CAPÍTULO 32 "VENGANZA"

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Maestro Xue Yang usted no se cansa, podemos parar de correr un momento por favor - Suplicó el jovencito tratando de seguir su ritmo.

Eres un inútil, debemos encontrar a esos hombres y a la mujer de inmediato. - Respondió sin detenerse.

Jian Min se detuvo de pronto al oír un grito ahogado que venía de ese carruaje que se encontraba a lo lejos oculto entre los arbustos.

Maestro Xue Yang mire allí están - Señaló el joven tratando de recuperar el aliento.

No hagas ruido se darán cuenta y no me importaría si te matan. - Le advirtió en voz baja.

Maestro son muchos, no podremos ayudar a esa mujer mejor vamos por el maestro XingChen. - Recalcó con miedo y agregó :- Además no tenemos espadas para defendernos.

Nose para que quieres una si no sabes cómo usarla - Aclaró riéndose :- Te matarías tu mismo y ya deja de insistir  no hace falta molestar a XingChen nosotros podemos manejar la situación.

Pero Maestro ... - Fue interrumpido

¡¡Ya cállate!! Si eres cobarde desaparece de mi vista. - Dijo molesto sacando su cuchillo.

Claro que no maestro yo voy a ayudarlo, no me iré - Respondió armándose de valor.

Si es así no me saques la paciencia, toma mi cuchillo y escucha bien lo que diré, nunca pero nunca dudes cuando alguien te ataca piensa siempre que tú puedes derribar por más imponente que se vea tu adversario. Solo debes pensar en tu vida y nada más - Le aconcejó mirando como el muchacho se encontraba pálido y sonriendo colocó su cuchillo en la mano del jóven y cerrándola le indicó - Desde este momento el será una parte tuya, no lo sueltes por más que pierdas todas tus fuerzas, si vas a atacar espera los movimientos primero de tu agresor, fija un objetivo y que tú ataque sea letal. Si decides usar el filo pásalo por su cuello, si vas a introducir que sea en algún órgano vital. ¿Entendiste? Asegúrate siempre que esté muerto antes de bajar la guardia.

El jovencito empalideció aún más al escuchar las recomendaciones, sentía una mezcla de sentimientos. Nunca pensó estar en esa situación y no podía negarse, pero tampoco tenía el coraje de asesinar a alguien.

Maestro Xue Yang haré todo lo posible para no defraudarlo. - Afirmó intimidado por la mirada de éste.

Idiota no es por mí que tienes que hacer esto sino por tí, para no morir - Respondió malhumorado :- No estaré cuidándote como una niña.

Y usted Maestro como se protegerá si me dió su cuchillo. - Preguntó muy curioso.

Depende como está la situación llamaré a Jiangzai, eso significaría advertir a XingChen del problema. - Recalcó pensativo y agregó :- Demoraría unos minutos en llegar, tiempo suficiente para matarlos a todo y rescatar a la mujer.

Maestro tendrá más tiempo de lo que piensa porque el maestro XingChen dejó las espadas en su habitación, siempre lo hace porque usted nunca sale a ningún lado. - Dijo el joven mirando a los hombres.

Xue Yang sonrió divertido :- Eso quiere decir que demoraría en darse cuenta de lo que está ocurriendo, más aún si está entretenido con A-Qing tejiendo los canastos.

Así es maestro - Respondió Jian Min y recordó de pronto el resto de la frase de su Maestro y dijo :- pe..pero usted pi..piensa matar a todos esos hombres.

¿¿Tú no?? - Se rió :- Ya vamos que no escucho a esa mujer gritar.

Caminó hacia ellos y Jian Min por detrás de él ocultando el cuchillo en su manga. Los hombres giraron al notar que se acercaban. Un quejido se oía más claro proveniente del carruaje.

Una Oportunidad Del DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora