Capítulo 30 "Miel"

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NARRA SALVATORE

Me llevo a mi soñada esposa a nuestra luna de miel y una semana solo nosotros será realmente bueno, tengo preparada cantidad de cosas por hacer y muchas sorpresas; quiero que sea inolvidable y atesoremos estos buenos momentos juntos.

En el jet.

Ella se quedó dormida en la cama apenas comenzó el vuelo.

¡Si quieres no dulzura!

Estuvo bebiendo hasta perder la conciencia con sus amigas y en nuestra celebración continuó, me debe una buena follada en compensación, lo del baño no es suficiente.

Son más o menos la 2:00 am, estamos casi a mitad de camino de nuestro destino y ya termine las cosas pendientes que tenía por hacer en la laptop, ahora voy a despertar a mi bella durmiente para cobrarle una deuda.

Está tan dormida que no se entera de que la estoy desnudando hasta que ya no tiene nada y sigue profunda, también me quito todo lo que traigo y estoy listo para ella; como siempre duro.

Primero separo sus piernas y me deleito con sus pliegues carnosos disfrutando de su sabor tan dulce como ella, le estoy empezando a sacar gemidos involuntarios; ahora me toma del cabello para enterrarme más entre sus piernas, está pidiendo más y yo con gusto se lo doy.

- Que delicia - gimotea.

Entonces siento como se tensa y me araña el brazo, eso significa que está llegando a su punto más alto para caer en un orgasmo que deleitaré con mi lengua, grita mi nombre y es música para mis oídos, se corre y con ello disfruto la dulzura de su esencia.

Estoy tan duro que me duele la polla, necesito follarla ya y por eso me acomodo encima de ella.

- Preservativo Salva - expresa adormecida.

Creo firmemente que no recuerda que ya la folle hace unas horas sin este y me hace gracia saber que estaba lo suficiente ebria para no recodarlo.

- No dulzura, es nuestra luna de miel y te voy a disfrutar completica sin barreras - argumento con miradas lujuriosas hacia ella.

- Pero es que Julia apenas tiene cuatro meses y no estoy lista - alega frunciendo el ceño.

- Sorry - contestó con una estocada certera a su interior.

Entonces ella suelta un gemido bastante alto y se olvida del preservativo, venimos teniendo sexo con este mientras ella comienza a usar la píldora regularmente, pero yo la necesito piel con piel toda esta semana y desde el baño quiero follarla de nuevo así.

Luego paso mi lengua por sus pezones erectos y ella se estremece, luego los muerdo y chupo mientras Zoé ronronea desesperada. Voy subiendo el nivel de mis embestidas y ella gimotea producto de esto, le tomo las caderas fuertemente para marcar un ritmo y el calor de su coño me hace querer destrozarla a estocadas.

El clímax se siente, ella aprieta su interior y me muerde los labios como siempre, esto me enloquece y provoca que le meta el falo con más fuerza, luego le marco su cuello y le doy empollones bestiales sin darle oportunidad de tomar oxígeno, entonces llego en un fuerte gruñido y ella grita mi nombre sin vergüenza mientras siento su interior llenarse de ambos.

Me hago a su lado y ella me sonríe, esta sonrojada y le brillan los ojos.

- ¡Hey! Chica alcohólica me debes una - le reclamo y ella me mira traviesa.

Luego la tomo del cuello para lanzarla a mi entrepierna, entonces ella me mira lascivamente también ronronea mientras se ubica para darme placer y ya estoy duro con solo sentir su aliento.

Cruzando Fronteras (Borrador sin editar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora