Best Years » Muke

00.02

« Sé que te estás ahogando con tus miedos,

ya te dije que estoy aquí.

Me quedaré a tu lado todas las noches.»

⌛Halsey, Be kind.🎤 

Luke acariciaba el cabello de Maddox, el niño que estaba recostado a lo largo de su sofá con su cabeza en el regazo de Luke, con sus ojos cerrados recibiendo las caricias. Estaba envuelto en una manta porque pronto había sentido frío y, abajo del sofá, a los pies de Luke, estaba recostada Petunia.

Habían hecho muchas cosas esa tarde, desde Luke mostrándole las canciones a Max y Calum, incluso Calum sorprendió a todos porque podía tocar bajo, información que ayudó de inmediato a Luke para escuchar su idea bajo dos instrumentos. También pidieron pizza, jugaron en su consola y charlaron de muchas cosas, tal como lo estaban haciendo en aquel momento.

Eran ya las 8 de la noche y era visible para todos que Max estaba un poco cansado. Había hecho mucho aquel día y necesitaba descansar, pero la mente de Luke era un huracán por un punto que había repasado un par de veces aquella tarde. La siguiente noche, Michael y él tenían una cita y tenían todo listo, incluso la madre de Michael iba a cuidar a Max por toda aquella noche para darles un espacio, sin embargo, su mente no estaba tranquila. Sentía que necesitaba algo más, no quería lastimar a Max.

—Creo que es hora de irnos, Maddox en cualquier momento caerá —comentó Calum cuando sus carcajadas y las de Ashton habían terminado luego que el agente de Luke, dijera una anécdota del cantante que involucraba un pelícano, helado y sus sandalias.

—¿Puedes esperar 5 minutos? Necesito hacer una llamada —suplicó Luke y el enfermero asintió, mencionándole que buscaría una botella de agua para el camino.

Luke se puso de pie, mientras Max se sentaba en el sillón y refregaba sus ojitos durmientes. Apenas Luke se levantó, Petunia de un salto, ocupó el lugar de su amo y se refregó al costado del cuerpo de Max. Ashton rió ante la imagen mientras Luke se marchaba hasta estar lo bastante lejos y que la conversación no se escuchara.

—Hola Luke, ¿todo bien? —la cálida y dulce voz de Michael llegó a sus oídos y el cantante sonrió. De pasar a no verse, en máximo 3 días, desde hace una semana no estaba frente a frente y Luke debía ser sincero para aceptar que lo extrañaba.

—Sí Mike, todo bien. Aún estoy con Max y Calum, pronto se irán pero quiero hacerte una pregunta respecto a mañana...

—¿Por fin me dirás donde iremos para elegir un atuendo acorde a la ocasión? —de inmediato atacó en tono de broma el enfermero, Luke rodeó los ojos. En los últimos días, Michael había sido demasiado insistente en averiguar donde sería su primera cita, sin embargo, Luke estaba demasiado concentrado en mantener el secreto.

—Jamás...Te llamaba, por algo que me ha dado vueltas en las últimas horas y...y la verdad no sé como te lo tomes, si es que crees que es extremo o no lo permitas o...

—Hemmings, directo al grano y basta de divagar. ¿Qué pasó por esa cabecita tuya que te tiene tan nervioso?

Luke suspiró, a pesar de conocerse hace 3 meses, Michael lo conocía demasiado bien.

—Es que de verdad quiero que Maddox no se sienta mal con todo esto, no sé como termine reaccionando minutos antes de la cita o cuando llegues a casa a la siguiente mañana y no quiero provocar más problemas entre Max y tu. Así que, se me ocurrió si es que le das permiso para que se quede a dormir hoy aquí, conmigo, es para demostrarle que a pesar que tu y yo nos acerquemos de una manera romántica, nunca él dejará de ser importante.