NARRA ZOÉ
Hoy es domingo y he decidido descansar; será un día de relajo, amor, películas, dulces y muchos abrazos.
Estoy en la mitad de una película de princesas, suena mi celular y es una llamada de Sofía, amo las llamadas de Sofía; ella es una mujer fuerte y un gran ejemplo de superación.
- Sofiiiií - contestó feliz con la boca llena de palomitas y me levanto para no molestar a Aitana porque ya me está mirando feo.
Luego me dirijo al living pues estamos en mi alcoba.
- Zoé hermanita ¿Cómo estás? - me pregunta con mucho amor.
- Hermana hoy estoy descansando, ha sido duro últimamente, pero ya sabes, las mujeres Martínez Flórez somos fuertes - al decirlo rio orgullosa y me siento en el mueble.
- Esa es mi hermanita... te tengo que preguntar algo y quiero que lo pienses - me dice en un tono más serio - Zoé ¿Puedes considerar venir a vivir acá a Italia? - inquiere melancólicamente.
Me quedo sin palabras y miro hacia la ventana, las lágrimas comienzan a salir.
- ¿Hermanita estás ahí? - me pregunta.
- Creo que es una buena idea - le respondo sin más, pues creo que lo es.
¿Qué me queda realmente en México?
Nada.
Tenemos poca familia y es muy alejada, lo único que tenía era mi hogar y de eso ya solo tengo mis hijos que los puedo llevar conmigo, aunque sé que en Italia no va ser fácil y voy a tener que esforzarme mucho, al menos estaré con mi hermana y lejos de Cancún, Paraíso agridulce para mí.
- Lo primero que tienes que hacer es hablar con Roberto y convencerlo como sea que permita la salida de los niños a Italia; yo te regalo los pasajes, te vienes a vivir a mi casa y yo te ayudo a conseguir en que trabajar mientras aprendes a hablar italiano, luego vemos como poder ejercer tu profesión acá como yo - me dice feliz.
- Gracias hermana, voy hablar con él, voy a convencerlo, más o menos ¿Cuando? - le pregunto esperanzada.
- Inmediatamente te dé el permiso, empacas lo más importante y te vienes para acá, el resto véndelo o dónalo, iniciaremos una nueva vida, muero por conocer mis sobrinos - plantea alegre.
- Yo muero por conocer a Dante - le digo nostálgica y emocionada.
**********
Ha pasado una semana desde que hablé con Sofía, ya he mirado todo lo que llevaría y todo lo que podría vender para irme; hoy viene Roberto, después de veinte días sin hacerlo y creo que hoy se lo diré.
En la tarde...
Estamos en el living, él está ahí como siempre ausente y aclaró mi garganta.
- Roberto, tengo que preguntarte algo - al decirlo él me mira expectante, luego me levanto y me acercó más para sentarme a su lado, entonces este me mira extrañado - Hablé con Sofía y dice que podemos ir a vivir con ella, yo sé que también son tus hijos, pero vivir en Cancún es costoso, allá quizás puedan tener una mejor vida y de pronto sea más fácil mantenerlos - le expongo la situación y él me mira sorprendido.
- No lo sé - me dice y cruza sus manos - Creo que me voy y lo pensaré - agrega y se levanta.
- Lo que digo es verdad, ahora que sé que son tres hijos los que mantienes, no debe ser fácil para ti, pues la vida es muy costosa y quisiera ayudarte más por mi lado a parte de darle algo mejor a mis hijos - le expongo todo de una manera muy calmada y me levanto para acompañarlo a la puerta.
Yo a él realmente lo odio demasiado y es un mal papá, no merece ni estar acá; pero he sido inteligente, no he peleado con este desde que nos separamos, ni siquiera porque les dé o no cosas. Yo creo que las situaciones siempre se deben llevar con inteligencia y paciencia, quizás los frutos de todo se den en este momento, yo ya había pensado en irme del país lejos de todo.
- Piénsalo - le digo mientras estoy en la puerta.
- Adiós - se despide y yo hago lo mismo mientras cierro la puerta.
**********
Hoy es lunes, empieza la semana, mi dura semana; suena mi celular mientras estoy en turno, veo la pantalla y es Roberto, no han pasado ni 24 horas.
Ojalá sea una buena respuesta.
- Bueno - contesto calmada así lo odie locamente y me dirijo al baño para hablar tranquila.
- Zoé creo que es una buena idea lo que me dijiste ayer, hablé con Guadalupe y ella cree que es lo mejor, para mí es muy difícil mantener dos hogares; pero de una vez te digo, si te vas no esperes nada de mi parte, inclusive te puedo dar la custodia de los niños y puedes hacer tu vida con ellos en Italia - dice él desgraciado con una tranquilidad abrumadora.
Lo que pienso de ese par de escorias en este momento es que son unas porquerías, me quedo callada y me trago todo lo que siento para responder.
- Gracias Roberto, te agradezco mucho la oportunidad de dejarme llevar los niños y buscar un futuro mejor. Claro que entiendo a la perfección lo que dices, hablare con mi hermana y te haré saber cuándo partimos, para que puedas aprovechar lo que queda de tiempo y organizar toda la papelería - digo tranquila sin un atisbo de rabia.
- Espero que solo sea para un mejor futuro, te advierto - pausa - Nada de hombres alrededor de mis hijos, si me entero, te voy y te busco a Italia, por supuesto te los quito, ¿Entendiste? - me pregunta la rata hipócrita.
Con toda la falsedad del mundo, porque él es el maldito infiel respondo.
- Pues cómo Roberto, yo no tengo tiempo en mi vida que no sea para trabajar y estar con mis hijos, no te preocupes - le aclaro calmada pero por dentro siento que quiero darle una paliza.
No es que vaya en búsqueda de marido, pero tengo 30 años no soy una anciana para quedarme toda la vida sola mientras esté idiota hace y deshace, igual después de que me dé la custodia y viva en Italia, jamás volveré, jamás.
- Eso espero, bien juiciosa y cuidando de ellos - declara el maldito cínico.
- Claro que sí, me conoces, soy una mujer de casa y enfocada en mi familia - le respondo con tranquilidad porque sé que soy una mujer casera y de hogar.
- Estamos hablando - dice con un tono orgulloso.
- Claro que sí, hasta luego y muchas gracias de corazón - digo de verdad porque es una gran oportunidad para mí y mis hijos.
Termino turno y me dirijo a mi hogar, hoy salí de uno de la noche y son las 7:00 am, para estas ocasiones pago una niñera. Ella es una vieja amiga de mi madre, sin ella creo que no hubiera sobrevivido a mi maternidad, inclusive cuando estaba con Roberto; este no cuidaba de sus hijos, yo siempre he dependido de ella y la guardería. Llego a mi casa, abro la puerta y veo a Rosa con Miguel en sus brazos mientras le da un biberón.
Los miro y les sonrió.
- Hola Rosita, hola mi cielito - los saludo con un abrazo y beso a mi bebé en su cabecita - Ahora mamá va ir a dormir y caer en coma - les cuento mientras me dirijo a mi habitación y Rosa se encarga de mis hijos mientras yo descanso.
Despierto, son las 3:00 pm; Rosa no está porque salió a recoger con Miguel a Aitana a la guardería. Me levanto tomo mi celular y llamo a mi hermana, le cuento que Roberto accedió y ella grita de la felicidad, empiezo a llorar y ella también, luego nos despedimos y decidimos que en un mes se hará el viaje, ya no hay vuelta atrás.
Cuando llega rosa yo estoy llorando, se me acerca con mis dos hermosos niños, que me ven llorar y entonces empiezan a llorar Conmigo.
Abrazo mis hijos y les cuento sobre un nuevo comienzo, ellos me miran tristes y con lágrimas en sus caritas.
Es el momento de irnos y empezar de nuevo.
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Cruzando Fronteras (Borrador sin editar)
RomanceZoé Martínez Flórez, es una madre soltera hecha de hierro y con el corazón roto. Salvatore Mazza; seductor, frío y calculador. Está es su historia... 🖤 Primer libro de la saga "ROSAS" 🥀 Historia original y única de mi autoría, no se aceptan copi...