Mi pequeña acosadora | JJK (+15)

14.Medicina para el corazón

—Y me regaló mi iPod

El mayor explotó a carcajadas como la máquina de pelotitas.

—Basta -restregó el trapeador sobre el azulejo-. No es gracioso

—Por supuesto que para ti no lo es -recordó lo que le había dicho y volvió a reírse-. Pero para mi sí, ¿y qué más hizo?, digo, para terminar de mearme

—Dijo que quería que me fuera útil

Jeon Jungkook metió el trapeador a la cubeta y luego pisó un pedal negro para que las hebras de tela escurrieran el agua. La mezcla líquida, tenía cloro y un montón de sustancias que lograban retirar toda la grasa del piso, al lado de las escaleras, en donde Jin estaba sentado, había puesto un letrero amarillo de precaución.

Cuidado, piso mojado y dos adolescentes.

Sábado por la noche y el muchacho fregaba los azulejos de McDonald's, quitando el aroma del jugo de los pepinillos y controlando su ira por cada chiquillo que pasaba corriendo al baño cuando acababa de limpiar. La playera amarilla patito y un pantalón azul marino que le marcaba el torso. Claro, y esa gorrita coqueta que lo tenía harto. Los Kwang's estaban de fiesta y apenas Jin se enteró de que no iba, fue a molestarlo a su trabajo.

Aunque estaba ahí, sentadito, le daba apoyo moral.

—Va por tu cuenta -Jin, volvió a las escaleras con otro cono de fresa en las manos y dejó las huellas grises de sus zapatos impregnadas en el piso-.

—¡Es tu tercer cono! -se recargó sobre el pilar y le retó-. ¡Te has agotado todos mis cupones!

—Ni los usas -respondió despreocupado, seguido, le dio un lengüetazo al helado-. Y Suni sigue sin ser tu novia, no tienes a nadie con quien gastar tus pedacitos de cartón, ¿o sí?

Jin echó el cuello para adelante y entrecerró los ojos. Inspector.

—¿Qué se supone que iba a decirle?, "sí Suni seamos novios" -extendió los brazos con simpleza-.

—¿Y por qué no? -se pasó el helado en la boca y prosiguió-. Llevas medio año queriendo ser su novio

—Hyo y su guitarra...-

—Hyo solo estaba jugando con ella -le interrumpió y soltó lo que ambos sabían-.

—Olvidas a Taehyung...-

—Su hermano solo comparte el apellido -le interrumpió y agravó su expresión-. ¿Qué más?, ¿qué otra excusa te falta?

—Yo solo quería que...

—¿Qué creciera? -alzó la ceja-. Igual y en cinco años ya no le gustas

—Yo solo quería que me amara...

La gorra se agachó y el adolescente abrazó al trapeador.

—De verdad que una hormiga es más lista -Jin mostró calma y el otro acercó su cara-. ¡Ya te dijo que te ama, puto niño!

—No es tan sencillo -le arrebató el cono de las manos y se sentó a su lado en las escaleras, con el trapeador desparramado entre sus piernas-.

—Pero querías jugar a la niñera, yo te lo advertí

Jin agitó su dedo índice en el aire.

La hermanita de su mejor amigo le había pedido que fuera su novio el jueves, disfrutó los besitos llenos de inocencia que le dio en los cachetes, pero no le respondió. Porque la prefecta se había percatado de la ausencia de una de las estudiantes de secundaria y los encontró en una situación inapropiada para el colegio. Fue Jungkook quien convenció a la profesora de que no llamara a Seung.