*Precuela y continuación de la Bailarina y el Dominante*
Llamalo obsesión, pero yo lo llamo capricho. Esa dulce niña, de cabello castaño y ojos grandes azules fue mia desde que su padre la llevo a mi negocio. El no sabia que yo soy peligroso, y que...
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Siento la mirada pesada de Sebastián el tiene en su mano un vaso negro de cristal, esta serio me siento intimidada y eso no me gusta... Así que decido voltear el juego... Comienzo a bajar ligeramente mi corpiño y con ayuda de mi pie giro la cama, dándole la espalda... Le di un buen espectáculo... Ahora quito por completo la parte de arriba y la tiro hasta la orilla... Sin verlo. Pongo mi brazo encima de mis ahora pechos desnudos y sigo escuchando música... Escucho National Anthem de lana del rey
Comienzo a cantarla... Con mi pie doy vueltas en el agua, sin dejar de taparme los senos con mi brazo, en mis audífonos sonaba Doin time...
Cierro los ojos un momento y me dejó llevar, un sueño o tal vez algo más invade mi mente...
Veo a Christian Grey, camino a lado de él...
–¿Cuál es tuyo? – preguntó
–Todos–responde el como si nada
Que extraño...
Me tomá la mano y la lleva a sus labios, dándole un ligero beso.
–Quiero tener algo contigo...
Abro los ojos en par en par me quito los audífonos, escuchaba Million Dollar Man de lana del rey, y los lentes al igual que el sombrero y me sumerjo en el agua... Llegando hasta el fondo, trato de mantenerme ahí, hasta que se me acaba el oxígeno y salgo, respiro fuerte y me sostengo de la barda, me quito el agua abundante en mis ojos, y observó una sombra y unos zapatos lujosos, miró hacia arriba encontrándome con sus ojos completamente dilatados, en su mano sigue teniendo su vaso negro de licor, y en sus dedos carga un cigarrillo, me sonríe de lado y yo instintivamente me cubro los pechos y me alejo nadando, buscando desesperadamente el bikini, estaba segura que lo había dejado ahí
–¿Buscabas ésto, amor mío? – pregunta riendo y calando su cigarro
Extrañada por su comportamiento, asiento con la cabeza y me acercó a la orilla de nuevo
El se agacha hasta quedar a centímetros de mi rostro, su aliento choca con el mío, no reconozco el aroma del licor que toma pero si el del cigarro... Gire los ojos y arrugue mi frente
—Damelo—le digo
—Mi pequeña sirena—dice el riendo —No sabes cuanto me pone verte así
—¿Que pasa contigo? —preguntó preocupada
—No tiene qué pasarme algo para estar contigo así —dice el riendo —Tu empezaste, el juego —se acerca a mis labios y los besa ligeramente —Así que yo lo terminaré —me muerde el labio superior, y lo jala hacia el
Una descarga eléctrica baja por todo mi cuerpo, erizando mi piel, el sonríe a mas no poder y se aleja quitándose la ropa
—¿Que hacés? —pregunto extrañada
Tocando me el labio que el mordió
El me da la espalda, deja el cigarrillo en porta cigarros, y también deja su vaso negro... Comienza a desabotonarse el saco y luego la camisa, pero todo de espaldas... Quita su cinturón y baja su pantalón quedando en bóxer
Ansiosa y asustada a la vez, me recargo en el filo y lo veo... Cuando noto que baja su bóxer, cierro los ojos y me tapó con la mano... Pareciendo una niña, aunque no me importa, me pone nerviosa y no me gusta.
Escucho como salta al agua y esta me pega en mi cara respire antes, aunque sigo con los ojos tapados...
Siento su cuerpo cálido rodear el mío, y su aliento en mi oído
—Me pone super duro verte así... Como mi niña pequeña —me besa el cuello—Quiero ver tus ojos —dice el tomando mi mano y bajando la, pero yo aún tenía los ojos cerrados—¿Estas nerviosa? —pregunta el riendo
—No... —agudizó un poco mi voz
—Entonces... —pregunta
Abro mis ojos y lo veo, el sonríe y veo sus ojos totalmente dilatados
—¿Qué tanto te pongo? —suelto sin pensar
El se sorprendió y sonrió más, tomando mis piernas y bajando sus mano a mi trasero, me junta a él, sintiendo su miembro ya duro en mi parte
—Mucho —susurra—Me encantas, y no me cansare en decírtelo, me encanta tu forma de ser, tan entregada, tan ocurrente, tan amarosa—me da un beso largo en mis labios, no me cuesta seguirlo, encajamos perfectamente.
Con su mano siento como va bajando la parte que tenía del bikini, hasta quedar totalmente desnuda, sus besos bajan a mi cuello y es entonces que entra, me dolió como un carajo, no pude evitar dar un gritito
Se detiene y me mira
—¿Te hice daño? —pregunta preocupado
—Un poco—respondo viéndolo
Se acerca a besarme y da pequeños movimientos, lentos. El dolor comienza a disminuir y la excitacion incrementa, sintiendome en las nubes, nunca lo había hecho en una alberca, y se sentía bien, el agua hacía un contraste de temperatura, el me ve y yo le sonrió, nos besamos feroces, con tanta hambre de nosotros mismos que podríamos acabar en cualquier instante, se vuelve salvaje, toma con sus grandes manos mi trasero y comienza a mover más rápido, yo me engancho a su cadera y lo ayudó, comienzo a gemir dejó caer mi cabeza, dejando al descubierto mi cuello, el lo ataca con sus besos y muerde, dejandome una marca
—Ahhh, Sebastián—pronunció —Dame, dame más Sebastián, Oh Dios —pronunció porque está imparable
Se vuelve más rápido el movimiento, hacemos ruido con el agua, y está sale, porque escucho como cae...
—¡Oh Dios Sebastián! —grito
Me enderezó, tomo su cuello y lo abrazo, gimiendo en su oído el parece ser una máquina, no emite nada esta moviéndose hasta que siento como se tensa y finalmente lo escucho jadear, su liquido entra en mi, se siente caliente al contraste del agua, me quedo sin energías el aún me sostiene y yo me sostengo de él...
Algo le pasa, el no es así, el no me trata así, el está mal... Él es oscuro...
Siento como sale, yo me acerco a él para abrazarlo, y aún puedo sentir como sigue excitado, yo en cambio no. Estoy muy cansada y solo quiero que el me sostenga fuerte, que me abrace y estemos juntos
Sus brazos rodean mi cintura, atrayendo me a él, lo miró... El me regresa la mirada, la tiene tensa e intensa, en cambio yo me siento mal, aterrada y no me gusta.
