Cuando abrí los ojos y le miré, mi universo entero cambió.
Deseo profundamente hundir nuevamente mis labios en los suyos y permanecer abrazados por el resto de la eternidad.Un solo suspiró de su boca me hace estremecer, siento mis huesos temblar y mis piernas se tambalean entre nervios florecientes.
Le escucho murmurar, mirando sus ojos me doy cuenta de su mirada penetrante, que observa mi ser y lo cobija con comprensión.
Le escucho, le oigo y quiero decirlo.
Solo quiero verle así desde éste momento, a partir de ahora.
Quiero seguir con él.Me mira, yo le miró a él. Tambalea sus brazos y me abriga en ellos.
—México...¿Serías mi pareja?