Best Years » Muke

00.51

⌛Always been you, Shawn Mendes🎤

« Es un cuento de hadas que no puedo explicar,

lleno de palabras que no sé como decir.

Y que, sin un pequeño giro del destino,

sé que todavía estaría buscándote»

Los padres de Luke habían llegado la noche anterior de un agotador vuelo desde Sídney, la razón de su vuelo era una diminuta mentira piadosa por parte de Luke, diciendo que necesitaba hablar con sus padres de ciertas cosas importantes en torno a su carrera, ciertos bienes materiales, además de que los extrañaba y que su ansiedad no podía esperar por más. 

Jack y Ben no habían podido viajar con ellos por sus trabajos, de verdad se habían lamentado, pero ahí Luke les dijo que guardaran el secreto y la verdadera razón del viaje, su boda con Michael. Jack y Ben no podían con la emoción y le habían deseado la mayor de las suertes a su hermano. Por supuesto, Luke no les había dicho la verdadera razón de porqué una decisión tan brusca y rápida.

Ashton, Calum y Hayley, fueron llamados por Luke apenas Max logró tranquilizarse aquel domingo luego de comentarle sus planes de boda. Al igual que con sus padres, les mintió y les pidió con urgencia que volvieran a Los Ángeles porque tenía que hablar con Ashton de unos bienes, entre otras cosas. Ellos habían llegado en la mañana del día anterior y no tenían idea de lo que se les avecinaba aquella jornada.

Maddox, por supuesto, como buen cómplice de Luke que era, había guardado el secreto y ahora todos se preparaban. Luke les mencionó que quería hablar de sus planes en un almuerzo semi-formal, aprovechando la instancia única de que estaban todos juntos para poder charlar. 

Michael, por otra parte, había intentado invitar a su hermana pero lamentablemente, sus diablillos, habían caído enfermos con sarampión, así que no podía viajar. Michael le comentó luego la razón del viaje, y por supuesto que Madonna chilló en alegría por la boda de su hermano y le prometió que no le diría nada a su madre. Tal como Luke, Michael le expuso la misma mentira a su mamá, diciéndole que Luke quería hablar un par de cosas importantes de su carrera en un almuerzo semi-formal, que por supuesto ella estaba invitada y que Liz viajaría, y entre Kendra y Liz, ambas se llevaban muy bien y se llamaban con mucha regularidad, así que gustosa aceptó. 

Aquellas comidas semi-formales no eran extrañas en sus vidas familiares. Generalmente, para cuando los padres de Luke viajaban, realizaban una con los mismos invitados de siempre, así que nada parecía fuera de lo normal.

—Ricitos, papi dijo que me llamabas —murmuró Maddox mientras veía como Luke dejaba en su lugar, uno de sus perfumes favoritos, para luego comenzar a ponerse alrededor de su cuello, una de las clásicas cadenas.

—¿Crees que puedas guardar un secreto más? —consultó el cantante con una sonrisa, caminando hasta su gran armario, donde todas su camisas, botas y trajes, estaban perfectamente ordenados. Maddox lo siguió.

—Sí, sabes que soy muy bueno guardando secretos —murmuró el niño, viendo como el rubio cantante se estiraba lo suficiente con su mano en alto para buscar algo en el espacio diminuto que quedaba entre el techo y el mueble donde estaban sus botas en repisas. Cuando Luke encontró lo que buscaba, sonrió, tomándolo entre sus dedos, volteándose.

—Max, quiero que tu seas el encargado de los anillos. Tu papá aceptó que tuviésemos anillos, pero él piensa que los buscaré luego de nuestras vacaciones en Asia, cuando en realidad, ya los tengo listos —comentó, abriendo la cajita de terciopelo azul, mostrándole el contenido al niño quien sonrió.