𝑑𝑒𝑠𝑡𝑟𝑢𝑦𝑒𝑛𝑑𝑜𝑚𝑒. [TERMINADO]

20

ARIA

Estoy en una cafetería con Jayden, había conseguido sacar un hueco en el que no estuviese tirándome de los pelos por los estudios, no tenía pensado hablar de Andrew y tampoco de Aiden, quería desconectar un poco, sentía que mi alrededor solo giraba en torno a el capullo  y estaba empezando a agobiarme.

- ¿Sabes que estás obsesionado con el café no?

- ¿Y? - dijo bebiendo otro sorbo

- Puedes parar de poner esa cara por favor- Me reí

- ¿Cual?

- Esa, parece que estás teniendo un orgasmo, por dios bébete el café como una persona normal

- Hay un problema con eso

Enarque una ceja curiosa.

- Que no lo soy bebita - dijo con una sonrisa orgullosa.-Pero ni yo, ni tú ni nada porque al fin y al cabo, ¿Qué es lo normal? - continuó

Aquello me hizo pensar porque tenía razón, ¿Qué se supone que es lo normal?, ¿Quién nos enseña que es lo normal o no?

- ¿Te has puesto filosófico? - solté una risa irónica

- No, simplemente pensaba en eso el otro día.

Asentí aun pensando en sus palabras anteriores.
.....

- ¡Cómo se te ocurre llamarle vieja verde a esa señora! - exclamé de camino a su coche.

- Porque lo es

- ¡Jayden!

- ¡¿Que?! Es verdad

Jayden se había puesto a discutir con una señora en la cafetería porque la señora se nos acercó y nos dijo que parecía si queríamos gritar que nos fuésemos de ahí.Yo no me callada obviamente pero Jayden se puso peor que yo, empezó a chillarla hasta que la señora se encogió en su sitio y se fue.

- Es una vieja verde y fea, ¿Quién se cree? ¿Acaso la cafetería lleva su nombre? - dijo mientras nos subimos al coche

Yo empecé a soltar carcajadas sin poder evitarlo recordando lo que había pasado y Jayden a mi lado se unió.

-¿Te dejo en casa? - preguntó ya calmados

Negué - Vamos al cine - contesté encendiendo la radio.

- Perfecto

Llegamos al cine y después de un rato decidiendo que ver acabamos viendo A dos metros de ti.
Spoiler: salimos llorando

....

Acababa de llegar a casi, visualice a mi madre en el sofá , me acerqué y me tumbé a su lado, apoyando la cabeza en su hombro, ella sólo sonrió. Estuvimos así un rato hasta que habló.

- ¿Así que Aiden no?

Asentí con la cabeza, no tenía sentido negarlo.

- Me alegra que te hayas dado una oportunidad hija

La miré confusa.
- Aria, te he parido, se perfectamente que te ha costado darte una oportunidad para conocerle.

Suspiré y volví a apoyar la cabeza en su hombre, ella movió la mano a mi pelo, acariciándolo.

- Me hace sentir bien , me hace sentir segura.

- Me gusta ese chico para ti- dijo sonriendo

- A mí también mamá-  respondí en un susurro apenas audible.

-Aunque creo que a papa no - y eso  hizo que inevitablemente las dos estalláramos a carcajadas recordando la escena del otro día

- Déjale, ya se le pasará, solo está siendo protector además ni siquiera le conoce- dijo mi madre.