ENEMIES | DRACO MALFOY ✓

74. BATHROOM

Han pasado algunos meses desde que Draco y Ron tuvieron su pelea. Draco y yo hemos estado trabajando en el gabinete casi todos los días. Apenas dormimos ahora, ya que pasamos toda la noche en la Sala de los Menesteres. De vez en cuando tomamos muy pequeños descansos, pero aún teníamos que seguir trabajando en el armario. Bella, Alexa y Rachael siempre se preguntan a dónde voy, pero siempre digo que estoy en su dormitorio.

Suspiro mientras dejo caer el libro que estaba en mi mano sobre la mesa.

—Vamos, vamos a almorzar.—murmuro.

Él asiente lentamente.—Sí... solo unos minutos más.—Murmura mientras examina el gabinete.

—¡Vamos Draco! ¡Hemos estado aquí por horas! ¡Necesitamos un descanso!—digo.

—Está bien, está bien, ve al Gran Comedor, te veré allí, ¿de acuerdo?.—Dice mientras mira el gabinete y luego vuelve a su libro. Me quedo callada mientras lo miro, lo que hizo que volviera la cabeza para mirarme.—Te prometo que te veré en el Gran Comedor, ¿de acuerdo?.—Me besa la frente suavemente.—te amo.

—Te amo.—le respondo mientras sonrío antes de salir de la Sala de los Menesteres. Caminé hacia abajo los pasillos, con la esperanza de que nadie se fijara en mí. Seguí caminando hasta que llegué al Gran Comedor, cuando caminé hacia la mesa de Slytherin. Me siento al lado de Rachael, mientras ella le habla a Bella.

—Está bien, ahora que estamos todas aquí, puedo decir lo que tengo que decir.—dice Bella.

—¿Qué es?.—Preguntó Alexa.

—Está bien... conocí a alguien.—susurra.

Rachael y Alexa jadean en voz baja.

—¿Y bien? ¿Vas a decir quién es?.—Pregunta Rachael.

—Sí... no... ¡no lo sé! Quiero decir, es un tipo muy agradable y todo... pero no sé si le agradaría.—murmura.

—¿Por qué no le agradarías?.—Pregunto.

—Porque soy una Slytherin.—dice.

—En primer lugar, si no le gustas por lo que eres o en qué casa estás, déjalo, Bella, no hay ningún propósito con ese tipo de personas.—dije.

—Lo sé... pero hablamos mucho y es muy agradable, no creo que me vea, bueno... con él...—dice.

—¿Quién es?.—Pregunta Alexa.

Ella suspira.—Es Neville Longbottom.—Murmura.

Todas jadeamos.

—¡No se lo pueden decir a nadie!.—Ella grita.

—¡Dios mío! ¡Bella! ¡Honestamente, lo encontré bastante lindo una vez que lo vi!.—Dice Alexa.

Todos la miramos fijamente.

—Está bien, no pueden decirle a Blaise que dije eso.—dice ella. Todas nos reímos.—No sabía que hablaste con Neville.—digo.

—Por supuesto que no lo sabrías porque siempre faltas a clases ahora y nunca me ves porque estás demasiado ocupada con Draco.—Ella sonríe.

Sonrío un poco cuando miro al otro lado, cuando veo a Draco mirando a alguien. Seguí la mirada de Draco, cuando me di cuenta de que estaba mirando a Harry, como Harry estaba con Katie Bell, la chica a la que Draco maldijo.

Draco lo miró fijamente durante unos segundos hasta que salió del Gran Comedor. Harry lo siguió de inmediato, cuando me levanté de mi asiento rápidamente.

—¿A dónde vas? Acabo de comenzar la historia.—dice Bella mientras me mira.

—Tengo que irme.—murmuro.

—¿Dónde?.—Bella sonríe.

—Oh, cállate Bella.—Sonrío un poco antes de salir corriendo del Gran Comedor. Me tomó un tiempo pasar a los demás estudiantes, ya que estaban entrando en el Gran Comedor. Finalmente logré pasar a los estudiantes, cuando estaba en el medio del pasillo. No podía ver a Draco ni a Harry, ya que caminaban tan rápido, sin darme la oportunidad de seguirlos.

Seguí mirando alrededor de los pasillos hasta que decidí dirigirme hacia el baño. Me tomó unos minutos caminar hacia el baño, ya que no estaba cerca del Gran Comedor.

Después de unos minutos, logré llegar al baño cuando entré de inmediato. Una vez que entré, escuché muchos golpes abiertos. Había agua por todo el suelo, cuando miré a Draco.

—Lucinda.—murmura Draco.

De la nada, Harry salió de la esquina.

—¡Sectumsempra!.—Grita mientras apunta su varita hacia mí, causando que me caiga al suelo. Escuché a Draco jadear.

—Potter, ¡te voy a matar!.—Grita Draco antes de correr hacia mí y arrodillarse frente a mí.—L-Lucinda... estoy tan... lo siento mucho.—Murmura mientras toma mi mano.

Lo miro, cuando me di cuenta de que en realidad estaba llorando. Esa fue la primera vez que vi a Draco llorar frente a mí. Le doy una pequeña sonrisa.

—Lucinda, estarás bien.

—Está bien Draco.—susurro.

Sacudió la cabeza rápidamente cuando comenzó a llorar aún más mientras me acercaba más hacia mí.

—L-Lucinda... Lo siento mucho... ¡Eso era para Malfoy, no para ti! ¡N-nunca te haría daño!.—Grita Harry.

—¡Pero la lastimaste Potter!.—Draco gritó.—¡Usaste una maldición sobre ella!

—Lo siento, no quise- —comienza Harry.

—¡Potter, te juro que si no te vas de aquí!.—Draco grita de nuevo.

Cierro los ojos cuando sentí que me dolía el cuerpo, mientras sentí la sangre brotar de mi cuerpo. Todo mi cuerpo me dolía de dolor durante minutos, ya que pensé que este era el final de todo.

—Por favor, no me dejes.—escuché a Draco susurrarme al oído mientras sollozaba. Le di un fuerte apretón a la mano de Draco antes de ver a Snape entrar al baño. Me miró durante unos segundos hasta que empezó a lanzarme un hechizo curativo.