Terminando la película voltee con él para ver su reacción, no fue sorpresa para mí encontrarlo dormido.
Mis mejillas se tiñeron de rosa en ese momento, se veía angelical.
Con mucho cuidado, me acerqué y rodee con mis brazos su cuerpo, llevándolo a la colcha donde iba a dormir.
Lo arrope y le quité suavemente la tela que cubría sus ojos, de nuevo.
Algo nervioso acerqué mi rostro a él y justo cuando iba a besar su mejilla Mex se ladeó, por poco tocaba sus labios.
- ¡Waaah!
Grité y me cubrí la boca mientras me alejaba.
Mex no despertó.
- Tranquilo China, tranquilo....¡No caigas en su hermosa dulzura!...
Que difícil sería eso...
