidado a Jiangzai sin cometer ningún error.

Vamos, ya la tengo conmigo. - Dijo mostrándole la espada. :- Es que Xingchen la cuida. - Y agregó sonriendo :- Tengo algo de dinero, lo suficiente para divertirnos. Yo invito, así que no te preocupes por nada. - Aclaró subiendose en Jiangzai.

De todas maneras yo también llevo algo de dinero - Le mostró sacando una bolsita muy linda de finas sedas.

Xue Yang rió y le dijo :- Esa bolsa de dinero no es tuya maestro, no me digas que ahora robas.

No, no, como crees. Lo tome prestado de Lan Zhan. Sé que no me dirá nada. - Explicó subiendose a la espada junto a Xue Yang.

Claro, entiendo. Cómo se enojaría si se trata de tí. - Lo dijo con sarcasmo.

No mal interpretes las cosas, solo somos buenos amigos. - Le aclaró.

Siii. Xingchen y yo también lo somos. Pero con la única diferencia que Xingchen es tan pobre como yo. - Se rió al decirlo y agregó :- Además, si sabe que le saco solo una décima es capaz de no hablarme por un largo tiempo.

Pues hace bien, tu debes ser un desastre como administrador. - Dijo riéndose.

Un poco, pero también sé que no debo excederme. Y tú cómo haces para que tú compañero te de dinero sin preguntarte en que gastas.

¿Cómo sabes que yo gasto plata de Lan Zhan? - Dijo muy curioso.

Pues se nota, él no te negaría nada. No soy tonto, me doy cuenta de muchas cosas. - Respondió soltando una risa burlona.

La emoción de Xue Yang fue inexplicable, no era que cumpliría con lo que le dijo a Lan WangJi , que le invitaría a beber licor y luego lo besaría a Wei Wuxian, sino todo lo contrario lo único que deseaba era disfrutar de su compañía. Tal vez podría darle una ayuda al joven maestro, ya que no se animaba a decirle nada a su compañero.
Lo único que le preocupaba era el enojo de Xingchen si este descubría su escape y que además, lo llevó a Wei Wuxian a ese sitio que el aborrecía, nunca lo perdonaría sin contar que dejaría de hablarle por unos días, tal vez semanas y eso para él era mortal.
Odiaba que Xingchen lo ignorara por completo. Recordó la promesa que le hizo a su compañero y era que no volvería en aquellos lugares.
Pero ahora es un caso especial, no todos los días se encontraba con el joven maestro quien admiraba tanto.
Debía beber un buen licor junto a él, no era grave después de todo.
Lo sería claro está si Lan WangJi lo descubriera, ya que interpretaría mal las cosas, pero bueno que posibilidades había en que se despertara...

Una Oportunidad Del DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora