POSITIONS

SEROTONINA

A altas horas de la noche Deku espero a que todo el mundo estuviera dormido y aquella pareja se encontrara descansando en la enfermería, así que con tranquilidad y en silencio entro al lugar y observó a ambos chicos quienes parecían no dormir bien, aún sentían dolor, y aquello les impedía conciliar el sueño.

Respiraban con cansancio y se retorcían un poco intentando conseguir alguna posición estable que los ayudara a calmarse y a dormir.

Desde sus camas lograron presenciar que Deku estaba en aquel lugar y se acercaba con calma a ellos.

-Hola Midoriya, que haces aquí tan tarde?- preguntó Kirishima con un quejido pero aún con la amabilidad que siempre le caracterizaba.

-Quería ver como se encuentran- respondió con tranquilidad.

-Pues con mucho dolor te diré, Suni nos dio unos calmantes y trato con lo que pudo nuestras heridas pero aún nos duele bastante jeje- comentó el rubio.

-Ya veo-

En eso Deku saco de su bolsillo un frasco pequeño con un líquido azulado y dos jeringas.

-Que es eso?- preguntó Kirishima.

Pero el pecoso no respondió, comenzó a llenar la jeringa con el contenido del frasco y cuando ya lo tenía listo lo acerco hacia el cuello del pelirrojo, este comenzó a asustarse.

-Espera espera!, que estas haciendo?- habló con preocupación y algo de desesperación.

-Calmate, te aliviará el dolor- le habló sereno.

-No, que tal si algo malo pasa-

En ese instante Deku lo miró fijamente y él se detuvo.

-Confias en mi o no?- habló con desición.

Kirishima estaba asustado por lo que podría pasar, que tal si quizá el contenido de la jeringa era alguna especie de veneno o enfermedad, que tal si aquello podría llevarlo a la muerte.

Miro a su esposo para buscar algo de ayuda pero Denki estaba igual de asustado por lo que podría pasar, debían confiar en el peliverde.

Tenia miedo Kirishima, no quería que algo malo pasara, pero Izuku pedía que confiara en él, una vez no lo hizo y miraba en que eran las situaciones ahora, si una mala desición ocasionó todo esto ya no quería cometer más. Con una gran fuerza de voluntad se relajó lo más que pudo, respiro profundo y sonrió.

-Confio en ti Midoriya, adelante- habló intentando sonar optimista pero con un gran temor en el interior.

Por primera vez en años, aquel pecoso le sonrió con un toque de dulzura, estaba confiando en él y aquella muestra le gustó por dentro.

Aquel gesto de Deku lo cambió por dentro, hacia tanto que no le mostraba una sonrisa, fue cautivador y hermoso, muchas veces quiso ver el día en que tuviera a Deku delante de él y le sonríera como antes, cuando eran compañeros de clase y cuando todo era normal. Eso le dio más fe y confianza en el peliverde.

Con delicadeza acerco la jeringa a su cuello y al entrar el pelirrojo hizo una mueca de incomodidad pues no le agradaban para nada las agujas.

Con ligera presión inició a introducir el contenido y cuando comenzó a estar en su organismo Kirishima quien antes parecía estar con dolor, incomodidad y tensión comenzó a relajar todo su cuerpo inconscientemente, sus músculos se relajaron y su mente empezó a liberar químicos que desvanecían poco a poco el dolor que antes sentía, era como estar drogado quizá.

Desde su lugar Denki observaba a su pareja estar más calmado y tranquilo, no pudo evitar quedar sorprendido y sin saber que carajo estaba pasando pero sin duda aquello era milagroso al igual que efectivo.