Labios Compartidos

11. Ya casi termina.

Pov Calle/Sam

—¡Welcome to Colombia!— y esa fue Amalia, Ya han pasado cinco meses desde que los chicos se vinieron a Bogotá, Ella al igual que los demas estaban emocionados de regresar a su país, pasamos hasta la cinta para retirar nuestro equipaje, para la llegada a nuestro país tuvo que ser con nuestros nombre originales sólo que según todos Daniela Calle y sus amigos estaban en Los Ángeles por que de Italia a los Ángeles entramos con nuestros nombres falsos y Salimos con nuestros nombres reales.

Llegamos a Bogotá a las siete de la mañana, tenía esperanza de poder encontrar a Poché, pero el hecho de mi identidad era un problema ya que las autoridades Italianas comenzaron con la investigación de los asesinatos de funcionarios Colombianos en ese país.

Entramos a una de las Camionetas de mi familia y íbamos rumbo a La Mansión Calle, y luego los chicos irían a su casa.

Llegamos a el Gran portón con esas imponente letras en dorado formando una CyS en el centro de este, era chistoso la historia de esas letras.

Mamá quería algo ostentoso en la puerta de su hogar que demostrara lo imponente de la familia Calle, pero que tambien resalte la humildad de la familia, es por eso que luego de pasar el portón el camino hasta la casa era rodeado por pinos y una hilera de rosas rojas y blancas, las cuales se convirtieron en tradición que cada miembro de la sembrara una cada comienzo de el año.

Papá se negó a que sólo hubiera una C en la entrada, ya que nosotros éramos la familia Calle Soto, por lo que como regalo de aniversario papá le dio la sorpresa a mamá, una CyS entrelazadas y de ellas salían rosas pequeñas todo hecho en oro, si algo ostentoso pero ese era su forma de demostrar el amor que le tenía a su esposa futura madre de sus hijos.

Llegamos a el frente de la casa y mi mamá y Juliana nos esperaban afuera, cuando salí, por suerte tuve tiempo de reaccionar, cuando Juli salió corriendo y se guindo como un Koala.

— Daniiii — gritó y yo solo reía de lo emocionada que estaba ella, se bajo y mamá procedió a abrazarme entre lágrimas.

— Chisquis estás otra vez en casa — duramos unos minutos más abrazadas y luego nos soltamos para que pudiera darle la bienvenida a los demás, los chicos recogieron sus autos que estaban en el garaje de la mansión y luego se fueron a sus casa yo entre y ahí estaba Henry, el mayordomo de la casa, desde que yo estaba pequeña el estaba en la casa, me la pasaba haciendo le travesuras, y en sus tiempos libre el me leía cuentos, me aconsejo en mi adolescencia, fue el primero que supo de mi orientación sexual y quien me aconsejo para que lo hablará con mis padres sin miedo a él rechazo, era como un segundo padre para mi.

— Señorita Daniela bienvenida a casa — me dijo Henry mientras lo abrazaba.

— Henry te he dicho que conmigo no van las formalidades — le dije regalandole una sonrisa.

— Hay algunas cosas que no cambian — reímos y luego tomo mi equipaje y lo subió a mi habitación mientras yo iba a la sala con mamá y Juli

— Chiquis cuéntanos como les fue — pregunto mamá.

— Bien, sólo que no resultó como esperábamos — No quise revelar más entre menos supieran mejor.

— Dani ¿conocistes a alguien en Italia? — preguntó Juli, la imagen de Poché vino a mi mente esa chica de cabello mitad azulado no salía de mi mente.

— Tu cara ya me dio la respuesta, cuenta ¿como es? — Juliana me miraba pícara y mi mamá con ternura.

— No conocí a nadie, más bien díganme ustedes que hicieron en mi ausencia — pregunté sonriendo, luego de eso charlamos de lo que hicimos cada una tenía ya tiempo de que no veía a mi familia, Juliana me contó que ya tiene novio y mamá que abrió otra tienda de ropa con la línea
MAFE SOTO. Ya con esas eran cuatro, su línea ya era una de las mejores, cayó la noche y juntas las tres hicimos la cena, cenamos y cada quien se fue a su habitación, yo salí al balcón de la mía y hice una video llamada con los chicos, incluyendo a Sebas, Mario, Juana y Paula, con quienes habíamos mantenido en contacto pero ellos tampoco sabían nada de Poché ya que ellos se encontraban en los Ángeles.

Video llamada.

Sebas y Mario: ¡Hoolaaa!

Paula: ¡Hola mis amores!

Juana: ¡Que onda!

Amalia y Nela : ¡Hola a todos!

Zurita: ¡Que tal!

Jaramillo: ¡Holiwi!

Yo: ¡Holis!

Juana: Chicos les tenemos una noticia.

Amalia y Nela: Nosotros también.

Sebas y Mario: a la cuenta de tres todos sueltan la sopa.

Jaramillo: pero así no nos van a entender.

Paula: Bueno lo primero que se entienda va primero luego el resto, que cuente Rogers.

Yo: ok, ok, a la cuenta de 1...2...3

Todos: ¡ESTAMOS EN BOGOTÁ!

Todos: Jajaja jajajaja.

Juana: Marica ¿que es esto? Jajaja

Jaramillo: Juanis era la misma noticia todos estamos en Bogotá.

Zurita: Se armó la buena parce.

Sebas y Mario: así se habla pa' cuando la reunión.

Yo: ¿Ustedes cuando llegaron?

Juana: Sebas y Paula ayer y Mario y yo hoy en la tarde, ¿y ustedes? -

Zurita: hoy en la mañana

Paula : No lo puedo creer que locura.

Seguimos hablando hasta que la media noche que planeamos vemos el fin de semana de esta semana sólo faltaba un día.

Me acosté en mi cama y me quedé pensando mirando el techo de mi habitación, pronto todo esto acabaría, sólo tendría que acabar con el maldito fiscal y podría tener una vida medianamente normal, ya casi termina está locura.

Ya casi termina.

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