Capítulo 50 "La despedida"

4.8K 259 67
                                    

Narra Zoé

Estoy con Alma en su habitación de la clínica, me encuentro empacando todo con ayuda de su enfermera personal Frida porque hoy le dieron de alta.

- Vas a volver a ser feliz, vas a salir adelante, vas a volver a sonreír - le digo con un gran abrazo y ella suspira - Eres valiente, fuerte, resiliente - musito y la sigo abrazando - Vas a sanar poco a poco y aquí estaremos todos - expreso entre lágrimas mientras nos separo para mirarla a los ojos.

- No creo - confiesa suavemente y son sus primeras palabras después de quince días después de haber despertado.

- Si crees y lo lograrás, tú familia está para ti - le aclaro tomándola de la mano.

- Pero él no está - contesta y solloza mientras tiembla.

Alma está llorando desconsoladamente y Román entra, luego la mira y camina hacia ella para abrazarla pero mi amiga no le devuelve el gesto, he notado que ella está demasiado distante de él. Posteriormente partimos a casa de ellos, después de estar un mes y medio en la clínica; Alma está muy mal emocionalmente y aún no ha conocido a Luciano, me parece quizás algo inapropiado y siempre evito hablar de él.

De camino a su casa en el auto hay mucho silencio pero Alma lo rompe.

- Zoé yo quiero conocerlo - me dice tranquila y voltea a mirarme a los ojos.

- ¿Bella estás segura? - le pregunta dulcemente por el retrovisor el ruso.

- Porqué mejor no sigues con tu atención en la carretera, estás manejando - espeta mi amiga y lo mira de una forma muy fría.

- Tranquila - le digo y acaricio su brazo - Ahora llamo a Salvatore para que lo lleve - manifiesto sonriente y ella me mira de una forma difícil de descifrar.

Luego llegamos a su mansión y ella le pide a Román que nos deje solas; entonces decidimos acurrucarnos para ver una película, al rato llega Sofía quien va dormir con ella esta semana para cuidarla y se une a nosotras. Al terminar la película mi querido esposo llega con mi mini Salvatore y Alma llora desconsoladamente mientras lo mira.

- Es mucho, dejémoslo para otro día - le digo intranquila por ella pero Alma solo niega con la cabeza.

- Es tan hermoso - expresa con lágrimas en los ojos y le sonríe - Quiero cargarlo - al decirlo se acerca a mí y yo sé lo entrego.

Entonces Alma besa, abraza y acaricia mi niño; ella es un gran ser que ha sufrido pérdidas muy duras pero yo sé que se va a recuperar y encontrará de nuevo la felicidad. Esta noche me quedo con ellas y Alma está feliz con el pequeño Luciano, tanto que ya le dice lucecita.

*****

Pasan los días y despedimos el año en familia, mi hermosa familia de seis. Somos felices y afortunados por tenernos, sé que fue un año muy difícil para mi relación pero lo superamos todo y nuestra conexión es increíble; lo amo y adoro, lo necesito y deseo, mi italiano junto a mis pequeños son todo para mí.

Alma continua fría con Román, Sofía está feliz con Tito, se revirtieron los papeles entre Gabriella y su prometido, no he vuelto a ver a Millie pero si a Cyan, mi enfermera está embarazada, la niñera Lucia renunció y solo veo enredos entre muchos a mí al rededor.

*****

Estamos en el jardín tomando el sol; yo tengo en brazos a mi pequeño dándole pecho, Salvatore tiene a julia y está dándole un biberón mientras Aitana junto a Miguel juegan en el césped. Nos encontramos planeando nuestro primer aniversario, pues será en una semana y queremos que sea inolvidable.

Cruzando Fronteras (Borrador sin editar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora