Mi pequeña acosadora | JJK (+15)

35.El balcón del colegio

Sus pupilas se dilataron al tenerla semidesnuda,el sonrojo tan tierno que adornaban sus mejillas y esa piel jugosa lo inquietaban cada vez más.En repetidas ocasiones le había acariciado la cinturita,los brazos,pero esta vez la veía diferente.

Ahora podía ver lo que ocultaba su uniforme escolar,era ella y su pequeño cuerpo en desarrollo,sus ojos se perdieron en las semicurvas que se asomaban por el borde su corpiño,las palmas de las manos comenzaron a sudarle al querer jugar con sus cabellos,más que eso,estaba ansioso por deslizar las yemas de sus dedos por toda su figurita.

—Papá está espe-...

—Con que esto es lo que acariciaba todos los jueves... -dijo completamente embobado-. ¿No quieres repetir esas caricias Suni?... -disminuyó el volumen de su voz-. Podemos hacerlo justo ahora bonita

—¿B-bonita?... -abrió los ojos de par en par-. Papá me dice así... -su comentario lo desenfocó-.

—Siempre te he llamado así,y nunca me lo habías reprochado -le recordó-. Quizás se te olvidó también como tu cuerpo reacciona ante mi cercanía -hizo a un lado la puerta y dio un paso hacia ella decidido a hacerla temblar-. ¿Olvidaste eso bonita? -hizo énfasis en la última palabra y sus dedos se atrevieron a dar con la piel descubierta de sus hombros-. Dime, ¿Esto no te provoca nada?... -admiró sus mejillas al tope de rojo,las cuales lo incitaron a seguir,ni siquiera se tomó la molestia de preguntarse por lo que ella sentía-. Yo me estoy muriendo por acariciarte,y parece que tú te empeñas por evitarme, ¿Qué sucede Suni?...

Su boca se vio sedienta,tenía sed,quería beber de su saliva,ella era su pequeña enamorada,la que lo espiaba entre clases,quien le preparó un panquesito de amor,la niña que le pidió leerle poesía de amor,sabía que no se negaría ante un beso,y con esa confianza buscó sus labios.

Su sorpresa fue grande al ver como lo apartó sin temor alguno.

—Aléjate -pidió con la mirada baja-.

—¿Qué?...

—Papá está esperándome... -posicionó sus manos en su pecho descubierto y pudo sentir la humedad y suavidad de su piel,se armó de valor para no verse frágil y lo empujó fuera de su habitación-. N-No puedes andar por ahí desnudo...

—¿Y qué propones?

—Para eso existe la ropa... -su voz empezaba a achicarse y sonrió victorioso-.

—Pero tú quieres que use una camiseta Suni -no pudo verla,pero se imaginó sus ojos como platos-. Solo mírate,tus dedos están jugando con mi piel -estos se tensaron-. ¿Y qué me dices de la vista eh?, No creas que no me di cuenta la forma tan descarada con que me veías en la piscina, ¿Esto es lo que tanto ansiabas?, ¿Y las miraditas que?, Admítelo Suni, te morías por tenerme cerca de ti

—C-Cállate... -ambos se sorprendieron de la palabra que soltó-. D-Debo ir con papá...

—Cuida tu vocabulario bonita -le dio un pequeño toque a su cabecita-. ¿Quieres que me vaya?, ¿Y qué esperas para despegar tus manos de mi torso?, Tú eres quien me está reteniendo -volvió a tomar el control y le susurró,dejó las palabritas a un lado y las acciones entraron al ruedo,enderezó la postura,con ello logró que la pequeña cambiara de posición,sus manos fueron detrás de sus orejas con agilidad,acariciando la cálida zona-. Es porque no quieres que me vaya,para serte sincero... Yo tampoco podía dejar de mirarte,era imposible no ver cómo tu piel brillaba bajo el sol... -su nariz acarició sus mejillas rojas,ella estaba estática,no estaba segura en sí corresponderle,no lo supo hasta que sintió sus manos por la cintura-.