ALAS/CIELO

899 98 29
                                    

Sintió un toque en su piel, como unos movimientos recorrían sus piernas, primero con delicadeza y tomaban sus muslos con más firmeza haciendo algo de presión en ellos.

Una respiración constante sobre su cuello hasta su oído y algo de peso sobre su cuerpo que lo hizo despertar.

Abrió los ojos y lo primero que vio fue a Uta encima de él sonriente tocando su cuerpo con esmero.

La forma más horrible de despertar sin duda y recordó que quizás sería así todos los días hasta que muriera o el mismo bastardo acabará con el.

-Buenos días mi hermoso narciso- saludo Momobami.

No respondió solo lo miró frío y de forma detestable.

-Oh me encanta que aún sigues con esa actitud hacia mí, eso me provoca y mucho- musito con fervor.

No pasaron ni 5 minutos que había despertado y comenzó a usar sus poderes en él provocandole dolor de nuevo, sumado al que aún sufría del día anterior.

Su mirada de odio que escondía la agonía que sentía lo excitaron con locura y se puso de pie para desabrochar su pantalón.

-Esto te hará recordar que desde el amanecer hasta el anochecer serás mío por el resto de tus días- habló emocionado mientras estaba en posición para penetrarlo.

-"Y espero que esos días se acaben pronto cuando muera debido a ti"- pensó.

No espero demasiado cuando su miembro comenzó a introducirlo dentro volviendo a rasgar lo que no se había curado regresando el ardor.

-Oh por Dios, tu cuerpo es espléndido!- exclamó.

No respondió tampoco a eso, sus ideas estaban bloqueadas intentando soportar el dolor y la situación que estaba viviendo.

Se movió de adelante hacia atrás, primero a una velocidad neutra y aumento para follarlo con dureza, el sonido de su cuerpo chocando con el suyo al adentrarse más en él lo encendía más y más hasta sentir que tenía dentro el infierno mismo.

Arremato más cuando colocó su mano en su cuello y comenzó a presionar.

Tantas cosas que debía soportar y ahora la falta de oxígeno, se sentía horrible en todos los sentidos posibles, pero lo que más le dolió era que aún seguía viviendo cuando esperaba que su cuerpo no resistiera y lo dejara ir.

-"Tengo que resistir, tengo que soportar esto, no tengo otra opción por ahora"- imaginó en su cabeza.

Forzó su cuerpo a tolerar eso hasta que terminara, contó los segundos que seguían hasta convertirse en minutos y de ahí a la hora, se hartó al pasar los veinte minutos después y solo se quedo pensando en Hitori.

-"¿Cómo estará?, ¿habrá desayunado ya?, ¿hará sus deberes aún cuando no esté yo para recordarselos?, ¿le habrán dicho Bakugo o los chicos que ya no me volverá a ver?"-

Aquellas incógnitas lo entristecieron y dolieron más que aún cuando lo habían torturado anteriormente, seguían violandolo al comenzar el día.

Reaccionó cuando sintió como quitó su miembro dentro de él y se acercó a su rostro.

-Oh, no resisto más!- soltó Momobami.

Y se corrió en su cara impregnandola de esperma.

-Que increíble fue eso- emitió excitado- ¿no creés mi bello narciso?-

No respondió, no tenía en mente responder esa pregunta estúpida, solo pensaba en lo asqueroso que se sentía.

-Bueno no respondas si no quieres, pero no importa- dijo calmado el ojimorado-

POSITIONS Donde viven las historias. Descúbrelo ahora