Irracional I: La Búsqueda. (Finalizada)

Capítulo 7

Cuando eres humana, tu mayor enemigo es el tiempo, corres de aquí para allá tratando de que no te gane. Sin embargo, no es solo una persona, es toda la humanidad y eso se resume a que hacen lo mismo, se visten igual y tiene semejantes objetivos. Pero, ¿y si ya le ganaste al tiempo? Bueno, pues bienvenida a mi mundo, ya no estás viva.

La noche era espesa, sin luna y fría, aunque yo no notara el cambio de temperatura. La avenida principal estaba atestada con el tráfico, podía vislumbrar miles de luces a mi alrededor y no entendía cómo era posible que se desarrollaran carreras sin que fueran descubiertas pues eran ilegales. Por fin nos estacionamos a un lado de la carretera dentro de un interminable, incluso para mi visón, túnel. Sky se coloca detrás de mí, con sus manos en mis hombros y me dice al oído.

— Esto es una de las cosas más emocionantes que vas a ver. — sonríe. Guía mi cuerpo hacia adelante, ni siquiera sabía lo que se suponía que viera, no había nada excepto vehículos. Avanzamos casi un metro cuando mi vista se tornó borrosa por un segundo y de repente surgieron frente a mí unas 100 persona. Los observé a todos con más detenimiento, eran vampiros la mayoría. Chicos y chicas bailando con la música a todo volumen, cabellos rosas, negros, amarillos, verdes, azules, rojos y demás sobresalían entre la multitud. Las mujeres se vestían provocativas y algunas eran objeto de atención de hombres perplejos con el movimiento de sus caderas. Sky seguía detrás de mí con sus brazos alrededor de mis hombros y su cabeza encima de la mía (era mucho más alto que yo).

— Así que esto es una fiesta de vampiros. — comento con una sonrisa pegada en el rostro.

— Y de magos, hombres lobos y cualquier especie que se presente. — me dice un chico que se acerca con la mirada fija en mi amigo.

— ¿David? — le pregunta. — Amigo, ¿en dónde te habías metido? — Sky se suelta y estrecha la mano del otro. — Te perdiste la carrera pasada, Miranda humilló a Carlos de una manera... — se interrumpió al notar que la mirada de David se posó en mí. David era un cuarentón con poca barriga, de cabello corto y negro

— ¿Es tu novia? — le pregunta. Sky y yo nos miramos y nos empezamos a reír como tontos.

— No, es mi mejor amigo. Mi nombre es Hope. — le contesto.

— ¿Entras hoy? — le pregunta David, Sky niega con la cabeza. — ¿Y tú?

— Ehhh... — ¿entrar a qué?

— No, preferimos observar.

— Tú te lo pierdes. Tenemos un nuevo competidor que se jacta de ser el mejor.

— Ya, seguro es un creído. — comenta sin darle importancia.

— Esperábamos que le partieras el trasero en la pista, pero disfruta de "tu mejor amiga" — le dice con algo de sarcasmo.

— No lo tomes en serio. — me dice mientras arrastra su moto hacia la multitud y la coloca en una esquina apartada, pero dónde se podía ver el espacio vacío destinado a la carrera. Me recuesto al vehículo y él hace lo mismo. La multitud grita emocionada cuando aparecen 2 tipos, uno mantenía su cara oculta por el casco y el otro con piercings por toda la cara, y una chica (que debe ser Miranda porque su nombre salía de la muchedumbre) con la mitad del pelo negro y el otro blanco. Los tres se dieron la mano con una sonrisa en rostro. Eso solo mostraba que no les importaba quién ganara o perdiera, lo que hizo que sonriera. Durante la primera carrera Sky abuchea y grita como loco, hace tiempo no lo veía tan feliz. Creo que en un intento de sentir lo mismo me acerque y coloque mi cabeza sobre su hombro. Un segundo después él pasó su brazo por detrás de mis hombros sin prestarme mucha atención. Se declararon ganadores Miranda y el chico misterioso. En la otra, la chica echó a perder su reputación y todos se decepcionaron. Al parecer por el chico nadie hubiera apostado, como si no lo conocieran, era el nuevo competidor. David sale de la multitud, alza sus manos y exclama:

— ¡Parece que tenemos un campeón! — bien que decía yo que era el promotor. —¿Quién quiere una última carrera?

— ¡¡¡¡¡Siiiiiii!!!!!

— ¿Quién se atreve? — pregunta.

— Yo tengo una sugerencia. — comenta el ganador. — Sky, ¿por qué no vienes y lo hacemos como en los viejos tiempos? — dice mientras se quita el casco y sale a relucir su pelo color rojo.

Por momentos sentí la tensión apoderándose de su cuerpo hasta que se apartó de mí y encaminó hacia el pelirrojo.

— Evan.

— Vamos Sky, ¿tienes miedo?

— ¡Sky!¡Sky!¡Sky!¡Sky! — parecía que todo el orgullo de los espectadores lo hubiera puesto en manos de mi amigo. Él se quita su cazadora y los zapatos y me los da quedándose solo en camiseta y jean. Ni siquiera le pregunto lo qué está pasando pues muestra firmeza en sus pasos hacia Evan. Me llama la atención que no se lleva la moto.

— ¡Chicos, creo que esta noche veremos algo inolvidable! — David volvió a alzar la voz y se posó a un metro de distancia entre los dos competidores. — ¿Listos? — sube un brazo y un minuto después lo baja.