Era sábado, estaba recostada en mi cama, pensando en aquella chica, sus ojos verdes y su dulce voz no abandonaba mi cabeza ni siquiera un segundo, hasta que entró una llamada a mi celular. Era Leo.
—Hola niña, ¿quieres salir a hacer algo?—me dijo en un tono agradable.
—Hola, tal vez, pero cuéntame cual es el plan y te digo si me interesa.
—No soy muy bueno para los planes, podríamos ir al super a comprar un poco de comida chatarra y ver películas en tu casa o ir al cine, lo que te parezca mejor.
—Me parece bien eso de comprar comida chatarra y venir a ver películas a mi casa, ¿en cuánto tiempo pasas por mi?
—Estoy en tu casa en diez, pero no quiero esperar media hora para que te arregles así que apurate—dijo riendo, haciéndome reír.
Leo era demasiado puntual, por lo que en el momento que colgamos empecé a cambiarme de ropa, no me gustaba arreglarme, no me consideraba alguien muy femenina, prefería un pantalón a un vestido y unos tenis a unos tacones, por lo que me puse una ropa cómoda para salir al super.
Estaba atando las agujetas de mis tenis cuando sonó el timbre, sabiendo que era mi amigo tome mis cosas y salí.
—Hola—tenía una sonrisa en su rostro y me dio un abrazo.
—Hola Leo—lo salude correspondiendo al abrazo y sonriendo.
—Vámonos, tenemos que llegar al super temprano para no encontrar mucha gente.
Era mediodía no entendía cómo no quería encontrar gente, pero en fin cosas de Leo.
Subimos a su auto y en el camino íbamos escuchando canciones de Harry Styles, a los dos nos encantaba, y nos sabíamos la mayoría de sus canciones.
—¿Qué quieres llevar para ver las películas en tu casa?—cuestionó cuando estábamos dentro del super.
—No sé, recorramos los pasillos y vemos que se nos antoja.
—Me parece perfecto.
Estábamos recorriendo los pasillos de Sabritas, cuando por ir jugando con Leo choque con una persona, haciendo que todo lo que traía en las manos se cayera.
—Disculpa, no te había visto—dije agachandome rápido para ayudar a recoger las cosas.
—No te preocupes, esas cosas suelen pasar—afirmó la persona agachándose conmigo para recoger las cosas.
En ese momento sentí una mirada intensa sobre mí, creí que era Leo pero él ya se había alejado a comprar las cosas que comeremos. Así que levanté la vista para ver a la persona que había chocado y vaya... Era ella.
—¡Hey, que gusto verte de nuevo!—dijo con una gran sonrisa y su voz se escuchaba muy emocionada, lo que me hizo sonreír involuntariamente.
—Lo mismo digo, desde el jueves que hablamos, no te veía—anuncie sonriendo mientras nos levantábamos, tenía sus cosas en mis manos para devolvérselas.
—Sí lo sé, falte ayer al instituto porque tenía fiebre y me dolía mi garganta—hizo una pequeña mueca, mientras tomaba las cosas que le estaba dando.
—Vaya, que feo, pero me imagino que ya estás mejor.
—Sí obvio, mi mamá me llevó al médico—y ya está todo bien-asentía la cabeza mientras sonreía.
—Eso es bueno, me alegra que estés mejor—dije de manera amable mientras la miraba a los ojos y sus mejillas tomaron un color rojo.
—Ya tengo todo para ver la película, ¿nos vamos?—llegó Leo con el carrito casi lleno de comida chatarra y se puso a un lado de mi.
—A sí claro...—me quedé unos segundos en silencio, hasta que recordé que ellos no se conocían—él es Leo el chico del que te hablé cuando estábamos en el baño.
La chica estiró su mano para saludarlo y Leo la siguió.
—Mucho gusto—dijo la ojiverde con amabilidad.
—Mucho gusto—repito Leo—¿cómo te llamas?
—Me llamo...—no pudo terminar la frase por que yo la interrumpí, me daba curiosidad saberlo, pero simplemente creí que sería más divertido si ninguna supiera nuestro nombre.
—Es la chica de ojos verdes—dije sonriéndole a mi amigo.
—Claro, ese no es mi nombre, pero dime así—se dirigió hasta Leo.
—A pues perfecto—él comenzó a reír—bueno entonces me adelanto para pagar si quieres—se dirigió hacia mí.
—Claro, gracias Leo—él asintió con una sonrisa y se fue dejándonos solas.
—¿Vienes sola?—Le pregunté llamando su atención de nuevo.
—No, vengo con mi mamá.
—¡Hija!—se escuchó que gritaban.
—Esa es la voz de mi mamá—aseguró riendo a lo que sonreí—me tengo que ir, me dio mucho gusto hablar contigo, bueno... quiero decir disfruto mucho hablar contigo... siempre—sus mejillas se pusieron rojo intenso.
—A mi también me gusta mucho hablar contigo siempre, nos vemos luego—ambas sonreímos y nos fuimos.
![](https://img.wattpad.com/cover/264165226-288-k65281.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Ella
Любовные романыJamas había tenido una pareja, no sabía lo que era el amor y ni siquiera me interesaba averiguarlo... hasta que la conocí a ella. Portada hecha por: @Brigitte_idk. 🤍