Estábamos tranquilamente comiendo del dulce algodón, pedacito por pedacito, a penas y pequeños trozos eran los que tomábamos con nuestras manos para luego comerlo.Se podría percibir lo vergonzoso de la situación, aunque también es tan cálido.
‹Badum~ Badum~›
Siento como mi corazón hace en mi pecho fuertemente.
Más abajo, en el estómago, puedo sentir ligeras cosquillas...
Se siente agradable.Cuando el algodón se acabó, nos miramos unos segundos para después sonreír.
“¿Y ahora a dónde iremos?” pregunta escribiendo.
— Mmmm....¡Ah!, ¿Te parece la montaña rusa?
Su rostro por un momento se congeló, tragó un poco pero sonrió y asintió después.
“¡Claro!”.
Le tomo su mano y juntos nos encaminamos de nuevo....[Pa' mi que ya cayó redondito, ¿Que dicen?]