Cruzando Fronteras (Borrador sin editar)

Capítulo 49 "Luciano"

NARRA ZOÉ

Estoy viendo paw patrol con mis amores chiquititos en mi habitación y están felices con mami, pronto llegará mi precioso niño pues ya tengo 36 semanas de embarazo y estoy disfrutando al máximo el tiempo con sus hermanos, ser mamá de cuatro no va ser nada fácil. Entonces escucho que alguien corre hacia donde estoy y es Sofía con cara de preocupación.

- ¿Qué sucede? - inquiero asustada - ¿Dime qué sucede? - repito la cuestión mientras me levanto y acerco a ella.

Pero ella intenta devolverse y yo la detengo, necesito saber porque esta bañada en sudor y lágrimas.

- Sofía por favor ¿Qué pasó? - vuelvo a preguntar y la sujeto más fuerte del brazo.

- Necesito que lo tomes con calma, Alma tuvo un accidente y está en la clínica muy delicada - responde ella con los ojos vidriosos sosteniendo mi mano para darme apoyo.

- ¿Qué? no puede ser - levanto la voz sintiendo que se me baja absolutamente todo - ¿Está bien? - la cuestiono tartamudeado muy asustada luego llamo a las niñeras para que cuiden de los niños.

- Está en la clínica no sé aún, vamos a verla - contesta ella sin ganas mirando el suelo.

Entonces salgo con Sofía rumbo al hospital, Nico nos lleva y temo lo peor, tengo un mal presentimiento.

Cuando llegamos a la clínica entramos desesperadas, corremos a buscar a Alma y nos dicen que está en cirugía; allí en la sala de espera puedo ver un Román lleno de sangre sentado mirando al suelo sin emoción alguna.

- ¿Qué pasó? - le pregunto furiosa y asustada - ¿Qué le pasó? - inquiero quebrándome.

- Tuvimos un accidente automovilístico y ella no llevaba el cinturón de seguridad - contesta él muy apagado, se nota que ha llorado mucho.

- ¿Quién diablos tuvo la culpa, fuiste tú cierto? - lo cuestiono en un grito feroz con la mandíbula tensa.

- Cálmate, ven acá - me dice suavemente Salvatore desde atrás y me abraza

- No fui yo, fue un conductor ebrio, estábamos manejando rumbo a casa y ya estábamos cerca, por eso ella se quito el cinturón. El malnacido nos impactó demasiado rápido por eso no alcance a esquivarlo y nos volcó - me explica Román sollozando con su voz más grave de lo que ya es y se sorbe los mocos.

- Es injusto - grito quebrándome y siento que me voy a desmayar.

Luego empiezo a llorar sin poder calmarme y pierdo el conocimiento, sintiendo mucha presión en mi vientre y el corazón latirme muy rápido.

- Zoé amor, Zoé no me hagas esto - dice Salvatore y lo escucho muy lejos como si estuviera en un túnel.

- Paciente Zoé Martínez 36 semanas de gestación, presión arterial en 140/90, sufrimiento fetal, preparando para una cesaría de emergencia - alguien habla y cada vez es más lejana su voz.

Luego otra vez oscuridad.

Después vuelve la luz y escucho un bebé llorar, esto me enciende el corazón. Intento abrir los ojos pero no lo logro, siento que estoy conectada al oxígeno lo cual me incómoda; seguidamente intento otra vez abrir los ojos y cuando lo hago veo a un hermoso bebé lleno de cabello oscuro siendo cargado por Salvatore.

- Mira quien se despertó, mami está lista para conocerte - dice Salvatore dulcemente mientras me acerca mi pequeño.

- Mi bebé lindo por fin te conozco - expreso entre lágrimas y sollozos; estoy muy mareada pero feliz de tenerlo en mis brazos.

Ahora sostengo mi pequeño y disfruto ver su carita por primera vez, abre sus ojos y veo el mismo azul de su padre, este pequeño es el clon de Salvatore.