Capítulo 6

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—A día de hoy pienso que no soy fuerte, solo un cobarde, no merezco tener la responsabilidad que tengo actualmente —balbuceó triste, sus ojos se tornaron azules.

No dije nada, él tenía razón, pero tampoco tenía toda la culpa.

—Como sea —suspiró cabizbajo, como  gesto de la pena que se tenía a sí mismo—. Cuando desperté planeé invitar a Aish a lo de aquella mañana, era una forma de que volvamos a llevarnos bien...

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Con el cielo ya anaranjado debido al cercano amanecer, los tres animales caminaban por las vacías calles de la ciudad, iluminada aún por las tenues farolas clavadas en la acera.
Una densa neblina mañanera se había formado y no dejaba ver a más de cinco patas de distancia y  juzgando por lo abrigados que iban aquellos tres, parecía hacer bastante frío.
Max y Ray estaban exhaustos, habían caminado casi cuatro kilómetros desde el departamento del felino, sin embargo, Aish parecía recién levantada, como si el caminar tanta distancia fuera una rutina para ella. Hacía rato ya habían dejado atrás los suburbios de la ciudad, actualmente estaban en una carretera rodeada por un denso bosque, sin duda se encontraban en los limites de su sector.

—Llegamos —avisó el león viendo los muros y el paso fronterizo. Su mirada estaba clavada en lo más alto de aquellas gruesas paredes de cemento, las cuales lucían como gigantes sombras debido a la niebla, una mochila colgaba de su hombro.

—¡Menos mal!, me duelen las patas
—comentó el lobo exhausto—.¿De verdad piensas que está aquí abajo?, sabes que no podemos estar tan cerca del paso, se vería sospechoso tres carnívoros en la frontera.

—Tranquilo, desde allá no nos verán, al menos, eso espero —respondió sin darle importarcia al asunto.

—¡¿Esperas?!...  —exclamó molesto—. estamos muertos.

—Por favor Max, no actúes como un cachorro llorón —le espetó el león.

—Concuerdo contigo Ray —agregó Aish mirando al amarronado. Max sólo rodó los ojos como signo de molestia.

Ray frenó en seco, miró a la derecha, donde se encontraba uno de los lados del bosque y se internó en este. Ambos lobos lo miraron confundidos y lo siguieron a través de la densa vegetación.

—¿Dónde se supone que vamos?
—inquirió Max siguiendo a su amigo.

—De seguro tiene ganas de mear
—bromeó Aish a lo que Ray rió.

El grisáceo la miró por un segundo y sonrió ahora con sus ojos verdes, ya había empezado a extrañar la actitud de su hermana, a pesar que decía molestarse por esta, en realidad le gustaba, la hacía alguien especial.
Luego de minutos de incómodo silencio, en donde solo se escuchaban los pasos de los tres, llegaron a un claro, estaban cerca de los muros ya que estos se veían sobre la copa de los árboles, la neblina se había disipado bastante. En medio de aquel claro invadido por, ahora una débil niebla, se encontraba un edificio hecho de cemento, no era grande pero tenía el tamaño suficiente como para refugiar a una docena de animales cómodamente.

—¿Qué se supone que es esto?
—preguntó Aish incómoda.

—¿Miedo? —remarcó Ray volteandose a verla—. Imaginate que encontré esto de noche.

—Ya, pero eres un felino —respondió ella encogiéndose de hombros—. Se supone que ves mejor en la oscuridad.

—No es como crees —comentó esta vez girándose a ver a Max y preguntándole—. ¿Como lo ves amigo?.

—He visto cosas peores en el tiempo que llevamos haciendo esto, ¿qué tiene de especial?.

—Esto —dijo sacando un pequeño cuaderno y mostrando una de sus hojas, en la que había un mapa dibujado a lapiz, el papel mostraba todo el bosque y la carretera dibujados como un simple boceto—.
Por la posición de los muros en el plano antiguo, creo que estamos en el sector dos, así que teorizo dos posibles entradas, tal y como lo dice el mapa, la primera, es el círculo pequeño en la parte de abajo del sector, anoche explorando la zona vi que ese punto corresponde a un aserradero, el lugar esta activo y es obvio que no podremos entrar ahí 
—contó sacando su celular de la mochila —. Pero hay otro posible lugar y el punto de arriba concuerda exactamente con esto.

La evolución de las especiesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora