Akuma Pirates: Reencarné en One Piece

Capítulo 9: Whiskey Peak, Baroque Works y un encuentro muy esperado

Vivi estaba sorprendida, pero su miedo ya había desaparecido.
Habían pasado dos días desde que Vivi nos había contado a todos lo que había sucedido en Arabasta. Ritchie, Buggy y Usopp lloraron desconsoladamente tras el relato, mientras Snake y Zoro, cabreados por lo que habían escuchado, se pusieron a entrenar a máxima intensidad; y yo, apartado del grupo junto a Gin, Sanji y Kuroobi, hablaba del tema.

-Crocodile es otro nivel a lo que nos hemos enfrentado-les expliqué-Estamos hablando de un hombre con base en el desierto que controla la arena.

-Yo estaré en clara desventaja-puntualizó Kuroobi-Sin agua cerca, difícilmente voy a poder usar mi Gyojin Karate.

Era cierto. Iba a tener que pensar una forma de que Kuroobi no se viese afectado durante los combates en Arabasta.

-¿Qué vas a hacer, Luffy?-me preguntó Nojiko, que se acercaba a sentarse junto a mi y agarrando una jarra de sake de las que teníamos en el centro-¿Vamos a ayudar a Vivi?

Yo ya sabía que iba a hacerlo, pero iba a necesitar un plan. No iba a llevar a mis nakamas a una misión suicida. Aunque bueno, tal vez si fuese buena idea... Tal vez con más nakamas.
Entonces tomé la decisión.

-Vivi-dije levantándome llevando dos jarras de sake. La mía anterior ya la había terminado. Le lancé una de las dos y me acerqué a ella-Los Akuma Pirates te ayudaremos a liberar tu reino, pero debes entender que soy propenso a reclutar enemigos-añadí señalando a Buggy, Alvida, Gin y Kuroobi-Es posible que convenza a enemigos tuyos de pasarle a nuestro lado... ¿Aceptarías eso, sea quien sea? Si lo haces, mis nakamas y yo daremos nuestra vida si fuese necesario por ti y tu reino.

Comencé a observar como todos mis nakamas comenzaban a sonreí satisfechos con mis palabras. Buggy, Alvida, Gin y Kuroobi reían entre ellos. Esos cuatro se habían vuelto muy cercanos y solían entrenar juntos entre ellos.

-De acuerdo...-terminó diciendo la princesa de Arabasta-Agradezco vuestra ayuda, de verdad-comenzó a emocionarse y terminó abrazando a quien tenía más cerca, que resultó ser Snake.

-¡LAGARTO BASTARDO!-le gritó Sanji-¡SUELTA A LA HERMOSA PRINCESA!

Nos pasamos toda la noche riendo, festejando, bebiendo y comiendo.
Gin, para mi sorpresa, era un verdadero fiestero, de modo que decidí montar un espectáculo, en mi borrachera, que consistía en cantar a pleno pulmón una canción de piratería que les había estado enseñando a todos.
Era una canción de mi mundo, pero como aquí no la conocían, quedó como si fuese totalmente creación mía.

Gin, Usopp, Zoro, Buggy y yo, con Ritchie, solamente bailando pero también borracho de quien sabe donde, nos pusimos a cantar a pleno pulmón, provocando las risas de toda la tripulación. Comenzamos a bailar y poco a poco, el ambiente de fiesta se calmó, llegando al punto de que todos seguíamos de fiesta pero cada uno por su lado del barco.

Yo, por mi lado, había pedido a Laboon que se acercase y me dejase ir subido sobre él durante un rato.
Seguía bebiendo, pero ahora era con calma.

-Sabes, Laboon. Si tu amigo Brook quiere, se podría unir a la tripulación.

Eso puso a Laboon feliz, que comenzó a salpicar con la cola, lo que pareció llamar la atención de Nami, Alvida y Kaya, que se acercaron y, mediante gestos, le pidieron a la ballena que les dejase unirse a mi.
Los cuatro nos tumbamos bocarriba. Kaya, tumbada prácticamente sobre mi, mirada embelesada a las estrellas, mientras que Nami y Alvida, apoyadas en mis brazos, dejaban que les acariciase delicadamente el cuerpo.
No lo iba a negar, a pesar de que era más cercano con Kaya, estaba igualmente enamorado de las tres y me alegraba un montón de haber llegado a ese punto con ellas.