27. CAN WE GO

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Al día siguiente, bajamos todos al Gran Comedor, antes del primer torneo. Me siento junto a Blaise, mientras Alexa y Bella se sientan frente a mí, junto a Pansy y Draco. Flint estaba sentado junto a Blaise, lo que dejaba un espacio vacío a mi lado.

—No puedo esperar a ver que Potter sea aplastado por este torneo.—dice Draco.

Blaise, Pansy y Flint se ríen.—No podrá caminar después de la prueba.—dice Pansy.

Todos continúan charlando sobre el torneo, mientras Bella, Alexa y yo nos quedamos calladas. Después de unos segundos, Blaise gira la cabeza para mirarnos.

—¿Por qué están tan calladas hoy?.—el pregunta.

—Probablemente porque somos respetuosas a diferencia de ustedes tres, y no juzgamos como ustedes.—murmuro.

Blaise sonríe.—Ouch.

—¡Yo no juzgo!.—grita Pansy.

No pude soportarlo más, tuve que decir algo.

—¿No juzgas Parkinson? ¿Puedo realmente creer eso? ¡Has estado juzgando a todos aquí de arriba a abajo desde que llegaste aquí en el primer año!.—Grito. Pansy abre mucho los ojos hacia mí mientras se calla.—¿Alguien más quiere intentar hacerme un comentario?.—Grito de nuevo.

Todos permanecen en silencio durante unos segundos, hasta que Draco dice.

—Sí, yo quiero Blackwood.

Levanto mis cejas.—Oh Malfoy, ¿qué quieres ahora?.—murmuro.

—Para que mantengas tu opinión para ti.—dice.

—¿Disculpa? ¿De verdad acabas de decir eso, Malfoy? ¡Mírate a ti mismo! ¡Siempre me estás abriendo la boca! ¡Es como si esa maldita boca repugnante no dejara de correr hacia mí! ¡Solo podía respirar y tú lo harías! tengo un problema con eso—

—¡Sí, tendría un problema con eso! ¡Porque siempre estás aquí, y es jodidamente molesto! Arruinas el estado de ánimo de todos cuando muestras tu maldita presencia—

—¡Malfoy! Ya es suficiente.—interrumpe Flint.

—¡No, cállate Flint! ¡Finalmente estoy haciendo mi punto, que ella pensó que no podía!.—El grita.

—Todavía no entiendo qué punto estás tratando de probar.—le digo. Me fulmina con la mirada.

—¡Estoy tratando de demostrar que tú eres el problema! Honestamente, este mundo sería mejor si no estuvieras aquí, como ¿por qué diablos sigues aquí ?! arruinas todo Blackwood, ¡y eso nunca lo conseguirás!.—grita.

—¡Malfoy, no le hables así!.—Bella grita.

—¡Cállate Zabini! ¡Nadie te está hablando!.—dice.

—Espero que te pudras en el infierno. Espero que te quemes tan mal, en ese fuego del infierno—

—¡Espero que te mueras!.—Grita.

—¡Malfoy!.—Flint dice de nuevo.

—Flint, simplemente no—

—¿No qué? ¿No te diga que lo que dijiste no estaba bien?.—dice Flint.

—¡Sí, no lo hagas!

—¿Hablas en serio ahora mismo? ¡Básicamente le dijiste que se suicidara!—Grita.

—¿Bueno y?.—Murmura.

Draco y Flint siguieron hablando entre ellos, mientras yo miraba fijamente la mesa. No sabía si debería marcharme o quedarme allí, observando lo que sucedería a continuación. Afortunadamente, vino alguien, lo que me hizo sentir mejor.

Siento que alguien pone su mano en mi hombro desde atrás. Me di la vuelta, cuando me di cuenta de que era Adrian.

—Uhh... hey ¿Puedo robarte un segundo?.—Él murmura. Asiento lentamente mientras me levanto de mi asiento.

—No Pucey, no se merece hablar contigo. Si yo fuera tú, buscaría una nueva chica a la que besar, porque te digo que ella no es la indicada y nunca lo será.—dice Draco.

Adrian se ríe levemente.

—Uhh... ¿qué quieres decir?—pregunta.

—Adrian, ¿podemos irnos?.—le susurro.

—¡Oh, toma asiento Pucey, te contaré toda la historia!.—dice Draco.

—Adrian.—murmuro. Me mira antes de volver a mirar a Draco, antes de tomar asiento en la mesa. Draco sonríe.

—Pucey, ¿puedes decirle a tu pequeña novia que se ocupe de sus propios asuntos, ya que hará nuestro trabajo mucho más fácil?

Adrian me mira con una mirada confundida antes de volverse hacia Draco.

—Ella no es exactamente... mi novia.—Él murmura.

—Todavía no.—Bella susurra, mientras yo todavía podía escuchar ella desde el otro lado de la mesa. Adrian mira a Bella mientras ella sonríe antes de volver a mirar a Draco.

—Error mio, pensé que ustedes dos estaban saliendo.—dice Draco.

—Malfoy, ¿por qué te importa?.—murmuro.

—No me importa Blackwood, solo estoy cuidando a mi amigo Pucey, ¿problema?.—El sonríe.

—Sí—

 —Malfoy, solo detente.—Blaise me interrumpe. Draco se burla.

—Zabini—

—No Malfoy, no me digas que me calle, como le hiciste a mi hermana.

Me paro detrás de Adrian.

—¿Podemos irnos?.—susurro. Suspira antes de ponerse de pie.

—Escucha, amigo, tengo que irme, te alcanzaré más tarde.—dice Adrian.

Draco asiente.

—Claro.—dice antes de que Adrian y yo nos alejemos de la mesa de Slytherin. Salimos del Gran Comedor, mientras caminábamos por los pasillos. Mis ojos estaban llorosos por lo que dijo Draco, mientras seguíamos caminando.

—¿Estás bien?.—Él susurra. Asiento lentamente mientras seguimos caminando. Noté que Adrian giró la cabeza para mirarme, mientras yo mantenía mi cabeza en el suelo.—Oye.—deja de caminar mientras me tira hacia atrás.—¿Qué pasa?—el pregunta.

Niego con la cabeza mientras una lágrima rueda por mi rostro.—Nada, sigamos caminando—

—No, no voy a seguir caminando hasta que sepa que estás bien.—dice.

Unas cuantas lágrimas más rodaban por mi rostro después de unos segundos, hasta que puso ambas manos a cada lado de mi cara para ahuecar mis mejillas. Pasó sus pulgares sobre mis ojos, secándose las lágrimas de mi rostro.

—¿Qué pasa?.—Él susurra.

—M-Malfoy.—murmuro.

Suspira antes de acercarme a él. mientras pongo mi cabeza en su pecho mientras él envuelve sus manos alrededor de mi cintura.

—Esta bien.—Él susurra.

Nos quedamos así en los pasillos algunas veces, ya que nadie pasaba por nuestro lado.

—¿Qué querías hablar conmigo?—susurro mientras mantengo mi cabeza en su pecho.

—No importa, ahora no.—dice.

ENEMIES | DRACO MALFOY ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora