Estábamos con los chicos comiendo, la ojiverde y yo terminamos primero y fuimos a hablar al campo de fútbol, ese lugar se estaba volviendo nuestro al momento de hablar cosas importantes en el instituto.
—¿Ya me vas a decir?
—Expulsaron a tu ex—informe sonriendo a lo que ella alzó ambas cejas.
—¿De verdad? ¿Cuándo pasó eso?
—Sí Leo me lo dijo, el martes, lo vieron discutir conmigo y ya había provocado varios problemas.
—Eso explicaría porque no lo vi en toda la semana—dijo sonriendo.
—Lo sé, lo mismo le dije a Leo.
—¿Así que nuestra pelea fue una tontería?—preguntó riendo
—Así es.
—Menos mal ya arreglamos las cosas, y no sé meterá con nosotras—dijo haciendo un pequeño bailecito estando sentada, a lo que sonreí—de verdad estoy muy feliz.
—Igual yo bonita—se abalanzó sobre mí abrazándome, casi caíamos pero no se separó de mí, hasta que sonó el timbre para entrar a la siguiente clase. Le di un beso y me fui, la clase de ella se había suspendido, solo me acompañó a los pasillos del instituto.
Ya habíamos salido de clases, y estábamos hablando sobre que haríamos en vacaciones las cuales serían en una semana.
—Mi tío tiene unas pequeñas cabañas en un bosque cercano, él me ha dicho que cuando quiera se las puedo pedir, es muy lindo haya—dijo Neidan.
—¿Cuántas cabañas son?—preguntó Zac.
—Son cuatro.
—Está bien, y supongo que invitaras a Daniel ¿no?—preguntó Flor.
—Claro, caben dos personas en una cabaña. Puede ser Zac con Leo, Flor con Kristen, tú con la castaña y Daniel conmigo, ¿qué les parece el plan?
—Me parece muy bien—aseguró Leo a lo que todos asentimos.
—Perfecto, pidan permiso y me avisan mañana quién irá para decirle a mi tío.
Todos nos despedimos y nos fuimos a nuestras casas.
El plan que propuso Neidan me pareció increíble pero el hecho de pensar que estaría sola con la castaña, sin que nadie nos interrumpiera y en la misma cabaña me emocionaba pero al mismo tiempo me ponía nerviosa, no sabía si habría dos habitaciónes, mínimo dos camas o tendría que compartir cama con ella.
Tenía que pedir permiso a mis papás para poder ir, por lo que espere hasta que mi papá llegara para hablar con los dos.
Al principio fue un poco difícil convencerlos, pero cuando les mencioné que iría Leo y la castaña, me dijeron que estaba bien, que no hiciera nada malo.
Había hablado con la castaña y me dijo que ha ella todavía no le daban permiso pero que iba hacer lo posible, me desanime un poco con eso, si ella no iba no tenía caso que yo fuera.
Ya era martes y de verdad estaba muy nerviosa, no pude dormir mucho porque no sabía si la castaña iría. Llegué al instituto y los chicos ya estaban ahí, siempre despertaban más temprano que yo, le sonreí a la castaña y me uní al pequeño círculo que tenían.
—Bien, ahora que ya llegaste puedo empezar a preguntar quién y quién irá, Daniel y yo iremos, ¿quién más?—preguntó Neidan.
Todos estaban diciendo que sí irían.
—Yo también iré—dije mirando a la castaña que era la única que no decía nada.
—Perfecto, y tú castaña ¿no iras?—volvió a preguntar Neidan.
—Claro que iré, me costó mucho convencer a mis papás pero si me dieron permiso—dijo sonriendo mirándome a mí, también le sonreí emocionada.
—¡Muy bien! iremos todos, le avisaré a mi tío de una vez—afirmó Neidan sacando su teléfono y alejándose de nosotros muy emocionado.
Cuando todos se pusieron a hablar con alguien de cualquier tema, a lo que me dirigí hacia la castaña.—Me había asustado, pensaba que no vendrías—dije poniéndome al lado de ella.
—¿Y dejarte sola? Jamás, no te librarás de mí tan fácil—me miró con una sonrisa de lado.
—No pretendo hacerlo, me encanta estar contigo—puse mi brazo alrededor de su hombro, me iba a contestar algo cuando Neidan habló.
—¡Hey! Mi tío aceptó prestarnos todo sin cobrarnos nada, lo único que pide es que dejemos todo limpio y ya.
—Pues está perfecto eso, solo falta esperar a que pase esta maldita semana—dijo Zac.
—Así es, pero por el momento a entrar a clases—ordenó Kristen.
Todos entramos, y el día fue normal, nos sentamos a almorzar todos juntos y estábamos emocionados por ir a las cabañas los chicos querían ir desde el lunes al viernes, y todos estábamos de acuerdo en eso.
Todo lo que quedaba de la semana fue normal, los días se pasaron muy lentos hasta que llegó el viernes salimos de clases todos nos despedimos, y quedamos de acuerdo que saldríamos el lunes a las siete de la mañana Zac pasaría por todos nosotros.
Ya era domingo y tenía que arreglar mi maleta, ya estaba terminando cuando mi celular sonó que tenía un mensaje de la castaña.
ESTÁS LEYENDO
Ella
RomanceJamas había tenido una pareja, no sabía lo que era el amor y ni siquiera me interesaba averiguarlo... hasta que la conocí a ella. Portada hecha por: @Brigitte_idk. 🤍