Payasa

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Kara tomo el atajo de siempre que le hacía llegar antes a casa. Había tenido un día pesado en el periódico y lo único que quería era llegar a recostarse y comer toda la comida chatarra que pudiera sin vomitar.

Pero ese día el destino le tenía una sorpresa preparada y justo cuando pasaba por el área dedicada para perros, escucho una risa cantarina demasiado conocida para ella.

Dejo de caminar para buscar a la dueña de la risa más hermosa del planeta y la encontró jugando con su perro y otros perritos más.

Sin darse cuenta sus pies la llevaron junto a la pelinegra qur en ese momento se dejaba caer en el pasto para tomar un respiro.

Suspiro enamorada al verla agitar su hermosa cabellera y llamo su atención.

-Lena...-Saludo sonriendo brillantemente.

Lena dejo de jugar con oisin para mirar a la rubia con fastidio.

-¿Que quieres ahora Danvers? -pregunto acariciando a su chico.

Kara suspiro mirando la escena con envidia, cuando envidiaba a ese perro en ese momento.

-Insisto, tú con tantos perros y nomás no aceptas lo míos. -se quejo haciendo un tierno puchero.

Lena estallo en carcajadas.

-Tú... Tú eres imposible Danvers! -rio acariciando su estómago dolorido debido a la risa. -Dime... te ha funcionado alguna vez...?

Kara bajo el rostro avergonzada.

-E-es la primera vez que lo uso

Lena asintió divertida.

-Eso creí, por favor no vuelvas a usarlo nunca

Si fuera posible Kara se hubiera puesto aún más roja.

-L-lo siento...-murmuro cabizbaja y Lena sintió un pinchazo de culpa. Está bien, la rubia suele ser algo intensa con su coqueteo pero no era la intención de Lena hacerla sentir mal. En el fondo la alagada su atención hacia ella.

Oisin se separó de Lena al sentir la tensión en el ambiente y se acercó a la rubia dónde restrego la cabeza sobre sus piernas en señal de apoyo.

Lena jadeo sorprendida.

Oisin nunca se acercaba a desconocidos, solía ser muy tímido.

Kara acepto el consuelo feliz, se dejó caer de rodillas y abrazo a oisin, dejándose consolar por él.

-Eres tan lindo chico... -murmuro sobre su corto pelaje.

Oisin ladro feliz y Lena se cruzó de brazos.

-Eres un traidor oisin, veremos si Danvers te da de comer

-Por mi no hay problema, estoy segura que kripto amara compartir su comida -aseguro sonriente. -Por cierto... ¿Sabes dónde está el puerto? Lo digo porque he visto una sirena. -coqueteo moviendo las cejas sugestiva.

Lena se atoro con su propia saliva mientras reía.

-Me vas a matar Danvers... En serio me vas a matar... De dónde sacas tantas estupideces -rio.

-De Google... -Reconoció poniéndose de pie y acomodando sus lentes... -Hablando de Google... Disculpa, ¿te llamas Google? Es que tienes todo lo que busco.

Lena se mordió los labios para no reír.

-Tienes que detenerte Kara -murmuro poniéndose de pie también y tomando la correa para amarrar a oisin. -Es hora de irnos chico... No queremos que la rubia tonta aquí siga con sus chistes.

Kara se enfurruño.

-Espera Lena...

-Ahora qué?

-No estés mucho tiempo en el sol que los bombones se derriten -grito mirando sus pechos antes de echarse a correr.

-Eres mujer muerta Danvers!!

-Eso lo veremos bombón... Aunque no me importaría que tu me ahorques

Lena se avergonzó al escuchar reír a las personas a su alrededor.

-Maldita Danvers. -blasfemio huyendo del lugar.

Unos metros más adelante, escondida detrás de un gran árbol una rubia la veía partir.

-Al menos ya logré que dijeras mi nombre... -sonrio.




Viñetas SuperCorp 2021Donde viven las historias. Descúbrelo ahora