Labios Compartidos

9. Regreso a Colombia.

Pov Calle/Sam.

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Tres mese después.

Desde que tengo conciencia mi mamá y mi papá siempre me dijeron que en la vida hay veces que estas arriba y otras abajo, que así como hay días buenos también están los malos, Tres malditos meses han pasado desde que no la veo y cada día mi necesidad por ella crece cada vez más, se fue de Italia esa misma noche luego de haber recibido una llamada de emergencia de sus papá, solicitando su regreso esa misma noche.

Flashback.

—¡ESTO ESTA QUE QUEMA!— y por su puesto que ese era el grito de Juan, hace horas que habíamos llegado a el club y nos encontrábamos bailando en la pista Call Out My Name de The Weeknd, cuerpos en la pista se movían al ritmo lento de la canción, el cuerpo de mi acompañante marcaba un ritmo lento y tortuoso, mis manos en su cintura acercándola un poco más a mi, sí eso era posible, María José Garzón tenía conciencia del desastre que estaba provocando en mi con su trasero rozando con mi pelvis, su mano derecha sostenía mi corbata, y la otra estaba sobre mi mano izquierda, ella se dio la vuelta y cruzó sus brazos alrededor de mi cuello y me tomo en un beso sensual, una de sus manos dejaba pequeñas caricias en mi nuca mientras su lengua se juntaba con la mía, sonrió cuando mordí su labio y tiré un poco de el cuando me aleje para tomar aire.

—Vamos afuera— afirmó

No me dio tiempo de responder cuando ya me estaba arrastrando a través del mar de gente hasta la salida del lugar, cuando llegamos a fuera nos dirigimos a una esquina oscura y sentí mi espalda chocar con una de las paredes del lugar, y sus labios posarse ferozmente en los míos, un beso que me quito el aliento.

—¡Dios siento que no voy aguantar más— metió una de mis manos en su pantalón y las bajo hasta su intimidad y sentí su humedad — te necesito, y YA— al terminar de decir esto me volvió a besar y yo empecé a desabotonar su pantalón y acomodar mi mano, mientras besaba su cuello cambie nuestras posiciones y ahora era ella quien quedaba acorralada a la pared acariciaba su zona íntimas encima de su ropa interior y sentía como se mojaba cada vez más hasta que...

— ¡Mierda!— susurró — es mi papá— su teléfono estaba sonando y como ella dijo era su papá, saque mi mano de su pantalón ella se a cómodo un poco y contesto, me aleje de ella y me adentre al lugar para darle un poco de privacidad, cuando entre todos estaban jugando verdad o reto.

— Sam ven vamos a jugar— habló Paula que era la que menos borracha estaba.

— Ok — me senté y agarre uni de los vasos con licor

— ¿Y Poché?— pregunto Amalia

— Esta hablando por teléfono con su papá— contesté y proseguimos a jugar

(...)

—¿Verdad o Reto? Sam— pregunto Pau, ya Poché había hablado con su papá pero llegó muy pensativa y a cada segundo miraba la hora en su celular.

—Verdad —

— ¿Poché coge rico?— todos se ahogaron y empezaron a toser y yo, pues... estaba como un tomate y ni que decir de Poché, pero como ya todos estábamos ebrios, yo no me iba cohibir así que...

— Como una puta diosa— dije y todos levantaron su copas y empezaron a gritar y molestarnos, la mire y ella tenía una sonrisa de oreja a oreja, pero su mirada reflejaba algo que aún yo no conocía.

El juego pasó y como consecuencia terminamos el doble de borracho, estaba en la pista bailando con Juanpa ya habíamos hablado y el acepto que no iba a tirar nuestra amistad por una mujer, me molesto un poco como lo dijo, pero no preste tanta atención, al fin y al cabo estábamos muy borrachos.