🍏No Fun Club🍏

Wormtail

—¿Lo encontraste?

—No está en ninguna parte.

—Bueno, les recuerdo que tiene una capa invisible... —dijo Hermione—. ¿Qué te dijo el profesor Lupin, Ron?

—Por alguna razón quería que esta tarde lleve a Scabbers a su oficina. Y me dijo que si pudiera hablara con Harry.

—Oh... qué raro, ¿para qué querrá a tu rata?

—¡Chicos, Harry! —dijo Draco.

—¿Donde? —Ron se volteó.

—No, imbécil. Me refiero a que sigamos buscándolo.

—Quizás necesite su espacio... —dijo Hermione.

—¿Y por qué esas caras? —George se acercó junto a Fred.

—¿No han visto a Harry? —preguntó Ron.

—Yo no —le contestó George y miró a Fred alzando una ceja—. ¿Donde lo dejaste?

—¿Qué? No lo he visto desde la mañana. ¿Qué le pasó? Bueno, qué le pasó ahora, parece que todo le pasa.

—Nada, solo lo buscamos. —dijo Draco.

—Ya, todo el mundo se va a enterar de todos modos —dijo Hermione—. Estábamos en clase de Defensa Contra Las Artes Oscuras y nos llevaron un Boggart.

—Uy, no... a veces es vergonzoso.

—Fue incómodo —asintió Hermione con aspereza—. Y fue intenso. Eran sus padres y Sirius, y Remus diciéndole como lo odiaban y esas cosas... o como que preferían a Neville de hijo, cosas así. Creo que el pobre Neville sigue llorando, tampoco ha sido un muy buen día para él. Luego... el boggart de convirtió en el mismo Harry, pero... mini Harry. Era como era cuando llegó. Se me había olvidado que era tan adorable... pero le decía cosas horribles, hasta que se matara.

—Y luego se fue de la sala. Draco intentó ir tras él, pero no lo volvió a encontrar. —dijo Ron.

—Bueno... uf... —Fred miró a George y se miraron con una mezcla de emociones, que nadie pudo entender, y de nuevo parecía como si estuvieran hablando por telepatía—. Yo lo iré a buscar. Creo saber donde está.

—Hm. —George se cruzó de brazos mientras Fred se iba.

—¿Por qué te enojas? —le preguntó Ron.

—¿Por qué me enojaría?

—No sé, por eso te pregunto. Lo miras igual como cuando iba con Oliver. Deberías conseguir una novia.

George chasqueó la lengua.

—Cállate, aborto.

...

El bosque estaba muy callado y tranquilo. Harry estaba sentado en un tronco caído bajo su capa invisible, alrededor olía bien, las aves aún cantaban y el sol se colaba por las hojas.

Esa era la paz que quería sentir, pero su cabeza no dejaba de hacer ruido. No solo se sentía humillado, y le daba vergüenza, sino que también, aunque sabía que no era real, era algo que había visto y escuchado, y no se podía sacar de la cabeza esas palabras.

Se preguntaba cuántas personas necesitarían tratamiento psicológico por un boggart. Se sentía demasiado idiota poniéndose así solo por un boggart.

Escuchó pasos tras él y trató de aguantar la respiración y quedarse completamente quieto, en cogido en sus piernas. Alguien se sentó al lado suyo doblando un papel, pero no volteó.