-Harry abájame!.-Pedía entre risas. Cuando nuestros ojos hicieron contacto, mi risa cedió y me perdí en esas esmeraldas. Los recuerdos de todo lo que ha pasado entre nosotros aparecieron en mi mente y un sentimiento cálido y alegre creció en mi pecho. Me había dado cuenta de algo importante, estaba completa y locamente enamorada de Harry. Una sonrisa tímida apareció en mis labios antes de acercarme lentamente a el y unir nuestros labios en un beso. Este beso era lento, tierno y lleno de sentimientos, sentimientos de verdad no con deseo. Las manos de Harry agarraban mis piernas y cadera con fuerza. Cuando mis pulmones pidieron aire, entonces, me aleje de Harry. Su nariz acaricio la mía y viajo a mi mejilla donde luego sus labios dejaron un dulce beso.
-Mira.-Dije en un susurro viendo más allá de nosotros, Harry giro para ver el también un pequeño muelle con una cabaña abierta. Parecía abandonada.
-Vamos a ver.-Dijo y conmigo aun en sus brazos, camino hasta el lugar. Caminamos por lo largo del muelle hasta quedar debajo del techo de paja, las paredes de los lados eran de madera y tenían la forma de unas ventanas y eso era todo lo que cubría el lugar. Sentí a Harry acercarse a mi por la espalda, sus manos grandes y fuertes viajaron hasta mi estomago y sus labios comenzaron a dejar húmedos besos en mi cuello.
-Hazza…-Susurre apoyando mi manos sobre las de el. Lentamente sus manos bajaron hasta el dobladillo de mi vestido, levantándolo unos centímetros. Mis manos acariciaban su brazo con lentitud. Deje salir un gemido cuando sus manos comenzaron a jugar con el elástico de mis bragas, acariciando con su pulgar mi zona sensible. Harry mordía y succionaba mi cuello haciendo que jadeara de placer. Podía sentir su erección, bajo sus pantalones, chocar contra mi trasero. Cuando las manos de Harry salieron de mis bragas, me di la vuelta y enganche mis brazos en su cuello y lleve mis labios a su oído, donde jugué con su lóbulo, mordiéndolo y besándolo a mi gusto. Las manos de Harry estaban en mi trasero estrujándolo y masajeándolo.
-Te necesito.-Mi aliento choco contra su oído y un sonido grave salió de su garganta, casi como un gruñido pero aun más excitante. Las manos de Harry viajaron hasta el cierre de mi vestido bajándolo rápidamente. Sus manos bajaron los tirantes de mi vestido blanco y lo ayude a bajarlo. Patee la suave tela lejos de mis pies, no llevaba brazier lo que facilito la tarea de Harry, sus manos masajeaban mis pechos mientras que mis manos acariciaban su abdomen definido, no quería esperar más tiempo, lo necesitaba, necesitaba que me haga suya de una vez. En menos tiempo de lo que esperaba ambos estábamos desnudos. Harry me pego contra la pared mientras me besaba apasionadamente, mi cuerpo entero estaba en llamas, mi corazón corría de manera descomunal y mis manos recorrían todo el cuerpo de Harry.
-Déjame hacerte mía.-Susurro Harry sobre mis labios.
-Esta y todas las noches que quieras bebe.-Le respondí antes de volver a besarlo. Harry me tomo en sus brazos y me recostó en el suelo de madera. Sus manos bajaron a mis piernas y las abrieron rápidamente, su mano acaricio mi entrepierna y un gemido salió de sus labios.
-Estas tan húmeda.-Decía con su voz ronca. Mordí mi labio inferior y lo atraje más a mi, besando sus labios que ya estaban rojos e hinchados. Sentí como la punta de su miembro rozaba mi entrada, estaba lista para que entrara a mi, maldita sea lo necesitaba! Cerré mis ojos esperando la unión de nuestros cuerpos pero nunca llego. Al abrirlos Harry miraba molesto el suelo.
-Que tienes?.-Le pregunte con desesperación.
-No tengo condones.-Respondió entre dientes. Mierda, mierda, mierda y más mierda!
-No importa.-Dije sin pensar. Harry me miro asustado.
- ___ no puedo, no.
-Prometo que nada sucederá. Confía en mi.-Harry asintió con la cabeza y me beso, lentamente comenzó a entrar en mi. Nunca había estado con alguien sin protección y déjenme decirles que se siente como si estuvieras en el paraíso, sentir su piel contra la mía es lo mejor que he sentido en mi corta vida. El rose de su estomago con el mío creaba una corriente de placer increíble, su aliento contra mi cuello y mis manos apretando su espalda me excitaban aun más. Lo único que se lograba escuchar eran nuestros gemidos y jadeos por sobre el sonido que producían nuestros cuerpos luego de cada embestida que Harry me daba.
Sentía como mis paredes internas se comenzaban a contraer, estallaría en un orgasmo en cualquier momento.
-Vente conmigo.-Harry llevo una mano a mi cadera y apretándola comenzó a moverse aun más rápido que antes. Gritos de placer abandonaban mi garganta, mis ojos estaban cerrados por el placer.
-Oh si! Harry!.-Grite cuando llegue al orgasmo. Harry llego al mismo tiempo que yo, el ritmo de sus caderas disminuyo mas no se detuvo.
- ___...-Me llamo con suavidad. Abrí mis ojos para encontrarme con los suyos.
-Eso fue lo mejor de mi vida.-Dije y acaricie su mejilla y el sonrió. Sus ojos escaneaban todo mi rostro, sus manos acariciaban cada punta y línea de contorno.-Que tanto me vez?.-Le pregunte enternecida por su actitud.
-Me di cuenta de algo.-Susurro mirándome.
-Que cosa?
-Me enamore de ti
Siiiiii al fin harry lo confeso, pero no todo es color de rosa y esto me huele a que viene algo malo u_U