Lo primero que hice al llegar al departamento de Jerry fue tirarme en el frio piso a no hacer nada, y por alguna razón extraña, mi mente se comenzó a tonar en blanco, y sentí un poco de paz, una extraña paz que no había sentido desde hace mucho tiempo, así que no lo pende de más y solo me quedé tirado en el frio piso viendo a la nada. Sin embargo, de la nada, comencé a sentir un vacío tan grande quería morí, no le encontraba sentido a mi vida, sentía como si mi vida hubiera sido seleccionada para mí y yo solo seguía el camino que ellos me habían mostrado, de la nada, dejé de sentirme como una persona y solo me sentían como bulto sin propósito tirado en el suelo de un departamento que ni siquiera era mío. Todo se tornaba turbio.
Poco a poco comencé a sentirme ahogado, comencé a sentirme caliente, como si mi cuerpo estuviera en llamas, y mi cabeza cada vez se llenaba de pensamientos absurdos y perturbadores, hasta llegar al punto en el que ya no me sentía yo, simplemente me sentía como un alma en desgracia que lo único que becaba era llega a la luz, por mi mente no pasaba absolutamente nada positivo solo pensaba en que me encontraba en un punto de mi vida en el que gracias a mi madre me había dado cuenta que toda la vida que había vivió había sido bajo los estándares de una persona que realmente odiaba con todo mi corazón, y en ese momento comencé a odiar tanto a mi papás por haberlo permitió, porque se supone que los padres están para protegerte y ayudarte a descubrirte, no era para nada extraño para mí que a mi 19 años no supiera quien demonios era y mucho menos que era lo que me estaba pasando; sabía que no era nada bueno, sin embargo en ese momento no podía pensar más que en el odio que sentía por todas las personas que había a mi alrededor. En ese momento pensaba que todos eran unos malitos que solo me habían estado manejando para sr lo que se supone debería ser, un titare más de mi abuelo.
En ese momento mi celular comenzó a sonar como loco, y cuando me acerque a ver quién era la persona que me estaba llamando en la pantalla del celular vi el nombre de mi madre, sentí tanto coraje por lo cobarde que había sido esa mujer por tantos años que solo tome el teléfono y lo estrelle contra la pared habiéndolo añicos. Comencé a pensar también en mi padre, y en la manera en que nos había abandonado para ir a cumplir su estúpido sueño, sabiendo de antemano con quienes me dejaba y que era lo que deparaba para mi vida. A pesar de ser considerado como un adulto en ese momento me sentía como un niño indefenso al cual solo lastimaban por diversión; aborrecía a mis padres por haberme alejado de ellos solo porque para ellos era más sencillo no tender que liderar con mi extraña soledad, extraña soledad que ellos mismos habían creado; de la nada comenzaron a llegar a mi recuerdos de soledad, desde que era un pequeño, confinado a esa enorme finca, que para muchos era un lujo y me debería de sentir afortunado de haber podido vivir la experiencia que me tocó vivir, pero esas personas, pero sin duda di me hubieran dado a elegir una familia, me hubiera alejado lo más posible de ellos; de ellos y su mundo de fantasía, en donde fueron tocados por Dios y todos debían de venerarlos por haber nacido en cuna de oro.
A pesar de que mi madre me había explicado como mi padre me había "protegido de mi abuelo" lo único que podía pensar en esos momentos era que mi padre era un cobrare por no haber hecho más para alejar a ese vil anciano de nuestras vidas. Y cuando llego el momento de pensar en el estúpido de mi abuelo lo único que quería era asesinarlo por lo déspota, machista, clasista y asquerosa persona que era. Comencé a hiperventilar de una manera muy intensa, y en ese momento lo único que pasaba por mi cabeza es que necesitaba un trago de alcohol, para que me ayudara a sobrepasar el malito coraje que sentía y que me aliviara el fuego que sentía dentro de mi interior. Me puse a buscar como loco la reserva de alcohol de Jerry y después de unos momentos lo encontré; sin pensarlo abrí una botella que ni supe de que era y le di un largo sorbo que me hizo quemarme hasta las entrañas, pero no me importo porque seguí tomándola hasta el punto queme termine la botella, y por un momento no me importo estar e un lugar ajeno porque tome la botella y la revente contra la pared esparciendo cientos de pedazos de video por el suelo; abrí una botella nueva y seguí tomando, odiando mi existencia.
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Piérdete En Mí
RomansaTodo el tiempo pensé que a quien querías, necesitabas y tenías que salvar era a él, pero ese día tu mirada me dijo lo contrario, y aunque no lo quería escuchar, te armaste de valor y lo dijiste: "te quiero salvar a ti" y me quede helado. Te miraba d...