Capítulo 35: Marineford Parte 1

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Demon había logrado esquivar de milagro un disparo de luz de Kizaru, pero la patada que vino después, aún habiéndola bloqueado, le hizo mucho daño.

-No va a ser fácil acabar contigo-dijo sonriendo mientras se rascaba la cabellera azul-Aunque claro, no sería divertido luchar contra un almirante si fuese fácil, ¿no?

-Eres un hombre muy interesante-le respondió Kizaru con su lenta voz-Primero eras un esclavo, luego fuiste un asesino, pasaste a ser el líder de los asesinos, el líder del CP9 y ahora eres un pirata. Solo te queda ser marine.

-¡JAMÁS!-gritó a todo pulmón-Todos vosotros os aprovecháis del poder que tenéis como marines para tomaros la justicia por vuestra mano. Sois capaces de pedir por una cría de ocho años una recompensa exagerada... Dais vergüenza.

Ayudándose del soru se lanzó sobre él y, prediciendo con el haki de observación sus cinco siguientes movimientos, lanzó un golpe del rey bestia que dio de lleno en el almirante.

-¡INCREÍBLE!-exclamaron los marines-¡Ha logrado asestar un golpe al almirante Borsalino!

-Vaya... Me ha dolido.

-Ja...Ja...Mentiroso-rio Demon-Aún así, no eres tan rápido como crees, Mono Amarillo.

Kizaru inclinó la cabeza ligeramente.

-Subestimas el poder de la luz, asesino Demon-le respondió.

-Y tú... tú subestimas el poder de los gatitos.

El cuerpo entero de Demon se cubrió de una poderosa aura de poder y comenzó a crecer en tamaño, alargándose sus colmillos y sus garras, quedando imbuidas de haki.

-Vaya... Eso no es un gatito-dijo sudando el almirante-Da miedo... Parece que fuiste bien entrenado en el uso de tu zoan.

Demon estaba jadeando, cansado por el combate, pero no se iba a quedar atrás, así que comenzó a correr a toda velocidad alrededor de Kizaru, haciendo que su imagen se distorsionase y pareciese que había varios clones de Demon dirigiéndose hacia él.

-Vaya, vaya... Me lo pones difícil, asesino Demon... Veamos como te defiendes de mi espada de luz.

Borsalino creó una gran espada de luz y, tras desaparecer, cortó por la mitad a todos los falsos Demon, logrando atravesar con la espada el abdomen del verdadero, no sin antes recibir un zarpazo en el rostro por parte de Demon.
Él cayó de rodillas, escupiendo sangre.

-Mierda...-farfulló dolorido, pero sonriendo con sangre goteando de su boca, mientras Kizaru preparaba un disparo de luz-Pensaba que te retendría más tiempo... Parece que ha llegado mi momento...

-¡Y UNA MIERDA!-escuchó de pronto que decían dos voces.

Un puño de veneno pasó junto a su rostro y se estampo contra Kizaru, justo para una espada bloquease el disparo de luz dirigido a su cabeza.

-No dejaremos que nos separéis de nuevo-dijo Olive sujetando la catana que había bloqueado el disparo.

-Da igual a que fuerza nos tengamos que enfrentar-asintió de acuerdo Lacuba, con su brazo convertido en veneno, que goteaba a su lado-Somos hermanos, no de sangre, pero sí por juramento... No acabarás con nuestro vínculo tan fácilmente.

Demon sonrió débilmente.

-Chicos... Sacadme de aquí... No podemos con él.

-Candle Wall

Se formó un gran muro de cera y Olive, junto a Demon, que iba apoyado en la espalda de Lacuba, abandonaron el lugar.

-Gracias Galdino-sonrió Demon débilmente viendo a su nakama a los lejos levantándole el pulgar.

Akuma Pirates: Reencarné en One PieceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora