—¿Estás listo?
Fue lo que pregunté al llegar a su lado, él asiente con alegría mientras saca su libretita y un lápiz.
“Estoy muy emocionado, será la primera vez que viaje a un país que no sea de América o Europa”
Lo leo en mi mente, sonrió enternecido al ver su radiante y bella sonrisa.
Esa que me hipnotiza mágicamente y hace que mi estómago se revuelva en una sensación agradable.
—Hay que irnos, el vuelo no debe tardar...
Llamo a mi chófer, que enseguida llega. Al subir le abrí la puerta al pequeño, siempre hay que demostrar caballerismo, okey, esa palabra no existe.....creo
[Maratón 2mil lecturas, 3/7]
