29

4 1 2
                                    

Había ciertos problemas con el plan, y es que solo podrían aprovechar el factor sorpresa una vez, aparte de que desde que se descubriese cómo funcionaba su poder se separarían todos para que solo pudiese llevárselos de uno en uno, también añadiendo el problema de que sabrían que estaban ahí.

Claro que, aparte de todas esas cosas Asmodeo se fijó en algo, una caseta en particular, había un hombre dentro, su cara le sonaba bastante, lo señaló al resto y Valentina lo reconoció.

-Asmodeo, ese hombre de ahí... el es el mismísimo jefe de la organización, es el jefe de la agencia de seguridad, aquí tengo una imagen suya, míralo.

Les enseñó la imagen y efectivamente, eran el mismo, ninguno lo pensó dos veces.

-Helge, acaba con el de una vez.

Helge desapareció de donde estaba, apareció a un lado del jefe y volvió a desaparecer.

En el ártico:

-al fin te tengo malnacido, cabrón asqueroso, ¡muere!

Helge le clavó una espada en el pecho y el jefe de desplomó en el suelo.

Todo había acabado al fin, todo había terminado, habían matado al rey, la partida había acabado.

-Helge, acaba con el de una vez.

-esperen un momento, ¿no había pasado esto antes?-preguntó Aren.

-cierto, ¿cómo es posible? No importa, seguramente sólo haya sido una alucinación pasajera por la emoción, acaba con el Helge-dijo Valentina.

Helge desapareció, apareció a un lado del jefe y volvió a desaparecer.

En el ártico:

-al fin puedo acabar contigo de una vez malnacido-dijo Helge-¡mue...-No pudo hablar más.

-detente niño, ¿no te fijaste en que esto ya había pasado?

-Helge, acaba con el-dijeron todos.

Volvían a estar todos de vuelta, no había jefe ni Ártico, solo un grupo de gente escondida, Helge, Aren, Asmodeo, Valentina y Verónica.

-un momento, ¿no estaba yo hablando con ese hombre? Se supone que no tiene poder alguno, ¿será cosa del poder de alguno de sus guardias? ¿Esa gente puede retroceder el tiempo?

Pero no pudieron pararse a reflexionar, empezaron a sonar disparos y la batalla comenzó, la banda intentó acceder al templo con el poder de Helge, pero no funcionó, algo le impedía entrar ahí.

Se transportó al muro norte que cubría el templo, había gente merodeando por ahí, todos buscaban al ejército legendario, sin éxito claro. La banda desapareció del muro y apareció en una sala oscura, se encendió una vela, vieron un cubo de energía azul medio transparente y un monje dentro de este, habían llegado por alguna razón.

El credoWhere stories live. Discover now