Saltos en el tiempo

621 56 8
                                    

Rebeca.

Habían pasado los meses y ya me había graduado, fue fácil ponerse al día y graduarme a la par de mis compañeros, Maxx me pagó una carrera universitaria y entré en la universidad de Washington en Seattle, quedaba algo lejos pero tuve que irme, Maxx iba a visitarme lo más que se podía al igual que yo a él, había entrado por mis propios méritos, no porque Maxx movió sus contactos como lo había hecho con Yale en Connecticut.
Había entrado con Ange y ambas compartíamos habitación allí, no podía pedir más.
En las vacaciones pasaba algunos días con mi familia y otros con Maxx, él realmente no le importaba la distancia, decía que de todas formas me amaba y que la distancia no sería un obstáculo para nosotros y así fue, lo demostró como justo me lo había dicho.

Había cumplido los veinte y Maxx veintisiete, ya tenía un año estudiando finanzas y contabilidad.
Me faltaban unos meses para graduarme y trabajar con Maxx en su empresa.
En los meses que estaba en la universidad Maxx se quedaba solo en casa, realmente no me preocupaba, estaba segura que me amaba y que no me traicionaría pero me daba mala espina que algunas veces en algunas de las conversaciones que teníamos al día me contara solo por ser un tema de conversación el hecho de que Emma se pasara por el departamento.
Así aunque fuera "Trabajo" No me gustaba y no le reclamaba pero me molestaba.

En el tiempo lejos de Maxx no sucedían cosas raras como lo que sucedió con Lili pero sí cuando estaba con él.
Una noche estábamos bailando en la sala, me enseñaba a bailar y llegó la policía tranquilamente al departamento, traían la orden para arrestar a Maxx por la denuncia que Caroline, mi maldita madre legalmente había puesto hace años.
No se lo llevaron porque llamó a uno de sus colegas en la policía y se fueron, hablé con Mery sobre lo sucedido y he hizo algo por su propia cuenta, como hacerme legalmente su hija biológica con una prueba de ADN y demás pruebas que ella tenía, retiró la denuncia que Caroline había hecho explicando que ella era mi verdadera madre y que estaba de acuerdo con mi relación y que ya tenía veinte años así que no podían hacerle nada a Maxx.

De vez en cuando llegaban paquetes raros, Maxx le ordenó a Miguel que todos los paquetes y cajas que llegaran en el correo las abrieran abajo y muy lejos de mí, no llegaba ninguno en el que indicaran que me harían daño pero si llegaban advertencias tontas como las primeras, aprendí a ignorarlas hasta que comenzó lo feo.
Me faltaba unos meses para graduarme y estaba de vacaciones así que emprendí un viaje desde Washington hasta mi hogar, pasé dos días con mi familia y me fui en mi auto hasta el departamento de Maxx ya que sí, Maxx me había comprado un auto para estos largos viajes.

Llegué al departamento de tarde, Maxx no había llegado pero le había avisado de que yo lo había hecho, me di una ducha y reservé en un restaurante para que saliéramos, Maxx llegó y al prepararse bajamos pero cuando llegamos al estacionamiento mi auto estaba destruido, le habían roto los vidrios, hecho grafitis, tirado pintura, muchas cosas.
No había seguridad ese día, solo estaba Miguel, Maxx me subió a la camioneta y Miguel nos llevó a un hotel por nuestra seguridad, estando allí y al relajarme me quedé viendo la televisión cuando Maxx llegó con la comida y con buenas noticias.
—Ya resolví todo, las cámaras dejaron de funcionar y no tenemos culpables pero lo mejor será comprar otro departamento —Dice él mientras deja la bandeja con comida sobre la cama.

Yo estaba sentada en la cama sosteniendo mis piernas con mis brazos aprisionadas en mi pecho, realmente lo había escuchado pero mi mirada estaba puesta en el documental de asesinatos que estaba viendo en la tv.
—Rebeca... ¿Me escuchaste? —Pregunta.
—El que nos vayamos del departamento no significa que va a parar —Le digo y desvió mi mirada para verlo— Has notado que cuando estoy en la universidad esa persona nos deja en paz, cuando vengo aquí sucede todo. Sabes que es cierto.
Él se queda en silencio pensativo, tal vez no quería admitirlo para que no me sintiera mal o culpable pero él no podía decir nada para que me sintiera así ya que de por sí me sentía así desde la muerte de Lili.

—Puede que tengas razón pero eso no evitará que nos separemos Rebeca —Aclara él totalmente convencido de sus palabras.
Decidí no dar continuación a esta conversación y empecé a comer, estaba hambrienta.

Maxx compró un nuevo auto para mí junto con otro departamento que lo puso a mi nombre, era más cerca de mi familia así que podía irlos a ver hasta caminando, me gustaba eso.
Las cosas raras pararon por un tiempo, al menos en el tiempo que estaba en casa, cuando me tocó volver a la universidad todo estaba bien, empezó a llover y ya era de noche, tenía que llegar a la universidad antes de las siete de la mañana así que no me preocupé, no me importaba pasar una noche en el auto.
Las yantas se resbalaban en el camino y tuve miedo a tener un accidente así que me estacioné, Maxx me llamó para saber cómo iba mi viaje y al responder pues se preocupó.

—¿Te paraste en medio del camino? —Dice él sorprendido.
—Prácticamente, estoy en la carretera que está al lado del bosque cerca de la universidad —Le informo.
—Ya mando a Miguel para que te recoja —Me informa.
—¡No! No molestes a Miguel, está lloviendo bastante fuerte, ya ahorita enciendo el auto e intento llegar, tranquilo —Le aseguro.
Él se queda en silencio unos instantes, tal vez esté pensándolo.
—Está bien pero estaré llamándote a casa rato y si no respondes al menos una de mis llamadas enviaré a Miguel —Dice.
—Está bien —Me río un poco— Te amo.
—Yo también te amo y cuídate, dentro de diez minuto de llamo.
—¡Exagerado! —Grito bromeando para luego colgar.

Busqué en mi bolso y vi unas barras de chocolates, me comí unas cuantas y esperé un poco, hablé con Ange por texto y dijo que mañana no tendría clases importantes y por eso se quedaría un día más con mamá y papá.
Cuando pasaron unos instantes decidí volver a encender el auto pero éste no hizo nada, volví a girar la llave y a pisar el acelerador pero nada, solo hizo sonidos raros pero no encendió.
Maldije entre dientes y salí del auto con una linterna que había en la guantera.
Miré el motor del auto, no había nada raro o al menos para mí, no entiendo nada de esto realmente.
Quise tocar algo pero soltó un chispazo y me asusté, me retiré del auto y me preguntaba qué hacer.

Fui al auto para tomar mi celular y llamar a Maxx pero vi las luces de un auto así que solo le hice señas agitando mis brazos en el aire para que se detuviera, pensaba en que fuera alguien que supiera sobre estoy me ayudara.
El auto se detuvo y agradecí silencio, se estacionó frente a mi auto y cuando la persona se bajó del auto le agradecí primero, era un hombre de al menos unos treinta años pero lucía bien, más o menos como Maxx pero se le notaba que era un poco mayor que él, fue amable, me sonrío al verme y me pidió explicación de lo que sucedía.

—Pues realmente no lo sé —Digo algo atontada y penosa— Solo lo apagué por la tormenta y cuando quise encenderlo no quiso encender.
Él cabeceó un poco pensando lo que le había dicho, hasta me dio risa en la forma tan rara y divertida que lo hacía.
—Déjeme reviso —Dice amablemente acercándose al auto.
Mi celular empezó a sonar, me acerqué al auto y abrí la puerta, vi el nombre de Maxx en la pantalla y respondí de inmediato, me alejé un poco dándole la espalda al auto para poder hablar, al menos había dejado de llover un poco pero seguía lloviendo.
—¿Hola? —Dije al responder— Amor me quedé varada —Le explico.
—¿Qué? —Dice él— ¿Te quedaste varada? Ya le voy a decir a Miguel que vaya a buscarte.
—No amor, llegó alguien y...

Pero no pude terminar la frase debido al golpe que recibí en mi nuca, el golpe fue fuerte y caí al suelo, escuchaba a Maxx al teléfono gritando mi nombre, volteé y vi al hombre que se había parado a ayudarme con una cara maliciosa y todo se volvió oscuro cuando él me volvió a golpear en la cara para noquearme...

--------------------------------------------------------------------------------------
¡¿Cómo están mis queridos lectores?! 

Había dicho que actualizaría luego y aquí está.
Espero les haya gustado.

Cómo sé que tiene un final muy WTFO pues mañana actualizo sin falta para que no se maten la cabeza.

Los amo! Bye! 

DaddyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora