1. Daniela... o Samantha.

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Pov Daniela Calle/ Samantha Rogers.

El odio es un sentimiento muy profundo que puede inundar tu sentir, en mi caso cada fibra de mi ser está impregnado del odio más puro y oscuro que existe. Yo soy Daniela Calle y está es mi historia.

Tengo 23 años y aunque nací en Colombia, crecí entre viajes desde Nueva York hasta Roma pues mi padre era de padres Italianos, mi vida no es nada normal pues durante la noche soy Samantha Rogers una mujer llena de rencor que busca venganza por la muerte de su padre, mi misión era buscar a cada uno de los involucrados y matarlos a sangre fría y sin remordimiento puedo decir que he tomado la vida de 8 de 13 desgraciados culpables.

Soy hija de Germán Calle, un gran hombre que murió por confiar demasiado en la humanidad. Él era golfista en los Estados Unidos, mi padre ayudaba a miles de huérfanos y personas de la calle, pero un día hizo una donación a una asociación que hacía malversación de fondos, mi padre lo descubrió y puso la denuncia pero él no contó con que las personas que hacían esa atrocidad eran los mismo policías y algunos políticos, mi padre fue acusado por un fraude que no cometió lo sentenciaron a una condena que él no debía cumplir, solo para que él no hablara pero no les bastó, mi padre fue asesinado en su celda y su reputación quedó por el suelo ahí entro yo, el día que enterramos su cuerpo jure tomar venganza y así lo he cumplido, pero mi objetivo principal siempre a sido el fiscal, pues el fiscal era la cabeza de toda esa corrupción y mi objetivo final.
Nunca he matado a nadie mas que esos ochos policías, no encuentro satisfacción en matar a alguien inocente, mi corazón se llenó de una gran oscuridad el día que maté al primer hombre, sus recuerdos irrumpen mi cabeza todas las noches, la memoria de cada uno de los hombres que he asesinado, pero toda esa tortura se ve nublada por un momento de satisfacción, cuando suplican por sus vidas, todo su dolor, me recuerdan por que lo hago, porque los asesino...

Flashback.

Adrenalina incesante se mueve por cada vena de mi cuerpo, el primero de mis víctimas se haya en el suelo, Estamos en un callejón bajo la lluvia y la oscuridad de la fría noche.

-¡Habla imbécil! ¿¡Por qué lo mataron!?- grité con lágrima en mis ojos mientras lo apuntaba a la cabeza con mi pistola.

-¡Habla!- dispare a una de sus piernas, causando un grito de agonía de su parte.

-Yo... Y... yo no lo sé, ¡NO LO SÉ!- gritó al sentir otro disparo en su otra pierna, mi arma tenía silenciador por lo que no me preocupo por el estruendo.

-Ya no sirve de nada tenerte vivo- le dije cargando mi arma.

-¿Últimas palabras? - le dije apuntando lo

-No espe.. - No lo dejé terminar y le dispare en la cabeza, mi disparo fue a parar en el medio de sus ojos, ¡Ja! ¡Ahora tiene tres ojos!, Deje esa imagen perturbadora y me fui a mi casa a bañarme para tratar de dormir un poco...

Fin del Flashback.

Esa noche dormí como una bebé pero las semanas siguientes eran tortuosa todo los días me torturaba pensando en la familia de ese hombre y cuando decidí un día ir a visitar la casa del policía me encontré a una mujer con dos niños y me sentí el ser más mierda del mundo, estaba haciendo lo mismo que me hicieron a mi quitándole su padre a esos niños pero ese hombre cometió un muy grave error él con todos sus cómplices cuando arrestaron a mi padre lo golpearon delante de mi hasta dejarlo inconsciente y por eso hago lo que hago.

No estoy sola en este camino después de haber matado a ese hombre mi hermana y mis amigos notaron algo raro en mi, era más cerrada de lo normal, fría, no era la misma mujer alegre que sonreía por todo a pesar de haber perdido a su padre, mi mamá notó mi cambio la misma noche que llegue de haber matado a ese tipo y con el pasar de los meses se acostumbraron a mi nueva personalidad, pero mis amigos me empezaron a seguir para saber que hacía, yo lo sabía, hasta que decidí decirles la verdad, no lo tomaron muy bien pero decidieron que me apoyarían insistieron que desistiera de esa estupidez que estaba cometiendo, pero ya mi decisión ya estaba tomada.

Juliana, mi hermana mayor y mis amigos, me ayudan en la investigación de los cerdos asquerosos, cuantos hijos tienen, esposa, todo, por insistencia de Juli a sus familiares se les da una gran suma de dinero pues mi venganza era contra esos desgraciados no con su familias y no me apetece ver a nadie pasar trabajo por esos imbéciles, Juan Pablo, Amalia, Marianela y Juan son esos amigos leales, ellos más que amigos son mis hermanos, los conozco desde pequeña papá los quería como a sus hijos, Juan Pablo es mexicano pero vivió por muchos años en Bogotá al igual que Amalia que era de Cali, en Bogotá conoció a la mujer de su vida con la cual se casó, Marianela o Nela quien es Venezolana, ella y Amalia son una muy bonita pareja, son la parte más sensata del grupo, y está Juan Pablo quien es más gay que la palabra es toda una diva, el también es Colombiano pero ahora como yo, todos vivimos en Florencia desde hace 2 meses mientras esperamos que se calmen un poco las aguas en Colombia.

La Policía del departamento de los Angeles está muy alborotada y junto a otros organismos están investigando la muerte de ciertos funcionarios, por suerte hemos sido muy cautelosos y todavía no saben nuestros rostros, sólo el mío pero mi imagen se ve muy borrosa por lo que lo único que saben es que mido 1, 70 y que soy castaña, que ¿Cómo se eso?, Amalia se lleva muy bien con las computadoras y los sistemas operativos por lo que es algo parecido a una hacker y aunque costo un poco hacerlo sin que nos rastrearan ella entro al sistema del Departamento de Policía de los Angeles y accedió a sus archivos para estar al tanto de todo sus avances

Sí, somos unos putos amos.









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