Capítulo 9: Partidos y secretos
No hay Verdad más sincera que aquella que, sin pronunciar palabra, puedes notar en una mirada
Scarlet
Pov Scarlet
Entré en el polideportivo, hoy no había reunión de Horgsic, ya que hoy era Martes pero tenía que ir igualmente ya que me tocaba limpieza con la capitana, Llúcia, una chica de rastas blancas y piel morena. Ella me caía muy bien, era muy simpática.
Habían pasado varios días desde que encontramos a aquella chica en la basura, cada vez que lo recordaba, me entraba mal cuerpo, fue horrible y macabro.Entré en el establo y me dirigí a donde se encontraba mi unibrax:
-Hola, Ambrose ¿Como estas, chocolatito?-entré en el establo y le acaricié el lomo a mi unibrax. El mote de chocolatito era por su color, que era el marrón chocolate.
-Hola Scarlet-me saludó Llúcia.
-Hola Capitana-cogí la escoba y empecé a limpiar-¿Que tal se encuentra Bombón?.
-Perfectamente, como siempre-giré mi mirada al unibrax de color negro.
-Por cierto, ¿Cómo está tu compañero?, Arnau nos contó lo que había pasado, fue bastante impactante-terminó de quitar el polvo a las mesas y a las sillas.
-Por lo que me contó Rose, el va mejorando-recogí la suciedad con el recogedor.
-Me alegra oirlo-siguió limpiando.
Los establos no eran la gran cosa, la verdad, los de Sanetur eran de color verde con dibujos de rosas. Me parecian muy simples y que tenian lo justo para cuidar de las criaturas.
Pasé la fregona por el suelo, mientras mis recuerdos aparecian en mi mente. Mi infancia fue preciosa, dentro de lo que cabe. Siendo novios, mi padre dejó preñada a mi madre, y me tuvieron a mí. A los dos años, se separaron y yo me quedé con mi madre, en cuanto a mi padre, él se enamoró y se casó con otra mujer, con ella tuvo a mis dos medio hermanos, a los que adoraba.
Para cualquier hijo eso sería algo raro pero, para mi, fue todo lo contrario, yo me lo tomé muy bien y lo llevé a la perfección. La relación que tenía con mis padres era bastante buena, me querían y me apoyaban en todo. Incluso se tomaron bastante genial mi noviazgo con Ismael Griffin, el profesor de Runas Antiguas de Hogwarts. Él era diez años mayor que yo, pero no me importaba, el amor no tenía edad, ¿Verdad?.
En cuanto a mi etapa en hogwarts, tuve momentos buenos, como el de cuando conocí a mi gran amiga, Lorcan y al intrépido de su hermano, Lysander. Y momentos malos, cómo el de cuando un grupo de alumnos se metian con nosotras debido a que Lorquita (Lorcan) y yo, éramos muy soñadoras y algo lunáticas. Ese año fue demasiado duro para nosotras, me duele recordarlo, pero viví con ello y eso me hizo más fuerte y segura.
ESTÁS LEYENDO
La Tercera Generación en España
AventuraUna Nueva Generación. 10 chicos que quieren empezar de nuevo y otros que quieren escapar de su destino. Tendrán que empezar de cero en un nuevo país, en una nueva escuela y se enfrentarán a una nueva selección Sin embargo, por el camino encontrarán...