Las praderas, siempre han tenido peleas contra los desterrados, en especial con las hienas.
Si no se hace un cambio, esto seguirá así... siempre...
Kion no lo permitirá.
Kion, el cachorro de León, líder de la guardia del león, protector de las tierr...
¡Lectores! ¡Aviso! Este capítulo puede que resulte fuerte para algunos.
Aquel día, aquella celebración iba a marcar la vida de muchos animales... quedarán asustados... traumados... todos con recuerdos tristes...
...
Kion estaba muy seguro de que Janja había sido el culpable del desastre, el y sus hienas. Kion no dudó y decidió contarle todo a su padre. Se dirigió a la roca del rey y le contó la situación de las praderas... quien respondió con un tono de preocupación. —Volver a tener a Janja como enemigo es algo grave, Kion... —dijo el rey, en la punta de la roca del rey junto a su hijo, mirando las praderas, observando todos los territorios de su reino — ¿que fue lo qué pasó Kion?
No tenía planeado el cachorro de León que su padre le preguntara eso, ¿por qué Janja cambió? Kion miró hacia abajo mientras agachaba sus orejas. —No era mi intención, no quería lastimarlo y menos dañando —decía Kion mientras se aguantaba las lágrimas —tenía miedo, me daba miedo decirle, y lo consideraba un amigo... —pensó —cuando viví unos días en las lejanías, Kiara iba y me traía comida, solo para mi ya que para Janja y sus hienas no alcanzaría —pauso un momento —no quería decirle en el momento, sentía que se iba a enojar, y... y... me daba miedo... —suspiró.
—Kion —empezó su padre — ¿como estabas seguro de que Janja se iba a enojar? —preguntó Simba. Kion se quedó sorprendido... puede que no se hubiera enojado... como podía que si... —No lo intentaste, así que podía que te hubiera comprendido —le sonrió. En ese momento, Kion aprendió algo, que no podía sacar conclusiones así, no podía estar seguro de algo sin haberlo intentado. Iba a asentir con la cabeza, cuando recordó algo más que le había dicho Janja, que fue una de las cosas que más le dolió...
— ¿En serio creíste que antes quería ser tu amigo? Para ti era una oportunidad para la paz, para mí la victoria, conquistar las praderas...
Recordó ese momento, lo había olvidado. —No papá... no me iba a perdonar... —dijo Kion con una mirada triste. — ¿Por que Kion? —preguntó sorprendido Simba. —Por que Janja me mintió todo el tiempo... me estaba utilizando...
...
Nada termino mal, no se enojo su padre, se preocupo por el, y por el odio que tenía ahora Janja.
Sin darse cuenta, se estaba dirigiendo y echando en la misma colina donde acostumbraba a llamar a su abuelo Mufasa para que le dé consejos. Y ahí estaba. Sin darse cuenta. Cerró los ojos, y poniendo sus patas delanteras en su rostro, empezó llorar, a desahogarse de todo el peso que tenía. Perder a un amigo, y que se vuelva en su contra de nuevo. Los nuevos problemas que vendrían a las praderas...
Pero de pronto, una luz empezó a tocar su rostro... y apareció su abuelo. Mufasa. Rápidamente Kion se secó las lágrimas. —A-abuelo —dijo sorprendido Kion por verlo, no esperaba verlo en ese momento... ademas no lo había visto hace tiempo... ¿que pensará el? Se paró rápidamente.
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