Sara es una joven reservada que realiza sus prácticas universitarias en una revista a pesar de que no conoce nada del mundo de la farándula. Un día cualquiera conoce a Michael, la atracción de ambos es palpable sin embargo una de las cosas más impor...
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Michael se aclaró la garganta antes de hablar, parecía que sólo buscaba alargar su respuesta. Yo no entendía lo que ocurría, lo único que sabía era que estaba molesta pero sin comprender exactamente la razón, había algo extraño en todo esto que me causaba disgusto pero no lograba descifrar que exactamente. Igual era el conjunto de todo
— Deborah esta muy bien — dijo al fin — trabajando duro, podríamos quedar pronto, estoy seguro de que te echa de menos — quiso sonar natural pero parecía forzado
— Eso me encantaría, ella sí que podrá darme los detalles — ¿detalles? ¿De qué? ¿Y por qué tenía miedo a preguntar?
— Yo te contaré si quieres pero luego — Maya asintió contenta y yo simplemente observé realmente disgustada
Respire profundo un par de veces y me obligue a sonreír, no iba a hacer una escena o a pedirle explicaciones a Michael delante de su hermana, así que espere. El resto de la velada mejoró un poco, logré olvidar lo que había pasado en principio y me estaba riendo con ambos, llegue a pensar que lo que había pasado anteriormente había sido solo mi imaginación pero cuando Michael rechazó otra muestra de afecto me di cuenta de que no eran imaginaciones mías.
La sangre me estaba hirviendo, no iba a tolerar que me trataran de esa forma, ya no era una adolescente.
— Me la estoy pasando genial pero Mónica me espera, se supone que veríamos unas películas en casa — mentí
No quería seguir aguantando el comportamiento del australiano pero Maya no tenía la culpa así que disimular y enfrentarme a él después era lo mejor.
— ¿Qué? — dijo Michael — quédate un rato más —insistió
— Yo también debería irme, mañana tengo muchas cosas que hacer — dijo Maya poniéndose de pie — otro día podemos quedar todos juntos, con Harry, Mónica y Debórah
Ese nombre...
No sabía a quién le pertenecía pero me resolvía el estómago
— Me parece genial, luego nos pondremos de acuerdo — fingí una sonrisa y despedí a Maya con un beso en cada mejilla
Mientras Maya se despedía de su hermano un "hasta luego" salió de mis labios y salí del restaurante lo más rápido que pude. Podria haber ido al baño y al salir, cuando Maya no estuviera enfrentarme a Michael, pero estaba tan molesta que directamente no quería verlo.
Cuando salí el calor me golpeó, sentía que mi cuerpo hervía, estaba furiosa. Habia muchas personas en la calle, a esta hora todos iban de fiesta, un par de bueno tragos no me caerían nada mal
— ¡Sara! — escuche tras de mi
No puede ser...
Ingrese en el primer local con el que me tope, era un bar. Habia mucha gente bebiendo, hablando y riendo. Mire tras mi hombro y suspire, parecía que lo había perdido de vista.
