𝐓𝐡𝐞 𝐆𝐮𝐚𝐫𝐝𝐢𝐚𝐧 ⟶ Harry Potter AU [ESPAÑOL]

Chapter Seventeen

MAEVE ESTABA COMPROMETIDA con la causa de hacer que Sirius Black se recuperara tan pronto llegó a San Mugo. No sabía por qué sentía tanta cercanía por la pareja, además del hecho de que fue una testigo de lo comprometidos que eran a su relación. Viendo cómo Charlus tuvo que ser arrastrado del lado de Sirius para poder dormir le recordó a Maeve lo mucho que Sirius peleó para quedarse con Charlus. Los dos tenían espíritus guerreros, y era algo refrescante de ver para la joven Sanadora.

Por supuesto, mientras atendía a Sirius y a otros pacientes del hospital, aún veía a Charlus como su responsabilidad, porque aún estaba recuperándose. Parecía que cada día discutían sobre el descanso de Charlus, porque quería quedarse ahí en caso de que Sirius despertara y necesitara ayuda.

Eventualmente llegaron a la solución de que Charlus se quedaría en la habitación de Sirius mientras dormía.

—No podrás ayudarlo si estás exhausto cuando despierte —le dijo Maeve, dándole una poción para dormir—. Duerme.

Charlus miró el líquido en sus manos antes de mirarla a ella.

—¿Me vas a despertar si él despierta, no?

Cruzando sus brazos sobre su pecho, Maeve achicó los ojos en su dirección.

—Charlus, si no lo bebes...

Rápidamente lo tragó como un niño obediente y Maeve miró cómo la poción extra potente para dormir surtía efecto. En veinte segundos, Charlus se desplomó en el sillón y se durmió. Esperó hasta que escuchó el sonido de sus leves ronquidos para traer una manta y cubrirlo con ella.

Sirius llegó a San Mugo cinco días atrás, desnutrido y exhausto, y su cuerpo se rindió. Muy similar a cómo Maeve trabajó en la recuperación de Charlus, puso a Sirius en un estado de coma asegurándose de que recibiera agua y nutrientes, esperando que ganara un poco de peso. Sus dientes estaban prácticamente podridos en su boca, pero se encargó de eso por pedido de Charlus y él continuó con cepillar los dientes de Sirius todos los días.

Pero aunque sanó a Sirius externamente, debía preguntarse cómo estaría el estado mental del hombre cuando despertara. Si era como su experiencia con Charlus, Maeve se encontraba temiendo un poco. Sin embargo, la diferencia era que Sirius solo recibiría buenas noticias y Charlus seguramente sería el que las diera. Y con cada día que pasaba, las buenas noticias aumentaban.

No solo era Sirius libre, sino que Peter Pettigrew recibió un rápido juicio en donde se le encontró culpable de todos los cargos. No terminó ahí, sino que el Ministerio sacó una disculpa oficial para Sirius (seguramente por las amenazas de Charlus) y los medios estaban recibiendo todo entusiasmadamente. Aunque el Ministro Fudge intentó mantener las cosas por lo bajo, para el final del primer día después de la salida de Sirius, todos en el mundo mágico sabían de la injusticia que tomó lugar.

Los padres de los estudiantes estaban furiosos al saber que un criminal de guerra había vivido dentro de las paredes del castillo. No era necesariamente la culpa de Dumbledore, pero necesitaban a alguien que culpar. Charlus y Sirius eran considerados héroes que pasaron por todos los círculos del infierno y regresaron para exponer la verdad, dejando a los reporteros hambrientos por una entrevista con alguno de ellos.