A veces cuando tratas de huir, te acercas más a esa realidad de la que quieres escapar. ¿Por qué? No sé, supongo que no lo puedes evitar, que es parte de lo que la vida te reserva.
Laura fue acorralada entre la soledad y la desesperación. Huir equivalía a suicidarse y esa noche ella no planeaba que sucediera; estaba convencida de ser aceptada. Después de haberlo ayudado en tanto ¿Por qué no? Sí, era linda, cool, simpática, generosa, alegre e inteligente. Cualquier hombre se fijaría en Laura. Sin embargo, eligió al equivocado y la frustración del rechazo la empujo hacia la muerte. En su forma actual solo quedaba algo de su otra vida: el golpe en su cabeza afectó su cerebro y así pasó a ser vampira.
Ahora que Laura estaba loca, no podíamos dejarla circular sola. Estábamos seguros de que ya había atacado a su primera víctima y confiábamos en que el ciclo de alimentación la detuviera hasta poder encontrarla. Según Sky después de beber sangre, la sed desaparece por un tiempo indefinido, diferente en cada vampiro. Él cazaba cada quince días y yo aún no la sentía, pero ¿cuánto aguantaría sin ella?
Mi amigo no quiso contarme los detalles de la muerte de Laura. Solo sabía que estaba enamorada y deliraba. Tampoco quise preguntarle sobre la conversación con Evan ni sobre los Puros. Algo me decía que sus historias no acababan así, sobretodo cuando me ardía el cuello.
— Oye, ¿por qué no te miras al espejo? — sugirió esa misma noche a las 3:00 am.
La transformación se completaba. Observé mi piel palidecerse en el rostro, los triángulos entrecruzados hacerse más oscuros, mis labios seguían rojos, quizá manchados de sangre; y mi cabello lacio ya era blanco. Sin embargo, las cejas y pestañas permanecían oscuras, lo que hacía resplandecer más el azul de mis ojos. Estos ya no estaban apagados, sino que sostenían una mirada salvaje. Él, detrás de mí, seguía observándome, volví a recordar a los Puros e instintivamente cubrí mi cuello con el cabello. Yo sabía que esa marca no era común y aunque tenía dudas no quería preguntarle de qué se trataba.
— ¿Cuándo crees que necesite alimentarme de nuevo?
— No lo sé Hope. — hizo una pausa — Oye...— dijo vacilante — Sé que es algo repentino y no quiero que pienses mal, pero.... Ven a vivir conmigo.
— Vale
— Sabía que dirías eso, pero debes tener en cuenta que no puedes andar sola por ahí y tampoco vas a volver con tus padres, lo que implica que — se detiene y parece reaccionar — Ok, dijiste que sí. — me empiezo a reír de sus palabras.
El sol se asomaba en el horizonte, eso significaba que nuestras fuerzas se agotaban y también las de Laura. Era el momento perfecto para salir a buscarla. El sol nubló mi visión por un segundo cuando salimos, la luz seguía debilitándome y anulando las habilidades de vampiro.
—¿Por dónde empezamos? — me pregunta Sky.
— Vamos a su casa, supongo que será un refugio después de haber asesinado a alguien. — le respondo tomando el sencillo casco que me ofrece.
— ¿Crees que...? — se interrumpe a sí mismo cuando pasa el pie por encima de su motocicleta negra y se coloca su casco.
— ¿Qué? — le pregunto a la vez que me subo detrás de él, lo abrazo por la cintura y apoyo mi mejilla en su espalda
— Nada.
Arranca el motor y acelera. El viento movía mucho mi cabello, lo que significaba que era fuerte y veloz pero aun así lo sentía suave. Igualmente, si no hubiera visto el indicador de velocidad, habría jurado que nos movíamos a unos 5 km/s, pero Sky se mantenía a casi 150 y aun así tenía el control de todo.
— Ya entiendo porque te encanta esto. — comento.
— Esto no es nada. — me dice y siento la emoción y la adrenalina fluir por su cuerpo y el mío. —Hay carreras en las noches y lo mejor de todo, no hay reglas. — de solo pensarlo sonrío. Si hay algo que me gusta de esto es la velocidad y el misterio que le proporciona a mi rutina. — Te voy a llevar una noche.
—Estoy segura de que me gustará.
La idea de cambiar por completo me llamaba la atención cada vez más, por eso ya a los dos días de mi transformación estaba decidida a no llevar una vida normal como hacían la mayoría de los vampiros (por supuesto, sin contar la alimentación); sino que estaba dispuesta a llegar más allá de descubrir mi origen pues siempre supe sobre la existencia de algo fuera de lo común. Quería conocer mi nuevo paraíso. Todo esto era la única coincidencia entre Laura y yo, solo que ella estaba loca y no podía controlarse, pero más que eso; no quería controlarse. Ese día, cuando llegamos a su casa, había un baño de sangre por todo el suelo. Los cadáveres de sus padres yacían hechos pedazos por toda la habitación. El cuarto de mi amiga estaba casi vacío. Se llevó sus pertenencias y se perdió en las calles.
Unos días después Sky desapareció sin aviso previo y regresó casi en la noche, más vivo que nunca. Me acerqué a él y tomé su mano. Al mínimo de contacto con su piel sentí la energía brotando en su interior, la fuerza y solidez que formaba su cuerpo y también un poco de nervios. Entonces supe que había ido a cazar.
— ¿Vamos esta noche? — me pregunta de repente soltando mi mano y peinándose el cabello hacia adelante. — ¿No tienes sed verdad? — niego con la cabeza — Entonces te llevaré a las carreras. Como Laura no aparece, creo que es mejor dejar de preocuparse por ella; cuando quiera que la ayudemos vendrá. — él tiene razón, el problema es que nunca volvió.
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Irracional I: La Búsqueda. (Finalizada)
FantasíaLIBRO I COMPLETO EN EDICIÓN Una chica como yo quizás nunca debió ser humana y antes de conocer el mundo en que vivo, sabía que no pertenecía a ellos. Es irónico tener que abandonar a quienes quiero por un típico accidente de tránsito cuando jamás fu...