Una Oportunidad Del Destino

CAPITULO 6 - CONDICIONES.

Fue el viaje más largo de su vida, Xiao XingChen solo quería llegar a su casa. Se sentía cansado, engañado, y todo lo que podía definir la palabra decepción. ¡Hasta cuándo seguiría confiando así en las personas! Se dijo.

Xue Yang maldecía el momento, su plan de nuevo frustrado como siempre, ya se le estaba haciendo costumbre que todo le salga mal. Pero en la situación en que ahora se encontraba era la peor de todas. Dependía solo de su enemigo si quería permanecer junto a él, y eso implicaba sumisión de su parte, cosa que iba a ser difícil soportar y menos por mucho tiempo. Tampoco quería dejarlo ir, ni matarlo... ¿Qué haría entonces?

Pensó durante todo el camino de regreso, debía buscar una posible y razonable solución de inmediato. XingChen pretendía entregarlo para que sea juzgado de nuevo por las sectas. Según para él eso era justicia. Si realmente decidía eso, tendría que asesinarlo, prefería verlo muerto antes que lejos de su compañía y mucho menos con otro, como compañero de vida.

Jamás iría a prisión o que lo condenarán a muerte. Si debía morir sería en manos de su querido enemigo o bien hacer lo imposible por convencerlo de alguna manera, para que le perdonara por no haberle dicho la verdad desde un principio. Y si suplicar, arrodillarse y perder su orgullo, iba a lograr el perdón y que le permitan quedarse con ellos entonces valía la pena. Era ahora o nunca.

Antes de entrar a la casa Xue Yang le dijo: - Te ayudaré a llegar a tu habitación. Solo debes dejar que te lleve.

Está bien - Respondió con disgusto - Pero luego déjame sólo.

El joven asesino se controló antes de responder, sabía que no era momento para discutir, ya que de una pequeña chispa, se haría una hoguera: - Reconoce que necesitas ayuda, por más que esa ayuda sea de tu enemigo. Sé que me odias, hasta te provocó repugnancia pero ... - Fue interrumpido por XingChen.

No te odio, ni eres repugnante, solo estoy muy molesto contigo por varias razones que tú ya conoces. - Dijo acomodándose en la espalda del muchacho, para que luego lo llevará.

Fue un alivio escuchar eso, era una luz de esperanza para poder llegar al perdón.

Te propongo una tregua, ¿Estás de acuerdo? - Le preguntó rogando que aceptara .

Pensó que era una buena idea dentro de todo, así tendría tiempo de analizar la situación detenidamente.

Respondió: - Solo por esta noche, nada más. - Su voz sonaba áspera.

Al abrir la puerta la niña se encontraba allí, ahora muy alegre al ver a su amigo. Pero trató de disimular que no sabía quién entraba.

- ¿Eres tú Daozhang? - Preguntó.

Sí, somos nosotros - Respondió XingChen, muy calmado para que la jovencita no se diera cuenta de nada.
No era buen momento para explicarle todo.

Ella vió la escena pero no pudo preguntar nada, era obvio que estaba herido o golpeado, aunque no sabía bien dónde.

¿Te hicieron daño? - Preguntó, su curiosidad la delataba.

Solo está con unos golpes y problema en su tobillo izquierdo. - Respondió Xue Yang, sin ganas de entrar en detalles - Sirve para algo y prepara todo para que XingChen se bañé y luego pueda comer algo y descansar. - Dirigiéndose con él a su habitación, lo dejó al costado de la cama.

Sabía que A-Qing sería la favorita después de esta noche y él quedaría en un rincón olvidado sin tener la oportunidad de decir nada cuando ella se burlara de él.

La jovencita hizo lo que él muchacho le ordenó sin decir nada.

Aunque el joven maestro, sí contestó al escuchar lo que dijo el muchacho.