𝐏𝐑𝐈𝐌𝐄𝐑 𝐋𝐈𝐁𝐑𝐎 𝐃𝐄 𝐋𝐀 𝐒𝐀𝐆𝐀 "𝐃𝐄𝐒𝐓𝐈𝐍𝐘"
❝ 𝑵𝒐𝒕𝒉𝒊𝒏𝒈 𝒊𝒔 𝒇𝒐𝒓𝒆𝒗𝒆𝒓 ❞
En donde Martha, una chica mexicana, fan de percy Jackson; muere y reencarna en su saga preferida como 𝗣𝗘𝗥𝗦𝗘𝗣𝗛𝗢𝗡𝗘 𝗝𝗔𝗖𝗞𝗦𝗢𝗡
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Estábamos cruzando el río Potomac cuando divisamos un helicóptero. Un modelo militar negro y reluciente como el que habíamos visto en Westover Hall. Venía directo hacia nosotros.
─ Identificaron la furgoneta. - advertí - Yo dije que nos tenia que ir en otro carro, pero claro. No le hagan caso a Percy. - hablé con un déje de sarcastico.
Zoë viró bruscamente y se metió en el carril de la izquierda. El helicóptero nos ganaba terreno.
─ Quizá los militares lo derriben. - dijo Grover, esperanzado.
─ Los militares deben creer que es uno de los suyos. - continué - Y hablando de militares, ellos son unos estúpidos, literal se creen cualquier cosa, asi que no me sorprende que el General los haya podido controlar.
─ ¿No comprenden para quién están trabajando?. - preguntó Thalia - .¿No ven a los monstruos que los rodean?
Zoë meneó la cabeza.
─ No sé hasta qué punto ven a través de la Niebla. Pero dudo que les importase mucho si supieran la verdad. A veces los mortales pueden ser más horribles que los monstruos.
Sabias palabras.
El helicóptero seguía aproximándose.
Thalia cerró los ojos y se puso a rezar.
─ Eh, papá. Un rayo nos iría de perlas ahora mismo. Por favor.
Pero el cielo permaneció gris y cubierto de nubes cargadas de aguanieve. Ni un solo indicio de una buena tormenta.
Maldito seas Zeus.
─ ¡Allí!. - señaló Bianca - .¡En ese aparcamiento!
─ Quedaremos acorralados. - advirtió Zoë.
─ Confia en mí. - respondió Di Angelo.
Zoë cruzó dos carriles y se metió en el aparcamiento de un centro comercial en la orilla sur del río. Salimos de la furgoneta y bajamos unas escaleras, siguiendo a Bianca.
─ Es una boca del metro. - informó - .Vayamos al sur. A Alexandria.
─ Cualquier dirección es buena. - asintió Grace.
Compramos los billetes y cruzamos los torniquetes, mirando hacia atrás por si nos seguían. Unos minutos más tarde, estábamos a bordo de un tren que se dirigía al sur, lejos de la capital. Cuando salió al exterior, vimos al helicóptero volando en círculo sobre el aparcamiento. No nos seguían.