En ese instante no dudó en mirar al zorro y abalanzarse contra él. Su rápida respiración, al igual que el golpeteo de su inquieto corazón, cegaban sus pensamientos; tendría que haberlo adivinado antes. Su mente soltó, una y otra vez, el nombre del culpable, aquella persona que la despreciaba y buscaba hundirla. Se mordió la lengua para evitar descargar toda esa repentina ira contra el blanco cánido.
—¡Tenemos que llegar allí lo antes posible!
Sin embargo controlarse resultó ser imposible, había fracasado al intentar retener ese impulso que ascendía, como lava dentro de un volcán en erupción, desde su corazón hasta su cabeza. Enseguida se levantó, ignorando su delicada y herida pierna, pero sintió como la tiraban del brazo, Jhon no permitió que se fuera.
—Ni siquiera Dennis puede sacarnos de aquí ¿y tú quieres irte? —la confusión y severidad se hicieron notar en su voz al preguntar.
—¿Ir a dónde?
De entre la densa maleza que rodeaba al campamento aparecieron Dennis y Brian, quienes perplejos cruzaron miradas entre sí al observar el leve forcejeo entre el zorro y la humana. El mismo no duró mucho tiempo ya que Chris no vaciló a la hora de enfrentarse al rubio, aprisionándolo en contra de un grueso árbol.
—¡¿Cuándo pensabas decírmelo?! —vociferó con rabia, recibiendo un encogimiento de hombros del contrario—, ¿acaso ibas a ocultar quien los ayudó a escapar?
—¿A ti qué más te da? —se defendió con arrogancia, siendo soltado al poco tiempo.
—Agh... No hay tiempo para esto, debemos irnos.
Fue Jhon el responsable de calmarla, posando una pata sobre su hombro y obligándola a detenerse. Se lo veía perdido, pues desconocía las razones por las que ella había reaccionado de esa manera. La preocupación no abandonó a Chris cuando pensó en contarle la verdad de todo, a sabiendas de lo que causaría. Sin embargo, la necesidad de hacer algo al respecto sofocaba su razonamiento.
—¡Él es la razón por la que esta guerra sigue activa! —Los tres se giraron ante ella, confusos por la revelación.
—¿Cómo un solo humano siquiera puede mantenerla? —dudó Brian apoyado de un árbol. Su expresión, colmada por el cansancio, demostraba su hartazgo.
—Sospecho que fue él quien permitió las torturas... Además está el tema de Max.
—¿Mi hijo? —La sonora pregunta del zorro retumbó en su cabeza como un estruendo.
Chris tragó saliva al notar su garganta secarse. Tenía que arriesgarse si iba a intentar convencerlos, de lo contrario no iba a tener un motivo para justificar su inesperada reacción. De esa forma, supo lo que debía atreverse a contar.
—Podemos crear una solución para frenar el problema entre carnívoros y herbívoros y Max es la clave una vez más —reveló provocando un ahogado suspiro en ambos cánidos—. Pero Ronan tiene otros intereses, y quitará a todos los que se le pongan en medio, así que ellos tres corren peligro
Jhon bajó su desesperada mirada al suelo mientras apretaba los dientes para evitar soltar su impotencia. Finalmente Dennis rompió el pesado silencio con un duro carraspeo, de la misma manera alzó la voz sobre ellos, anunciando con firmeza:
—Entonces está decidido, nos movemos de inmediato.
-+-+
Aquella joven voz detrás del radio resonó hasta en los lugares más recónditos de su cerebro, penetrando su oído como un potente taladro. Arrastró al felino hacia el interior del vehículo, donde sus pasajeros yacían sin vida entre los asientos, ante este panorama se escucharon dos suspiros, claramente uno era del líder rival y el otro había escapado de Ángel, quien seguía a su compañero evitando interferir.
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La evolución de las especies
Science Fiction--Sin duda lo que pasó en todo ese tiempo me quitó el sueño por años. --El hecho de que la ciudad estuviese amurallada dejaba a muchos con un intranquilo sentimiento. El gobierno nos mantenía ahí dentro, diciendo que lo mejor era permanecer allí, q...