XIX

35 4 0
                                    

SCARLETT

-Ne saluez-vous pas vos parents avec respect?-pregunto en una exquisita pronunciación francesa la señora que supuse que era su madre.

La mujer tenía unos rasgos muy perfilados y femeninos, con pómulos marcados, nariz pequeña,ojos felinos de color avellana y labios carnosos pintados de un rojo matte . Se parecía mucho a su hija pero su pelo perfectamente engominado y recogido en un moño en la coronilla era castaño claro con reflejos rubios como el de Aless. Vestía un traje que se componía de una falda negra un poco por encima de las rodillas que se le ajustaba perfectamente a sus curvas, una camisa blanca sin ninguna arruga,una chaqueta elegante del mismo negro que la falda que solo estaba cerrada por el botón central y unos tacones de aguja también negros. En su brazo derecho descansaba un bolso con un estampado de piel que debía de costar un riñón.

El hombre a su lado era muy parecido a Marc y Matt; su cara estaba inexpresiva, sus ojos grises con reflejos azulados recorrían toda la sala y sus manos estaban en los bolsillos de el pantalón de su traje negro con corbata. Tenía el pelo negro azabache como la noche perfectamente engominado hacia atrás de tal manera que era imposible que se le escapara ningún pelo, sus fracciones muy varoniles era muy parecidas a las de Matt y Marc. Era muy alto y para colmo desprendía un aire arrogante y poderoso.

-Bonjour, mère-saludó Aless cortésmente en francés.-Bonjour, père-

Su madre asistió con la cabeza en señal de saludo y yo me fijé de como Matt la miraba asqueado, Marc no levantaba la mirada de la mesa y Céli se mantenía callada.

-Comment ça va à l'école?-siguió preguntó su madre para intentar saber más de su vida por lo que pude deducir.

Ninguno de sus hijos contestó así que su madre fijó su mirada en mi por primera vez como si se acabara de dar cuenta de mi presencia en la sala.

-Qui êtes-vous?-me preguntó analizándome fijamente con la mirada.

A pesar de mi básico nivel de francés supe que me había preguntado que quién era pero aún así me quedé un rato dudando si contestarla.

-Je suis Scarlett, une camarade de classe de Céli et Matt- conseguí decir con el acento más francés que pude imitar.-Ravi vous rencontrer-

Note como ahora era su padre el que me analizaba con la mirada.

-Américaine-murmuró la mujer y pinto en su cara la sonrisa más falsa que había visto en mi vida antes de saludarme en inglés.-Encantada, yo soy Loana Dumont, la madre de Alessandro, Marcus, Matteo y Céline Dumont-

No me costó nada darme cuenta que a aquella mujer no le agradaba lo más mínimo aunque tampoco es que ella me cayera bien.

-Un placer señora Dumont-la salude de nuevo en inglés lo más amable posible.

Acto seguido la madre de Matt y aquel hombre que supuse  que era su padre pero no había abierto la boca en ningún momento, me ignoraron de nuevo y se acercaron a sus hijos para que la señora entablara una conversación en francés que por el tono de voz supuse que era una regañina.

[...]

Unos minutos más tarde; Matt consiguió escabullirse de la regañina que su madre. Se acerco a mi quien seguía sentada en la silla frente a la mesa de la que los 4 se habían levantado.

-Lo siento, Scar- se disculpó en un susurró.- No nos avisaron de que venían, realmente creía que nunca vendrían a visitarnos-

-No pasa nada, Matt-le dije para tranquilizarlo ya que se le notaba muy alterado por la presencia de sus padres.-Pero creo que esto es muy familiar para que me quede, será mejor que me vaya, ya nos veremos mañana-

Matt intento que me quedara; me ofreció ir a su cuarto o hacer lo que yo quisiera, pero realmente en aquel momento lo único que me apetecía era irme a mi casa, tumbarme en mi cama e intentar dormir y si había suerte no tendría ninguna pesadilla.

[...]

Matt me llevo a casa en su moto;durante ese periodo estubo muy callado y distante. Baje de ella cuando estaba justo enfrente de mi casa y entre en esta demasiado cansada como para darme cuenta de la presencia de mis padres y mi hermano cenando en la mesa del salón.

-Scarlett-me llamó mi madre.- Te he llamado 5 veces,¿Es que no miras el móvil o que?-

No estaba de humor como para curarme una mentira así que la dije la verdad.

-Estaba en casa de Matt y tenía el móvil apagado-la confesé.

-Hija, te dimos un movil con la concion de que lo usaras para avisarnos de a donde ibas-recalco mi padre seriamente cuando mi madre le pego un codazo por debajo de la mesa para que dijera algo.

-Os prometo que la próxima vez os avisare-les comente y ambos asintieron con la cabeza mientras me sentaba en la única silla vacia que quedaba en la mesa.

Frente a mi había un plato de pasta carbonara que a pesar de no tener ni el más minimo apetito me lo comi lo más rápido que pude a regañadientes para escabullirme a mi cuarto.

[...]

Ya finalmente en mi cuarto, ajena a la convenversación tan sosa de mis padres que seguía teniendo lugar en el salón, me tire a la cama y encendí el móvil para hechar un vistazo a  las últimas notificaciones que tenía.

5 llamadas perdidas de Mama.

2 mensajes de Jace preguntandome donde carajos estaba.

7 mensajes del grupo de clase pidiendo los deberes del lunes.

y 3 mensajes de Matt que me hicieron sonreir como una boba.

Abrí el chat y leí los mensajes.

Hola, nain

No se si te apetecera, pero Dennise me ha preguntado si querias mañana a las 8:30 p.m. venir a cenar a su restaurante conmigo, mis hermanos y obviamente Agathe.

Sonreí de nuevo.

Agathe y Dennise me habían caido estupendamente cuando las conocí, y los crêpes que preparaban eran realmente una delicia para cualquier paladar.

Iré, nos vemos allí

Aquella fue mi respuesta, deseando por alguna extraña razón, que las 8:30 p.m de mañana llegasen ya.

¿De que están hechas las estrellas?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora