Capítulo 5 "Clubs, Clases y Otras Movidas"
Parte 1: Fred
"Los sueños no sólo significan proyectos o metas, también pueden ser parte del mundo onírico. Algunos aterradores, otros reveladores, algunos con mensajes, otros sin destinatario".
"Lo que sí es cierto es que uno mismo es quién elige si seguir los mismos o pelear por su destino".
Fred y Nique Weasley.
Fred Pov
Sonó la alarma y me fijé en el despertador colocado encima de la pequeña mesa de noche al lado de mi cama.
Las agujas marcaban las siete, era la hora de despertarse, sin embargo, parte de mí se levantaba mecánicamente. La rutina se había instalado en la vida del Gran Fred Weasley y todo lo que me rodeaba me parecía indiferente, ¿o era yo el que estaba fuera de lugar? -Probablemente-. Pensé mientras pasaba el dorso de mis manos por mi frente y me masajeaba las sienes con ritmos acompasados.
Uno pensaría que realmente uno de los hijos del hermano de Ron Weasley, héroe de guerra y auror, no tendría de qué quejarse, o al menos no pensarías que su vida ha decaído hasta tal punto de ser un verdadero autómata. Todo esto tiene nombre y apellido, si señores, me enamoré y el amor me atravesó el corazón de la peor manera. Te preguntarás; ¿qué quieres decir Fred? Pues verás, para ello tendría que empezar desde el principio, a describir quién era yo antes de esto, o al menos quién se supone que soy, porque esta parte que os revelo ahora murió. O debería decir que se durmió.
Mi nombre es Fred Arthur Weasley Johnson , hijo de George Weasley y Angelina Johnson y hermano de Roxanne Weasley.
Desde muy pequeño heredé el talento de mi padre y de mi tío Fred, que en paz descanse, del que por cierto tengo el nombre, de hacer bromas. Se podría decir que mi talento es natural, aunque los mal hablados, entre ellos, los envidiosos nos camparan a mí, y a mi pandilla con meros bufones de circo. Caso error, los Merodeadores 2.0 lo petaban por dónde quiera que pasaban, tanto así, que sobrepasamos a los anteriores merodeadores, sin desmerecerlos claro está. Si ellos eran una leyenda, nosotros estábamos haciendo historia. Y no una historia de las que se olvidan, sino de aquellas que se pueden contar en las canas de la profesora Maggonagal .
Y eso no es lo único que era legendario en nuestro grupo, sino que también poseíamos grandes dotes para el arte de ligar, o debería decir el de pillar cacho.
Ahora todos pensaréis "vaya troglodita de mierda". Pues sí, mi primo James y yo éramos unos trogloditas, nos dedicábamos a tirar fichas a diestra y a siniestra, que al final caían pasabas una buena noche, que no lo hacían pues siempre estaba la cerveza de mantequilla, compañera fiel hasta ahora.
Preferíamos ser unos cavernícolas, a enamorarnos, porque sabíamos que si lo hacíamos ya no volveríamos a ser los mismos.
Sin embargo, el amor llega sin previo aviso y por más que quieras evitarlo, es imposible.
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La Tercera Generación en España
AventuraUna Nueva Generación. 10 chicos que quieren empezar de nuevo y otros que quieren escapar de su destino. Tendrán que empezar de cero en un nuevo país, en una nueva escuela y se enfrentarán a una nueva selección Sin embargo, por el camino encontrarán...