𝗦𝗪𝗘𝗘𝗧 𝗕𝗨𝗧 𝗣𝗦𝗬𝗖𝗛𝗢 ↻ 𝗽𝗷𝗼

「𝗦𝗜𝗡𝗢𝗣𝗦𝗜𝗦」

Martha.

Desperte por el hermoso sonido de las aves cantando en mi ventana, con el hermoso reflejo del sol dando en mi rostro haciendo que me despertara feliz y con ganas de darlo todo este dia.

Mentira.

Me desperte porque mi perro empezó a ladrar a todo volumen y mi celular no dejaba de vibrar.

— Mierda... — dije tallandome los ojos parandome de la cama.

Me bañe, me vestí y bajé a la cocina.

— Má, que hay de desayuno — pregunte mientras me arreglaba la camisa del uniforme.

— Tostadas con mantequilla y tu taza de café, hija — me contesto mientras colocaba lo indicado enfrente de mi .

— Rico, rico — justo cuando iba a meterme una tostada, papá viene, se la agarra y se la come.

— ¡Era mi tostada! — finji estar molesta.

— Hay perdon señorita tostada, te compró un sándwich en el camino.

Los dos soltamos risas , mientras mamá rodaba los ojos divertida.

— No, no. Yo voy caminando. — le dije a papá mientras me levantaba de la silla, terminando mi café.

— Hija, deja que tu papá te lleve. Vas a llegar tarde — dijo mi madre dándome esa mirada de "Asme casó, carajo"

Pero como la rebelde que soy, no le hice caso e ignore su mirada.

— Nah — movi despreocupadamente la mano y me colgaba la mochila en el hombro — El señor portero me debe favores, me va a dejar pasar.

— Bueno Martha, te pierdes unos sandwiches que ufffff, estaran riquísimos.

Blanquee los ojos y le dí un beso en la mejilla

— Bueno madre, ya me voy — le dí un beso en la mejilla y ella me acaricio el cabello con una mirada preocupada.

— Cuídate mi hadita y llega temprano que tenemos que ver el vestido para la boda de la Tía Fabiana.— me dijo antes de que me valla.

— Bien... Adios pá. — me despedi mientras le sacaba el seguro a la puerta.

— ¡Adios cachorra! — me gritó desde la cocina.

Eran las 7:50, el timbre suena a las 8:00, igual llegaré tarde, pero el maravilloso portero me abrirá igual las puertas

Soy una rebelde sin causa?, ni modo.

Me faltaban menos de cuatro cuadras y  el semáforo estaba en rojo. Todo tranquilo hasta que veo a un niño pasar corriendo sin ver el semáforo, un carro andaba viniendo y ...

Bueno no han sentido a veces que el tiempo pasa en cámara lenta y ves toda tu vida pasar frente a tus ojos.

Bueno eso fue lo que sentí, agarré al mocoso y lo empuje. Sentí que un líquido se deslizaba por mi cien y en mi campo de visión aparecian manchas negras.

— ¡Por Dios llamen a una ambulancia! — gritó una señora.

— Niña, resiste — me dijo una ¿adolecente?, mientras me quitaba mi celular para llamar a mis padres creo — Vamos resiste. Tus padres ya vienen en camino.

Eso fue lo ultimo que escuche antes de que todo se ponga negro. Al final fui una chica rebelde que llego tarde a clase y que no va a ir a la cuarta boda de su tía.